Así reza la frase del escudo nacional de Chile, y así pareciera que ha actuado el gobierno de Colombia. Pero déjenme decirles que ahora me siento, más que nunca, solidario con el presidente Correa; porque realmente lo que ha pasado con el ataque de Colombia es inaceptable. No obstante, creo que la tesis esencial de Correa de que la narcoguerilla de la FARC no debe ser catalogada como terrorista se vino abajo por la fuerza.
Primero déjenme citar algunas frases que debilitan nuestras razones en el conflicto. Lo que ha sucedido en Ecuador “es causa de guerra”, Chavez. La gira del Presidente Correa incluye a Venezuela y se dice que “este conflicto debe ser regionalizado”, Correa. ¿Qué significa esto? ¿Por qué no rechaza frontalmente esa sugerencia eliminando de su gira a Venezuela?
“Los radares estaban en mantenimiento” Comandante de la FAE, Gabela. “Gastamos ingentes recursos en la defensa de la frontera norte”, ministro Larrea. Aparentemente, no saben priorizar en que gastan la plata. O el problema de la guerra es demasiado importante para dejárselo a los militares.
Buenos argumentos, han sido los de Acosta: Las acusaciones de Colombia al ministro Larrea son “una cortina de humo para distraernos del hecho fundamental de que Colombia agredió al Ecuador”. “Nosotros no debemos aceptar ni grupos regulares ni irregulares en nuestro territorio”. Bien por Acosta, ojala lo escuche Correa.
Sin embargo, otros no respondieron tan acertadamente. Ante la pregunta de un periodista colombiano de cómo vamos a desvirtuar técnicamente las pruebas de que el ministro Larrea coopera con las FARC: “Ecuador no cooperó, no coopera, ni coopera con las FARC”. “Esas son patrañas”. “Esas son falacias”. Patrañas pueden ser, pero falacias son conclusiones falsas por equivocaciones lógicas del razonamiento y lo que se le pregunta es sobre una evidencia y no una conclusión. Mejor harían en desvirtuar eso como una pregunta no relevante, antes que atender a ella con un error peor.
Mi sugerencia es que el gobierno debe pensar mas estratégicamente para resolver este conflicto. Esto es, debe pensar mejor sus decisiones que Colombia, sabiendo que Colombia esta pensando en decidir mejor que lo que decide Ecuador. En verdad, me parece que el gobierno se ha acostumbrado a no tener oposición. Internamente, hay muy pocos que se atreven a oponérsele a Correa, y peor aun, dentro de este grupo menos son los que tienen autoridad moral o profesional para hacerlo. Por eso, me parece que el gobierno se esta acostumbrando a creer que nadie se les puede oponer.
Sin embargo, en el problema del ataque de Colombia nos aplicaron una dosis de razón y fuerza que es inaceptable. Si regresamos a la tesis de no denominar a las FARC terroristas que tenia el Ecuador, recordaremos que la justificación era no involucrarnos en el conflicto. Sin embargo, las FARC nos ha forzado ha involucrarnos en el conflicto colombiano: ha provocado este ataque colombiano a territorio ecuatoriano, ha instalado bases en nuestro territorio en diversos lugares y ha sembrado dudas en las intenciones de los funcionarios de gobierno ecuatoriano en su intervención en las negociaciones de canje humanitario (patrañas que dicho sea de paso será indispensable aclarar). Por eso digo que las FARC le dio la razón a Uribe y este no las impuso por la fuerza, las FARC resultaron no tan santos como creía el Ecuador.
Presidente, siga usted en su cometido por defendernos del ataque colombiano, creo que ha comenzado con pie firme. Solo le pido que piense la estrategia del Ecuador en un contexto mas imparcial que la opinión política de la mayoría que lo apoya en Ecuador y seguramente le irá mejor. Una sugerencia, seria exigir una declaratoria multilateral de terroristas a las FARC para que ya no solo sea el Ecuador sino toda la región quienes lo cataloguen así. Otra sugerencia, seria exigir en un plan de reparación por los daños causados tanto por el ataque como por las fumigaciones con glifosato, a través de una fuerza internacional que ayude a defender al Ecuador de la invasión de las FARC.
Nota: Esperemos ver nuevos avances en la reunión de Presidentes del Viernes 7 de marzo.
Regreso a los tiempos; bueno, en realidad estuve de viaje y no podía escribir. El problema es que tuve que viajar a Colombia a ayudar a mi amigo a quien confundieron con MARULANDA.
Debemos estar con cuidado, pues vean lo que le sucedió a mi amigo TIROFIJO:
Lo que pasa es que en mi barrio aquí en Esmeraldas tengo un amigo a quien conocen como TIROFIJO, porque tiene doce hijos. Bueno, hace un mes llegaron dos policías encubiertos a mi barrio y preguntaron por TIROFIJO, mis panas del barrio dijeron que sí que le conocen y les indicaron donde estaba. Los dos agentes, el uno blanco con acento gringo y el otro mestizo que hablaba como colombiano, se acercaron a su domicilio, bueno a uno de sus domicilios; el blanco le dijo: TU SER TIROFIJO, él le contestó que sí que así le dicen. El mestizo al verle, le dice al gringo: ?ESTE PARCE NO ES TIROFIJO, EL QUE BUSCAMOS? El gringo replicó, ?pero este SER TIROFIJO, EN LA GUERRA CONTRA EL TERRORISMO de acuerdo a mi presidente MR BUSH, NO HABER TEMOR A EQUIVOCARSE?.
MI amigo les dijo que ESTABAN EQUIVOCADOS;
EL Gringo le contestó: PORQUE NO TE CAYAS!
El colombiano dijo ?VEA PARCE NO ME APLIQUE LO DE COMUNISTA NOSTALGICO, Y ACOMPAñENOS?
Mi amigo nervioso, les acepto la invitación y LES SIGUIO LA JUGADA.
Lo llevan a Bogotá y directo a la chirola; allá le muestran el monitor de una computadora donde se veía a un VIEJO GORDO CON UNA TOALLA EN EL HOMBRO VESTIDO DE MILITAR y le dicen que si es que se ha hecho la cirugía.
Mi amigo se les RIO, ellos se enojan, llaman al Diario EL TIEMPO para decirles que publiquen que ENCONTRARON A TIROFIJO pero que van hacerle la prueba del DNA. Mi amigo les dice que no pierdan tiempo que su tatarabuelo fue SEBASTIAN ANGULO Quiñónez, que su abuelo fue ZENEN TENORIO ANGULO, que su papá es ANTONIO PRECIADO ANGULO y que EL es LUPO CAICEDO ANGULO, que le gusta el coco, que juega al fútbol, que toca la marimba y que podría haberse cambiado la cara y la panza, pero que no tiene billete ?PA?CAMBIA EL COLO DE LA PIE…?