¡ Pues no se va! ¡ Se queda! Tal es el peculiar concepto que sobre la amistad tiene nuestro Presidente para con quienes de ella gozan. Un tema lleno de subjetividades en el que resulta difícil adentrarse cuando el protagonista es nuestro Presidente. Cuando la amistad alcanza grados tan superiores , la solidaridad emerge ciega y de inmediato. Lo hemos visto . Y a través de la retórica presidencial , hasta hemos debido graficarnos aquello de “ poner la mano al fuego”, queriendo demostrar a los demás , con ese cruento y aberrante sacrificio , la inocencia, la pulcritud, la honestidad y las virtualidades que asistirían al funcionario amigo cuestionado. Pero, como dije, el tema es difícil de desmenuzar. Porque a la convicción personal del Presidente se contraponen , sutiles o brutales, evidencias que describen un distinto perfil ético del mismo individuo amparado por el protector paraguas presidencial
El caso es que “los demás” somos la ciudadanía toda ; aquella para la cual un Presidente se convierte en servidor y mandatario. No existe una servidumbre más honrosa y , a la vez, más devastadora, que la que emana de la condición de gobernante de una Nación. Correa, animado de las mejores intenciones y dueño de aptitudes exhibidas en la campaña electoral, debió haber descubierto , desde un comienzo, que la probidad y autoridad moral que de él esperábamos , le obligaba a prescindir de toda retórica emocional en favor de una amistad que, incluso, no juega ni debe jugar papel alguno en el manejo de la cosa pública. Es curioso pero, a mayor severidad y rectitud de un gobernante, descubrimos que mayor es el número de rostros rencorosos de amigos insatisfechos. Estarían dando fe de un buen gobierno.
En el Ecuador campea la mediocridad gracias a la injerencia de la sindicalización partidista y dogmática en la educación pública. De allí que, cada mediocridad que se consienta , cada negligencia que se pase por alto, cada admisión de actitudes que no se sujeten a principios y valores éticos , hacen más daño al mandatario consentidor que – valga la coyuntura – la incursión militar colombiana en nuestro territorio. . Siendo la amistad , por definición, un valor estrictamente individualista y personal, necesariamente ajeno a la función del gobernante , no se comprende cómo este concepto deviene prioritario y superpuesto a los deberes de Estado. Peor aún , exacerbado cuando se suman ingredientes que convierten a los amigos en aliados y cómplices. Peor que peor, en “·compañeritos” , o “camaradas” . Entonces, la amistad pasa a ser máscara encubridora de un sectarismo ciego y torpe, cobijado bajo el manto del poder. De un poder que presuntamente es ejercido en nombre de la autoridad de que se está investido. Lo que se ignora es que, en ese momento, sobreviene el punto de quiebre : mientras más se actúe impulsivamente a cuenta del poder que se tiene , más autoridad y respetabilidad se pierde. Porque el poder alude solamente a ámbitos legales , mientras la autoridad se asienta en lo moral. Y cuando la autoridad decrece , el vacío que ésta deja es compensado con el ejercicio de un poder más autoritario, hasta llegar a lo atrabiliario. Como epílogo, el ya conocido guión , vergonzoso y familiar que no debemos sufrir nuevamente : la anarquía , la protesta , el ocaso , la soledad y el derrumbe. Es que un gobierno que se empeña en imponerse en todo y en hacerlo todo, sólo podrá escoger entre el autoritarismo y la anarquía, aclarando que lo uno no excluye a lo otro. Muy tarde se comprende que la única manera de gobernar es sirviendo, no imponiendo. Y se sirve abriendo los ojos, no incurriendo en ceguera selectiva.
Todo lo nuestro se asemeja al efecto “mariposa”, que describe el aleteo inicial de este delicado insecto en algún lugar de Asia , desplazando una pequeñísima onda que avanza y crece hasta transformarse en un huracán caribeño. El aleteo – el de la amistad – comenzó con las degradantes escenas de los videos de Quinto Pazmiño , grabados – así se arguyó -para enterarse de las interioridades de la delincuencia financiera internaciona.l. Siguió el denunciado acoso sexual del Subsecretario de Gobierno a una decente ciudadana , escándalo en el que el funcionario no pasó la prueba del detector de mentiras. Se sumaron los diezmos para la causa partidista, vieja y corrupta artimaña que se practicó en tiempos bucaramistas, reeditada esta vez por un inmaculado maestro. Y,ahora, la sórdida percepción de acumuladas remuneraciones por parte -hasta ahora- de tres Gobernadores, contra expresa prohibición gubernamental enfatizada por el propio Presidente. Todos los involucrados en esta nauseabunda reseña deben sonreír despectivamente , alzados de hombros . Son “amigos” y, por serlo, son honestos, pulcros, compañeros, camaradas y correligionarios, hermanados en la gran causa revolucionaria…. ..aunque “los demás” no piensen igual. “ La amistad es la amistad” , suele decirse para consagrarla como un valor superior. Por eso, ¡ no se irán ! Y aunque uno ya lo hizo gracias al inesperado desacato del TSE al presidencial concepto de amistad , quizás lo veamos retornar. La amistad exigiría desagraviar a ciudadano tan impoluto .
HAY UN REFREN QUE DICE;
dime con quien andas y te dire quien eres..
CORREA SE VE QUE DEFIENDE A CAPA Y ESPADA A SUS AMIGOTES Y ASU PROFE..
MIENTRAS EL PAIS SE HUNDE…EN MISERIA
Y HAMBRUNA..
LOS HOMBRES SE DIVIDEN EN DOS BANDOS LOS QUE AMAN Y CONSTRUYEN, YLOS QUE ODIAN Y DESTRUYEN..