En días pasados el Sr. Juan Paz y Miño, historiador quiteño, Secretario del Comité Pro-festejos del Bicentenario del 10 de agosto, procedió a criticar de manera dura y apresurada la obra titulada “LA HISTORIA DE GUAYAQUIL”, escrita por nosotros hace más de cuatro años, publicada, en aquel entonces, como “El libro de Guayaquil” y reeditada, de manera comprimida, con el título “La Historia de Guayaquil”, para ser entregada de manera gratuita por el Municipio de la ciudad.
La obra en mención, que ha puesto finalmente en valor la historia de Guayaquil y de su región de enclave, fue escrita basándose en una profusa documentación bibliográfica que parece no conocer el Sr. Paz y Miño, quien apresuradamente, ha manifestado su desacuerdo con lo que se dice en la obra, particularmente en lo que se refiere a la riqueza que nuestra región poseía hace 10000 años y gracias a la cual los grupos nómadas que llegaron a ella procedieron a sedentizarse. El Sr. Paz y Miño debe saber más que Karen Stothert, reconocida arqueóloga norteamericana descubridora de los amantes de Sumpa y de la protocultura “Las Vegas” o debe estar más enterado que el arqueólogo Román Piña Chan, máxima figura de la arqueología mexicana, que responsabiliza a las culturas nacidas en la antigua región de Guayaquil (que así era llamada esta región en tiempos prehispánicos y coloniales) de ser las antecesoras de la cultura Olmeca, misma que dio origen a todas las civilizaciones de meso América.
El Sr. Paz y Miño con toda seguridad sabrá, más que el máximo arqueólogo peruano Roberto Hoffman, curador de la colección arqueológica del Banco Wiesse, quien ha venido sosteniendo por algunas décadas que “LA CULTURA CHIMU TANTO COMO LA CHAVIN DE HUANTAR DEBEN UNA IMPORTANTE PARTE DE SU DESARROLLO A LA CULTURA CONOCIDA COMO CHORRERA NACIDA EN EL LITORAL DE LA HERMANA REPÚBLICA DEL ECUADOR” (debemos recordar que Chorrera es el punto de desarrollo máximo de la cultura Valdivia).
Para creer lo que el Sr. Paz dice tendremos que obligadamente desechar todo lo que estos sabios sostienen. Ahora bien, el Sr. Paz no se queda contento con rebatir datos irrebatibles sino que, además, procede a tildar de “exagerada” la información contenida en todos los capítulos del libro sin presentar documentos que respalden sus aseveraciones; por ejemplo:
Tilda de tergiversación la aseveración hecha por nosotros, cuando decimos que la ciudad de Santiago de Quito no es otra que la misma Santiago que traslada Benálcazar a la costa ecuatoriana, y que será llamada años después Santiago de Guayaquil.
El señor Paz no està de acuerdo con esto sin recordar que este es un dato aceptado por los historiadores desde hace décadas, fruto de las investigaciones realizadas, primero por Miguel Aspiazu Carbo y años después por la doctora Dora León de Adam Zsazsdi, quien casualmente será incorporada como miembro de la Academia de Historia, con sede en Quito con un discurso que versará sobre un fragmento de sus investigaciones acerca de este mismo tema.
Le molesta, al señor Paz que los astilleros de Guayaquil hayan sido considerados en el siglo XVI y XVII los más importantes de la corona española en la Costa del Pacífico; pero más le molesta aceptar que esa fuente de ingresos fue la más importante que tuvo la Audiencia de Quito (durante más de 150 años) no así las mitas y los obrajes, fuente terrible de explotación que se mantuvo por igual tiempo en el altiplano.
Sugerimos al señor Paz, lea la obra de los historiadores norteamericanos Michael Hamerly (Historia social y económica de la provincia de Guayaquil) y Lawrence Clayton (quien escribe la obra “Los astilleros de Guayaquil”), quienes en sus respectivas investigaciones y escritos dejaron en claro, años atrás, la verdad establecida en nuestro trabajo.
