¡Es increíble!. Vivimos una época nueva, diferente, que exige formas distintas de hacer las cosas, nuevos aprendizajes, otras perspectivas; los modelos han variado, hasta las reglas mutan para adaptarse a las realidades imperantes, el internet derriba fronteras y el inglés se convierte -en la práctica- en la lengua universal, los negocios se los promueve de otras formas y los viajes hacia el interior de la mente parecen darnos una idea profundamente interesante acerca de cómo la gente madura y adquiere conocimientos. Todo esto… ¿hacia dónde nos lleva?. Los chicos que hoy tenemos en escuelas, colegios y universidades desde ya comienzan a vivir las consecuencias de tanto desatino en las sociedades modernas. Les estamos heredando las dificultades pero en muy contados casos hacemos lo éticamente responsable como adultos que sería darles al menos las herramientas indispensables para que puedan enfrentar todo lo antes dicho. Me temo… ¡su lucha será más dura que la nuestra!