Con bombos y platillos se anunció por parte del gobierno las medidas a favor de los migrantes, para que puedan volver al país, con sus atos, garabatos, herramientas, carros usados, etc. Realmente una buena medida, solo que hay que aclarar que ya existía, menos lo del carro.
O sea que un migrante que volvia podía hacerlo trayendo todo, esta disposición existe desde la Ley Orgánica de Aduanas del año 1974, no es invento ni beneficio del actual gobierno. Lo único que se agrego fue lo del carro, pero ¿Cuál migrante quiere volver al Ecuador para quedarse?, empezando por ahí.
El traer su menaje de casa estaba permitido por las leyes aduaneras anteriores, así como la traída de las herramientas y artículos propios de su artesanía u oficio. La mentira de la bondad se termina de retratar con las dificultades que se presentan para la desaduanización de los equipajes y menajes de casa, cuyo trámite se demora alrededor de dos meses en aduana, entre la liberación y el corretaje de papeles, creando casos en los cuales muchos se han visto obligados a dejar abandonados sus enseres, porque el bodegaje ha resultado mas caro que el contenido real.
Se esta haciendo publicidad que se ha liberado del arancel a muchos productos, pero en realidad el costo mayor es el del bodegaje y el robo en los patios, además del túnel que ya esta funcionando, según mis fuentes, con alrededor de quince contenedores semanales a un costo de treinta y cinco mil dólares cada uno, que seguramente van alimentar la necesidad de dinero para la propaganda del “Si”. Entonces la idea que existía que la aduana estaba funcionando de otra forma, esta equivocada, o no se si decir que equivocada, porque se parece a la que existía en la época del Dr. Noboa, amnistiado recientemente por la Asamblea de Acuerdo País, cuando se hacían milagros patentados por el Cura Flores y otros Ángeles mas que mientras rezaban, pasaban los contenedores y después por milagro del Curita de marras, la plata sucia llegaba hasta altos estratos, al respecto presenté denuncias en mi columna del Diario El Telégrafo, la que curiosamente nunca fue atendida. Al cabo de algunos años se encontró que si había sido realidad lo denunciado y eso que nunca se investigo todo lo ocurrido, asumo que ahora será igual.
Para colmo en la Aduana de Alianza País se están eliminando a los Agentes de Aduana pequeños, los que trabajan con uno o dos despachos, o sea que se eliminan aquellos que ejercen el oficio en pequeño, y se esta dando la oportunidad a los grandes, únicamente a las corporaciones de despacho y transporte o a las empresas importadoras, a las cuales se les va a obligar a tener su propio agente de aduana, eliminando así un importante aporte del pequeño obrero, o sea un ataque directo a los pobres.
Pero existen otras perlas mas, se continua permitiendo la importación solo de vehículos nuevos, del año, esta importación esta sujeta a restricciones mediante medidas para arancelarias, que impiden que cualquier persona pueda importar un vehiculo, auspiciando un verdadero oligopolio en dicho ramo de importación. No se han implementado medidas para permitir la homologación del registro sanitario en la posible importación de productos alimenticios o de consumo humano sometiendo al importador a un vía crucis para obtener un Registro Sanitario anticuado y arrevesado que no protege ni cuida nada; sino intereses de unos cuantos importadores favorecidos por haberse contactado a tiempo con la revolución ciudadana así como hubieron unos cuantos en el gobierno de Palacios que hicieron de cajeros y celestinos.
En definitiva la pagina referente al comercio exterior de este gobierno esta igual que las de los anteriores, o sea que es otro renglón en el cual el gobierno de la Revolución Ciudadana se parece a los de la partidocracia.