Aunque el señor Paz no quiera reconocerlo, el 9 de Octubre de 1820 fue la fecha en que por primera vez un territorio de la Audiencia quedó libre de manera real y efectiva, siendo el primer objetivo de los patriotas guayaquileños, independizar del mismo modo a la ciudad de Quito. Es inconcebible que no conozca este aspecto de la historia del Ecuador, pues sobre este tema y con el mismo sentido han hablado documentadamente historiadores de la talla de Camilo Destruge (Historia de la Revolución de Octubre y Campaña Libertadora), Roberto Andrade (Historia del Ecuador, 7 tomos, primera edición), Julio Estrada Ycaza (La lucha de Guayaquil por el Estado de Quito) y otros no menos importantes, que por la cantidad no cabe mencionarlos ya que faltaría espacio para continuar con la lista. Y que además ignore las opiniones negativas que en su momento vertiera Bolívar sobre Guayaquil y Quito, datos que están consignados en los tres voluminosos tomos de “Obras Completas de Simón Bolívar”, publicadas en La Habana, Cuba en 1958 en las que puede apreciarse los terribles apelativos que vierte el Libertador, primero acerca de los guayaquileños y segundo de los quiteños (este segundo caso es cuando no encuentran ninguna ayuda en Quito para conformar los ejércitos que librarían las Batallas de Junín y Ayacucho, en las páginas 686 y 864 del volumen 1).
Es verdad lo que expresa, al decir que en Pichincha peleó un ejército multinacional (a más de cientos de soldados guayaquileños) pero lo que omite es que los recursos económicos así como las vituallas fueron pagadas por el gobierno de Guayaquil, no sé porqué omite este hecho; ¿será porque le cuesta trabajo aceptar la proverbial e histórica generosidad guayaquileña?.
Cuando en la obra se habla de la época republicana y se hace referencia a la Junta de Beneficencia y el daño que se ha intentado, hacerle a través de la historia, el señor Paz se extraña de lo dicho y se pregunta ¿Si se está hablando en serio?; se nota que el señor Paz no está al tanto de las cosas que han sucedido en una ciudad que no es la de él y es obvio, además que no ha leído ninguna de las obras que se han escrito sobre la Junta de Beneficencia en la ciudad de Guayaquil. Le recomiendo leer las obras sobre “Historia de la Economía Ecuatoriana” escritas por Guillermo Arosemena Arosemena, pues esto le permitirá tener una visión más amplia sobre el tema del centralismo de tal modo que a futuro, cuando escuche esto no le parezca que quien lo dice ESTÁ HABLANDO EN BROMA.
En párrafo seguido el Sr. Paz y Miño anota algunos de los eventos suscitados en Guayaquil como la elección de su primera reina y la aparición dentro del espectro de la intelectualidad guayaquileña, de los historiadores Chávez Franco, Campos, Pino Roca y Destruge a más de otros datos suscitados a inicios del siglo XX, con el fin de comparar cuantitativamente la cantidad de páginas que se destinaron a estos eventos versus la cantidad de páginas que se destinó a la transformación que la ciudad ha experimentado en todos los órdenes dentro
de las administraciones de Febres-Cordero y Nebot.
¿Esto es lo que le molesta?; ¿Le molesta a él que se le haya destinado un cuarto de libro a destacar el resurgimiento de la ciudad de Guayaquil?, esto es verdaderamente un problema que él tiene con esta ciudad, un problema que a todas luces tiene tintes políticos. La cantidad de páginas que queramos destinar a cada capítulo depende de la trascendencia que el hecho histórico tiene y para nosotros no existe en el siglo XX algo más trascendente que esta revolución del bienestar, de la paz y del trabajo que han liderado Febres-Cordero y Nebot en los últimos 16 años.
¿Será que el señor Paz y Miño obedece órdenes de los movimientos que se han tomado el país a nombre del “socialismo del siglo XXI” y a quienes les afecta sobremanera que esta ciudad haya salido adelante sóla y gracias al esfuerzo de líderes de otra ideología?
Si es así, el señor Paz tiene un verdadero problema porque le será imposible evitar que la historia juzgue a los hombres por el legado que estos dejan.
El Sr. Paz y Miño titula como SEGUNDO PUNTO, otro conjunto de aseveraciones que lo único que demuestran es su desconocimiento sobre la documentación y la bibliografía en la que nos basamos para escribir la obra. En esta sección, se extraña de la aseveración que hacemos sobre el 10 de agosto, sin conocer que muchos escritores quiteños que en su momento escribieron sobre el 10 de Agosto también sostuvieron lo mismo, si no que lea la obra del historiador, De la Torre Reyes para que se entere, de primera mano, de datos que ponen en su lugar al movimiento quiteño que eliminó al representante de Bonaparte para poner en el poder al representante de Fernando VII, no hablándose, en ningún momento de Independencia de España. No sabemos qué es lo que le incomoda ya que siendo la obra escrita por nosotros sobre la historia guayaquileña, no cabe profundizar en la Revolución de Quito.
