Los caínes del Guayas ya están contentos al haber logrado el desmembramiento de la provincia auspiciados por desprestigiados congresistas quienes de la manera más inmoral, y con la esperanza de que con esa vil actitud no serán echados del Congreso, procedieron a votar a favor de la quizá más canallesca propuesta que se haya dado en la historia del país, esto es, el cercenamiento de la provincia del Guayas.
Si bien es verdad que entre los votantes hubo una infame fanesca de partidos políticos como ser el PRE, ID, UDC, MPD, ex RED además de los “MANTELES INDIGNOS”, no es menos cierto que la mayor culpa recae en representantes del Guayas quienes no solo tenían la obligación de votar en contra de la tal moción sino que debieron haber puesto el grito en el cielo defendiendo a la provincia que los vio nacer como lo hubiera hecho todo ser bien nacido, pero prefirieron unirse a los otros malquerientes formando una horda arropada en su propia sinvergüencería. Los guayasenses tenemos identificados a éstos pseudos representantes que con sus almas rastreras de reptil se prestaron para tan abyecto propósito.
Ganapanes, gaznápiros, y gandules peninsulares quemaron y vejaron a la bandera de Guayaquil durante una orgía de odio; seguidores inconcientes bajo las directas órdenes de los mentalizadores de la llamada provincialización, para su propio regocijo y el de los demás enemigos de Guayaquil y de Guayas.
Hay que recordarle a ésta detestable gentecilla que la bandera que ultrajaron es la misma que flameó gloriosa en el Guayaquil de José Joaquín de Olmedo el 9 de octubre de 1820, día en que se dio el verdadero grito de independencia en el Ecuador. Es la misma bandera que se elevó victoriosa el 24 de mayo de 1822 en las faldas del Pichincha cobijando a un ejército formado y subvencionado mayormente por guayaquileños…Y todavía hay irresponsables que se permiten decir que aquel miserable acto “No es para tanto”.
La acción de la quema de la bandera de Guayaquil va más allá de un hecho que debe ser sancionado con todo el rigor de las leyes; es, además, el reflejo del odio hacia Guayaquil y los guayaquileños fomentado por los dirigentes de la península guiados por la mano del economista.
Ahora sí, éstos ingratos y malos peninsulares imploran a los guayaquileños para que vayamos a la “nueva provincia” mostrándose con sentimientos contrarios a los que verdaderamente tienen.
AYER DIJERON: Malditos guayaquileños, pelucones, ladrones enemigos de la península, nunca mas regresen por aquí, al tiempo que cerraban la carretera para impedir el paso de los guayaquileños a la península ocasionando irreversibles pérdidas económicas a los que sí quieren trabajar.
HOY DICEN: Hermanos guayaquileños, vengan que los esperamos con los brazos abiertos, vengan que éstas playas son de ustedes, olvidemos lo que yá pasó y unámonos pues todos somos hermanos… Léase vengan a dejar sus dólares, no nos maten de hambre, sin ustedes estamos perdidos.
MAÑANA DIRAN: Guayaquileños malas personas, nos abandonan, así no se trata a quienes los queremos, están alentando la desunión entre hermanos cambiando a la península por las playas de General Villamil, Posorja y Data..
Guayaquileños, con nuestras acciones se demostrará que NO necesitamos a la península, al contrario, la península SÍ nos necesita.
Los guayaquileños SÍ fuimos consecuentes con la península, la península NO fue consecuente con los guayaquileños.
Los guayaquileños SÏ respetamos a la península, la península NO respetó a los guayaquileños.
Sobre éste tema, que es reflejo de la miseria humana, todavía falta mucho por decir.
AHORA SÍ, EL RELAJO YA ES DE TODOS
La bandera de Guayaquil pesa mas que la tricolor, la canallada en contra de Guayaquil es a nivel nacional, porque alla en la Catedral de Quito la que esta en la plaza de la independencia, hay un hecho realmente vergonsozo y que raya en ignorancia.Ahi en el sitio donde yacen los restos de Sucre, en una de su paredes hay una pintura de Abdon Calderon abrazando la bandera tricolor. Mentira mas vergonsoza ya que esa bandera por historia es la bandera de Guayaquil Independiente y no la bandera tricolor.
Abdon Calderon fue el abanderado del Batallon Yaguachi que peleo heroicamente en las faldas del Pichicha y libero al Ecuador.PROTESTEMOS POR ESO TAMBIEN!!!
Mi querido Arturo veo un comentario de otro Gustavo que no soy yo en el que dice que la bandera de Guayaquil pesa mas que la tricolor, bueno creo que estamos llegando a excesos absurdos,para mi la culpa principal es como bien lo dijiste de los representantes del Guayas y también en parte de sus autoridades actuales que no supieron parar esto a tiempo, en cuanto a lo de la quema de la bandera debes de recordar que cuando Guayaquil hizo ese absurdo reclamo por lo de Aspiazu hubieron Guayaquileños que también quemaron la bandera de Pichincha y ahí nadie dijo nada, de que nos quejamos entonces, no es que esté a favor de la Provincialización de la Península pero esa es una vieja aspiración de hace mas de 30 años te lo digo yo como ex peninsular,lo que pasa también es que estos 3 alcaldes Vinicio, Dionicio y Patricio los 3 reyes del vicio alumnos de quien son sino de los «mejores»políticos de Guayaquil o no es así entonces que nos quejamos, aquí tendríamos tela para largo que cortar y la podríamos cortar personalmente, mira te cuento desde la época de Larrea Espinoza un viejo alcalde de Salinas y el mejor alumno de la partidocracia Guayaquileña ya se cometían barbaridades que te las podría contar personalmente, pienso que la península fue siempre como dicen el patio trasero de Guayaquil, ahora que la perdimos es que nos lamentamos.