Tengo la intención de escribir acerca del proyecto de reforma tributaria, pero el formato del blog no me alcanzaría para una sola entrega. Debería escribir al menos 5 artículos para hacer justicia a lo bueno, lo malo y lo feo que allí se presenta (claro que si los lectores manifiestan ese interés a través de los comentarios con mucho gusto haré ese ejercicio). Para esta ocasión, quiero hablar de un aspecto puntual de la reforma tributaria. Pero que ilustra de manera patética como funcionan los incentivos económicos cuando cambian las reglas del juego en el tema impuestos. Esto es, se trata de un ejemplo de por qué subir impuestos no garantiza más recaudación, distorsiona el mercado y crea una oportunidad para la corrupción a través de la búsqueda de rentas.
El día Lunes 17 de diciembre, luego del envío del proyecto de reforma tributaria a la Asamblea, se publica en El Universo que se cobrará un impuesto a los consumos especiales (ICE) sobre los vehículos. ICE que se cobrará de manera escalonada: 35% para carros de más de $40 mil, 25% para carros entre $30 y $40 mil, y así en forma descendente. Las típicas excepciones para camiones, camionetas y otras de ese estilo no dejan de aparecer.
Casualmente yo he estado en búsqueda de remplazar mi carro en estos días del anuncio del proyecto en cuestión. Para que se hagan una idea, si compran un carro de $30,000 luego del ICE deberán pagar $7,500 adicionales. Si el carro fuera de $40,000 deberían pagar $14,000, pero si el carro vale $39,999 en cambio pagan $10,000, o si se trata de una camioneta no pagan nada por ICE. Este tipo de impuesto es conocido como “impuesto proporcional, progresivo con excepciones para el sector generador” como dirían los kikuyos. Más alta la tasa mientras mayor la base.
Los problemas con esto son varios. Primero problema, elevar tanto un impuesto no es sensato para aumentar recaudación. El ICE a los vehículos no generará recaudación en la magnitud que generará distorsiones sobre el sistema tributario. Por ejemplo, el impuesto a los vehículos que se aplica sobre el mismo universo no significa ni el 2% de la recaudación total del Ecuador y un cálculo a mano alzada nos dice que este ICE no llegará a duplicar ese porcentaje. De hecho, no he visto ningún estudio que acompañe los resultados esperados de esta medida. Generalmente, no los suelen hacer porque son complicados, y lo que les urge a los gobernantes es cobrar. En resumen, este impuesto si el propósito fuera recaudar es malo. Los economistas socialistas me dirán: “es que se debe mandar una señal de que se quiere redistribuir la riqueza”.
Segundo problema, genera distorsiones exageradas. Un carro por un centavo mas barato puede llegar a tributar hasta $4,000 mas, y si es camioneta puede llegar a pagar $14,000 menos. Súbitamente, nos han alterado los criterios de elección para preferir camionetas mas baratas. Esto porque las camionetas, se dice, ayudan al sector que produce. Sin embargo, no se consideran a los carros a Diesel que consumen menos del subsidio a los combustibles o carros con un motor de una combustión mas limpia para el medio ambiente. Como si la señal de gravar con un impuesto específico a los carros no pudiera enviarse para reducir el impacto en el medio ambiente de la combustión, y el impacto en las cuentas fiscales por los subsidios a los combustibles, entre otras. Pero no, “es que se debe mandar una señal de que se quiere redistribuir la riqueza”.
Tercer problema, este tipo de tasa creciente con el valor va a producir búsqueda de rentas. ¿Qué cree va a pasar ahora que por un centavo menos un carro vale hasta 10% menos? Pues que en la CAE todos los carros que antes valían $40,000 empezarán a valer $39,999 y así similarmente con los otros rangos de precio. Y los agentes de aduana encontrarán maneras “creativas” de desglosar la importación para que los carros no entren en los rangos superiores. Aunque por supuesto, no faltará el burócrata que propondrán sanciones draconianas para evitar esta corrupción. Pero claro, nunca se atrevan a decirle que el problema fue haber diseñado ese sistema progresivo en primer lugar, porque el problema “es que se debe mandar una señal de que se quiere redistribuir la riqueza”.
Por ultimo, el solo anuncio de la elevación del impuesto ya ha generado una conducta para beneficiarse de la medida. Vaya usted a comprar un auto y todos le dirán, o que están haciendo inventario (¡unos están haciendo inventario desde el 22 de diciembre!) y otros dicen que los carros les salen de aduanas el 2 de Enero. ¿Qué sucede? Debido al alza del ICE todo el stock de vehículos nuevos y usados ha sido revalorizado porque ahora el costo oportunidad de un carro es 15%, 25% o 35% mas caro que antes. En consecuencia todo el que vende un auto quiere aprovecharse para vender el suyo más caro. Esta bien, así funcionan los incentivos económicos. La única desfachatez es que dicen que estos carros están llegando y se desaduanizarán el 2 de enero. Por eso digo: ¡qué alegría saber que tenemos una CAE tan eficiente que trabaja hasta el 1 de enero! Sin embargo a mis amigos los economistas socialistas les tendré que decir imagínese que seria si el objetivo no fuera “que se debe mandar una señal de que se quiere redistribuir la riqueza”. ¡Ups!…ahora les he dado pistas.
¿Esta usted de acuerdo: si o no? No deje de enviarme sus comentarios. Si acaso desea que escriba acerca de la propuesta de reforma tributaria no dude en hacérmelo saber.
Muy bueno su artículo. Espero poder leer sobre la propuesta de reforma tributaria.
Comprendo el deseo de Correa lograr equidad en la nación… pero se equivocó de camino no se trata de lograr un país lleno de pobres,no seria mejor Sr. Presidente que todos fueramos ricos? NO hablo de acumulación de riqueza, es decir lograr una equidad donde todos podamos acceder a servicios públicos eficientes, una jubilación justa, servicios médicos de buena calidad,seguridad, ver en obras nuestros impuestos y sobre todo a una buena educación.
La elevación de Tributos no es la solución, el problema es de fondo, es hacer eficiente la recaudación de estos,es castigar al que no paga, eliminar el sistema corrupto.
Las clases media y media alta desaparecerán,los que hemos trabajado duro y honestamente para lograr lo que tenemos. Los ricos encontrarán una nueva forma de evadir los impuestos, de comprar al gobierno y si no pudieran pues lo venden todo y salen del país a gozar de sus cuentas en los paraísos fiscales.
Correa adelanta a pasos gigantes, no podemos dejar que esto avance o perderemos la batalla. Ustedes por tener acceso a medios de difusión, las personas que tengan contactos en los medios de comunicación deberiamos armar campañas para levantar a la nación, habemos jóvenes con ganas de luchar por los que nuestros Padres han trabajado toda su vida para dejarnos.
Quisiera leer según su criterio el impacto de la Reforma Sr. Rumbea.
Saludos, y no perdamos la esperanza de que el año 2008 nos traiga cambios positivos, los cuales no lograremos si nos cruzamos de brazos.
Lo felicito Francisco me parece esepcionel su analicis siga asi, informando y quitando de la ignorancia a muchos GRACIAS.