Pero cuando realmente pasa a mayores es cuando da a entender que nuestra obra es una historia manipulada (no sabemos con qué fin) y que eso es no tener un mínimo de “conciencia patria”. (¿?)
¿Qué pretende Paz y Miño?, ¿Qué pasiones esconde?, ¿A qué consignas obedece?, ¿Por qué intenta menospreciar la verdadera historia guayaquileña cuando en esta se le da el protagonismo a quien realmente lo tiene?, ¿Será que el señor Paz y Miño es un historiador “eminente” pero que solo conoce aquello que le interesa conocer; que no lee las investigaciones y profundos estudios de los historiadores que han escudriñado el pasado guayaquileño pero que no son nacidos en Quito?
Juan Paz y Miño estaría seriamente cuestionado si aún viviera el ilustre Federico González Suárez, para quien la verdad histórica debía ser dada a conocer, DOLIESE A QUIEN LE DOLIESE. Llega Paz y Miño a niveles tan parciales en su análisis que no se da cuenta que el libro criticado por él es de Historia guayaquileña; que no existe autor quiteño que haya mencionado jamás a Olmedo en las cortes de Cádiz, aún cuando su discurso sobre la supresión de las mitas fuera tan brillante que le valió un lugar en la historia de las cortes, pero exige, ESO SÍ, que los autores del libro sobre historia guayaquileña incluyan a José Mejía Lequerica quien teniendo todos los méritos necesarios y a quien con justicia se lo comparó con el Mirabeau americano, nunca ha sido omitido de los libros de historia, cosa que no ha sucedido con nuestro coterráneo.
Parece que el tema de la independencia y aceptar que el 9 de Octubre es la verdadera fecha de la que arranca el proceso emancipador de la antigua audiencia, también lo afecta ya que destina 3 largos párrafos a este asunto donde haciendo gala de desconocimiento cuestiona la creación de la “división protectora de Quito” como si este no fuera un hecho comprobado y aceptado, extrañándose, de paso, con la aseveración de que no hubo quiteños dentro del ejército libertador (este es un hecho comprobado y comprobable), si no, que investigue en la información manuscrita que posee el Archivo Histórico de la Biblioteca Municipal de Guayaquil, para que se entere acerca del heróico patriotismo de los guayaquileños, y del sacrificio en vidas y recursos que hicieron para dar la libertad a Quito el 24 de Mayo de 1822.
Seguramente le extraña de que la principal bandera que flameó en las faldas del Pichincha fuera la “bandera albiceleste”, sin preguntarse, en ningún momento, cómo Abdón Calderón, integrante del Batallón Yaguachi (bautizado luego como Batallón Vargas) podía tener en sus manos la bandera de Colombia cuando su batallón era el que representaba el ejército guayaquileño. Sugerimos al señor Paz la lectura de la obra ganadora del primer concurso de biografía sobre Abdón Calderón convocado en 1988 y cuyo ganador fuera el Comandante en servicio pasivo señor Mariano Sánchez Bravo, Director de la Academia Nacional de Historia Marítima; porque muy probablemente la lectura de este libro le hará reparar en la cantidad de datos que desconoce.
Es lógico que a este señor le parezca, la obra escrita por nosotros, una historia FANTÁSTICA y decimos que es lógico porque al medir el nivel de ignorancia que Paz ha tenido sobre la historia de esta ciudad, no debe menos que sorprenderle lo épico y extraordinario que es el legado de nuestros antepasados.
Desconoce totalmente el verdadero carácter de Bolívar, quien siendo indiscutiblemente un genio militar, quiso imponer un régimen totalitario a la América “liberada” porque pensó que esa era la solución para los países que había independizado, se nota que Paz y Miño no conoce el contenido de la Constitución Boliviana dictada por él, ni las ideas que Bolívar tenía sobre la necesidad de que fuera vitalicio y hereditario su cargo.
El doctor desconoce además, que la Provincia Libre de Guayaquil fue un estado independiente por más de 20 meses y que fue anexado “manumilitari” a la Nueva Granada… qué poco sabe de este tema Paz y Miño, le sugerimos leer una separata de la Revista de América en la que David J. Cubitt, historiador de la Universidad de Edimburgo da a conocer, con sobra de detalles, una investigación realizada en los archivos europeos y publicada bajo el título “La República de Guayaquil”, con el fin de aclarar muchos puntos oscuros existentes en el proceso de anexión a la Gran Colombia de toda la Costa de la antigua Audiencia de Quito con excepción de la actual provincia de Esmeraldas (territorio que conformaba la antigua provincia de Guayaquil).
