22 noviembre, 2024

Cortecilla

Aprobada la Nueva Constitución incluyendo las Transitorias que como se pronosticó están dando como resultado que el país se encuentre inmerso en una crisis jurídica e institucional, el gobierno del Presidente Correa y aquellos que integran la cúpula de Alianza-País unido a sus Asambleístas hoy mayoritariamente en el Congresillo, están buscando culpables por doquier y tratando de endosarle el caos a alguien.

El Presidente declaro paladinamente que la Asamblea Constituyente se equivocó al reducir el numero de Magistrados de la Corte Suprema de 31 a 21 y, que debieron haber contemplado que los ex jueces actúen en funciones prorrogadas de forma de impedir el vacío que hoy se tiene a nivel jurídico. No saben a quien endosarle la pelotita, pretenden que sea el Consejo Electoral, el de la Judicatura o por último la CORTECILLA Constitucional.

Al igual que el Congresillo las CORTECILLAS estarán al orden del día. ¿Que significan? Son órganos colegiados integrados en su gran mayoría por personajes afines al Gobierno y colocados a dedómetro. Como se conoce los miembros del ex Tribunal Constitucional arrogándose funciones se declararon en CORTECILLA Constitucional. El Consejo Nacional Electoral, que tiene cierto tufo a CORTECILLA, igualmente esta integrado por gobiernistas; hoy se pretende torcer de alguna forma aun no definida todas las vías y preceptos Constitucionales para nombrar una CORTECILLA Nacional de Justicia que se acomode a los intereses del Gobierno de turno.

Mientras no se defina como se designarán los Miembros de la Corte Nacional de Justicia, el país se encuentra inmerso en un limbo jurídico que está trayendo una gran acumulación de procesos muchos de los cuales con seguridad prescribirán. La opción de los Conjueces a través del Consejo de la Judicatura, es bastante improbable, algunos ya renunciaron oponiéndose a la tómbola.

A falta de Justicia, la delincuencia crece a nivel de país y Correa manda a rodar cabezas de aquellos incapaces de dotar de seguridad a la ciudadanía.

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A vuelo de pájaro: todo cambio genera reacción contraria y su efecto es una factura que hay que cancelar. Los trabajos de regeneración en la Ciudad se agigantan y multiplican produciendo caos de tráfico, congestión, desgaste de motores, consumo de combustible, contaminación ambiental (ruido y polución) y el consabido estrés de conductores y peatones. Es decir, la regeneración urbana tiene un costo humano y económico.

El público se queja de la ferocidad de los aguaceros, de las alcantarillas tapadas, de la lenta velocidad de los arreglos, de la influencia del clima y –aunque no colabora- también se queja de las inundaciones sin preocuparse de no echar desechos sólidos y mantener limpios sus sistemas de drenaje, complementando el trabajo institucional.

Los urbanistas acusan al Cabildo de inexistencia de planificación, de falta de metas. Comparan el comportamiento urbano de Guayaquil con el de otras ciudades del planeta. Y, aquí, vale la pena un comentario. En la “praxis” urbanística existen dos tipos de planificación: la primera es total, algo rígida y de mediano y largo plazo. La segunda es puntual, flexible, de corto y mediano plazo y desarrolla la Ciudad por sectores, esperando y respetando las decisiones de los propios ciudadanos. A nuestro juicio en Guayaquil se desarrolla una tarea mixta con predominio de la planificación puntual. Y esto lo encontramos natural en una Ciudad que estuvo tan caotizada como la nuestra.

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Entiendo que en nuestro países para ser obedecido muchas veces es necesario demostrar que eres el que manda, la idiosincrasia de nuestra gente es la de hacer lo que le da la gana o hacer las cosas de la manera que considera conveniente para su muy personal forma de ser, hacer y pensar. La simple conducción de una oficina pequeña con una o dos secretarias y un conserje, me da la razón, el conserje sale a realizar una encomienda y se toma la mañana entera, se va a donde quiere y después contesta displicente y por último la gran frase consagrada “dile al jefe que me bote yo ya estoy asesorado y me tiene que pagar un billetote”…

No hay comentarios

  1. Estimado Doctor,

    Asì es, lo ùnico que puedo decir ante tanta barbarie es que este desgobierno no lo harà caer la vieja partidocracia, ni los sindicatos, ni los militares, ni nadie foraneo a ellos. Quien lo harà caer al emperardorsucho de quinta categorìa seràn los mìsmos de su gajo – es decir ellos solitos se caeran luego de tanto atropello y abusos por tener tanto ignorante en sus filas.

    Hay tantos jefes/mandones dentro de ese grupito que da a entender que entre ellos mismos se iràn autoeliminando.

    Solo el tiempo lo dirà.

    Slds
    Manolo

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