La migración del campo a la ciudad que se produce desde hace muchos años en nuestro país, es consecuencia de la ausencia de los mas elementales servicios de que adolece el campesino de costa, sierra y oriente, es por eso que en busca de educación, servicios médicos y nuevas y mejores oportunidades los campos van quedando despoblados, sin la necesaria mano de obra para el desarrollo de nuestros campos, lo cual no permite aprovechar muchas de las áreas aptas para cultivo, agregándose la falta oportuna de créditos blandos para el mejor y mas tecnificado uso de sus tierras.
Este fenómeno de la migración nacional es el que ha generado el crecimiento incontrolable de las ciudades que como Guayaquil se constituyen en el centro de oportunidades para las personas de escasos recursos, desbordando el interés de quienes se cansaron de esperar que sus sueños se hagan realidad en la tierra natal, es por eso que junto al calor y hospitalidad, muy original de los Guayaquileños, ha hecho que Guayaquil se convierta en el principal polo de desarrollo del país y su ejemplo haya servido para que otras ciudades como Machala, Cuenca y Quito, se hayan convertido ya en otros importantes polos de desarrollo del país.
Es indudable que Guayaquil por su condición de puerto genera mayores y mejores expectativas de trabajo, su clima uniforme todo el año, sin cambios bruscos, permite que un solo tipo de ropa liviana, nos permita usarlo durante todo el año, lo cual hace que el vestuario sea económico y de uso permanente.
Bajo estas circunstancias, Guayaquil ha tenido y tiene el más alto crecimiento poblacional nacional, generado principalmente por la migración a nivel nacional, la que se ha ubicado en el rango del 70% y solo el 30% es de crecimiento de ancestro Guayaquileño. El crecimiento demográfico de la ciudad ha sobrepasado los límites de control y prestación de servicios generados por la igualmente incontrolada invasión de las áreas periféricas de la ciudad, convirtiéndolas en áreas realmente inhóspitas, que luego deberán ser rehabilitadas por la Municipalidad. Las áreas invadidas superan el 45% del área originalmente urbana de la ciudad.
Las invasiones generan un crecimiento desordenado que se va estabilizando con el asentamiento familiar y la construcción de precarias viviendas, construidas con materiales poco recomendados para el clima y característica de una ciudad de clima tropical y de intensas lluvias.
La migración genera paralelamente otros problemas, pues al radicarse en la ciudad, necesitan generar ingresos para poder vivir y el ingreso se debe conseguir con un trabajo honesto, lo cual crea otra importante acción, la necesidad de crear mas trabajo, el que, no existiendo el desarrollo económico suficiente, ha hecho que se genere la informalidad, la que con poco capital, permite multiplicar los móviles puestos de trabajo, generando otro desorden urbano, que por ser necesario, resulta imprescindible estudiarlo para su ordenamiento y control, para hacerlo útil y rentable para quienes tienen la necesidad de practicarlos. Las bahías, los mercados y las calles de la ciudad han dado cabida a un alto porcentaje de trabajo, el que bordea el 40% de la activad económicamente activa de la ciudad.
La migración nacional, en busca de nuevos horizontes, encontró en esta ciudad un ambiente calido y amigable, para instalar un nuevo techo para vivir, lo que no sucede en otras ciudades del país, por eso Guayaquil es la ciudad con mayor déficit habitacional de todo el Ecuador. Este déficit, no solo corresponde a la falta de viviendas, sino también a las viviendas obsoletas y a las construidas con materiales inapropiados y en sitios sin ningún servicio urbano, constituyéndose estas en las grandes áreas sub-urbanas de la ciudad.
El desarrollo y polarizacion nacional, no se produce por prepotencia o capricho de nadie, sino por la hospitalidad que la ciudad le ha brindado a todos aquellos que han llegado a Guayaquil en busca de una oportunidad para vivir mejor, pues las necesidades materiales se satisfacen mediante la producción de bienes y servicios, con lo cual se logra una importante mejora en el estándar de vida de los seres humanos.
El fortalecimiento de los Gobiernos Cantorales y Provinciales a base de una autonomía y solidaridad humana bien administrada, sin egoísmos ni rencores regionales, es parte importante de la solución al problema de la migración nacional, que Guayaquil la ha asumido con creses, por eso su área urbana y su población han crecido muy aceleradamente, por ser el mas importante polo de desarrollo del país. De ahí su slogan GUAYAQUIL POR LA PATRIA, no obliguen a cambiarlo. Guayaquil es y quiere seguir siendo solidaria con todos sus hermanos ecuatorianos.