Sugerimos además que lea el trabajo de Camilo Destruge sobre la participación guayaquileña en las Batallas de Junín y A
yacucho, así como la publicación, en tres tomos, de Tobar, que el Banco Central hiciera en la década de los 80 y en la que con similar tema se da a conocer la participación del “Sur de Colombia” en las Batallas que cerraron el proceso emancipador de América.
¿Por qué le molesta a Paz que nosotros sostengamos que los Libertadores de América fueron Bolívar, San Martín y Guayaquil? ¿Será que Paz no sabe que Bolívar recomienda al Congreso de Perú la entrega de un reconocimiento a la ciudad de Olmedo en agradecimiento por todos los sacrificios que ésta realizó para ver cristalizada la Independencia de sus hermanos peruanos y por lo cual, el primer Escudo del Perú incluyó nuestra Bandera en sus alegorías?. Debemos decirle a este señor que los guayaquileños nos sentimos orgullosos de nuestro pasado histórico y de que existiendo como existe una profusa bibliografía y abundante información que avalan y respaldan nuestras aseveraciones, no podemos menos que sugerirle recurra a la bibliografía consignada en los cuatro tomos de la obra “El libro de Guayaquil”, escrita también por nosotros y publicada hace más de cuatro años cosechando el aplauso de historiadores de todo el país, y conteniendo en sus páginas la misma información que hoy trae de manera comprimida el Libro de Historia de nuestra ciudad.
La historia es la ciencia social con mayor versatilidad de cuantas ciencias sociales existe, porque siendo como es, una ciencia basada en información documental, es susceptible de nuevos enfoques a medida que se van descubriendo una mayor y más amplia información sobre el hecho histórico investigado, así lo dice el historiador Oscar Efrén Reyes y lo ha demostrado de igual manera el insigne historiador Luis Andrade Reimers quien con su obra “Hacia una verdadera historia de Atahualpa”, nos demostró el enorme cambio de esta ciencia y como, lo que ayer era considerado una verdad inmutable, hoy no pasa de ser un mito de carácter infantil.
¿Esto es lo que quiere el Sr. Paz y Miño? ¿Desea que se mantengan los mitos?, o ¿Quiere, como nos lo exigió González Suárez, que la verdad histórica salga a relucir encima de cualquier otra consideración?.
Nuestra obra no sólo actualiza y pone en valor la historia guayaquileña sino que además le da el mérito a una pleyade de historiadores quiteños que en los últimos 50 años han ido aportando con nuevas y mejores investigaciones al esclarecimiento de muchos puntos oscuros que aún contenía la historia patria.
Qué poco conoce Paz sobre la Revolución Marcista; qué poco sabe sobre el sacrificio de Guayaquil para salvar la República, le sugerimos que visite más el Archivo Nacional de Historia y revise los documentos que van de 1843 a 1846 o si le cuesta mucho trabajo recurrir a las fuentes originales, que lea el tomo 8 de la Historia Marítima del Ecuador de la autoría del historiador Eduardo Estrada Guzmán, publicado por la Academia Nacional de Historia Marítima, en donde sí se aborda a profundidad el tema de la Revolución Marcista, dándonos la razón en cada una de las afirmaciones hechas en nuestro libro.
Podríamos seguir rebatiendo con profusa bibliografía y documentación a lo que Paz titula como punto “SEGUNDO” pero consideramos que realmente es perder el tiempo, porque es obvio que su crítica tiene un tinte eminentemente regionalista y político y lo único que intenta es hacer daño gratuitamente a los autores y a la ciudad de Guayaquil.
Prueba de ello es el punto “TERCERO” de su análisis, en el que dice: “En esta historia el pueblo ha desaparecido”; el “historiador” hace aquí un análisis de los actores sociales “omitidos por los autores” LLEGANDO AL ABSURDO DE DECIR QUE EN ESTA HISTORIA “NO APARECEN INDIOS”, ¿Pero de qué indios habla Paz y Miño?, hábleme de montubios y cholos, que en todo momento estuvieron integrados a la sociedad guayaquileña y que fueron siempre parte indivisible de su historia siendo ellos quienes con su esfuerzo escribieron páginas de oro de nuestra región; lea bien lo que se dice en todos los capítulos del libro y no omita nada porque en esta región no hubo Huasipungos ni indios esclavizados porque Guayaquil se distingue por el amor a la libertad y por ser un marcista quien declara la manumisión de los esclavos. ¿De qué indios nos habla Paz y Miño?, es que no se ha dado cuenta de que la historia que critica es una historia donde no hay indios?, de que esta era una región donde el cholo y el montubio eran parte de la sociedad y trabajaban conjuntamente con el blanco.
¿Cree Paz y Miño que al hablar de esclavos negros en Guayaquil estigmatiza nuestra sociedad?, ¿qué es lo que pretende al hacer pensar a quien lo lea que la esclavitud sólo se daba en Guayaquil y qué las fichas con que se pagaba en las haciendas sólo circulaban en la Costa ecuatoriana?
¡¡¡Basta ya, “Doctor”, basta de atacar a Guayaquil y a quienes escriben la verdadera historia de la Patria!!!, ¿Que si en Guayaquil hubo esclavos los hubo también en Quito y en todo el mundo?, ¿Que si en las haciendas de la costa le pagaban a los montubios con fichas, en las de la sierra ni eso les daban y a los indios los mataban los huasipungueros.
¡¡¡Basta ya, Juan Paz y Miño que su proyecto de socialismo del siglo XXI sólo podrá caber en la mente de los poco ilustrados y de aquellos, que no conociendo la verdadera historia de la patria son permeables a la falacia, a la mentira y al alineamiento ideológico, utilizado siempre como herramienta por aquellos a quienes la verdad no les conviene que sea difundida.
Su versión sobre eventos como la revolución Juliana debe ser complementada por estudios hechos por los historiadores guayaquileños como Guillermo Arosemena Arosemena y Julio Estrada Ycaza (Los Bancos del siglo XIX), deje ya de pensar que la única historia que vale es la escrita en Quito y por los quiteños, recuerde que al final de cuentas aquel que quiera saber la verdad recurrirá a las fuentes primarias que son los documentos, y descubrirá “QUIÉN DICE LA VERDAD Y QUIÉN REALMENTE MIENTE”.
Hemos querido hacerle esta aclaración con el fin de presentarle una luz en ese camino de oscuridad que usted se halla recorriendo, de tal modo de que no siga cayendo en la innumerable cantidad de baches y errores en los que ha caído. Hemos querido entregarle una bibliografía básica para que luego de su estudio se entere de lo mucho que ignora y pueda con serenidad, ecuanimidad, equilibrio mental y psicológico, admitir que desde que inició su crítica al libro en el que se hayan consignados los logros de nuestros mayores, se equivocó por ignorancia.
Atentamente,
Arq. Melvin Hoyos Galarza
Sr. Efrén Avilés Pino
1.500 millones??
ESO SI ES DIGNO DE RISA!!!
En qué planeta??? en Marte???
No digo que el petroléo se produzca en Quito, sino que si no fuese por ese dinero del subsuelo que no se produce por acción humana, ni el malecón al que dizque le quieren poner el nombre del mayor asesino del País, FEBRES, se hubiese construido. Dicho sea de paso me saco el sombrero con CORREA, que ayer dijo que no se cambia el nombre del LIBERTADOR SIMÓN BOLÍVAR, por la huevada de Febres!!
A TORRE:
¿Les corresponde?? Por qué gracia???
No les corresponde nada. Lo que reciben en Guayaquil es realmente por la caridad que en efecto, el resto de provincias le hace a la mayor parásita del Ecuador.
No se porque la risa, yo solo he transcrito la cifra que el SRI informa (1,500 millones) y menos risa deberia darnos al ver como algunos «ecuatorianos» idolatran a un Venezolano, que puede ser historicamente muy representativo pero que en definitiva no hizo absolutamente nada por Guayaquil.
Por otro lado, y solo porque Morales toca el tema, debo preguntar: si Febrescordero fue un asesino, como afirman los odiadores de Guayaquil, porque nunca se entablo una demanda en ese sentido? porque nunca se siguio un juicio?, porque nunca se lo sentencio como asesino?, porque nunca fue preso? el sentido comun me permite visualizar solo dos respuestas: 1. No fue asesino y 2. fue asesino pero los odiadores fueron tan cobardes y miedosos que ninguno se atrevio a acusarlo directamente, estampando su firma y viendolo a la cara cuando aun vivia y por lo tanto, al ser cobardes, lo hacen con vehemencia ahora que esta muerto, jajaja ahora si son gallitos… Solo otra estadistica que equivale a echarl mas sal a la llaga, es que Febrescordero fue el unico ecuatoriano en la historia en ganar una eleccion con mas del 80% de los votos, lo que reafirma el respeto y cariño, que los verdaderos guayaquileños tuvieron y tienen por el. A los odiadores de Guayaquil estas afirmaciones pueden sorprenderlos y hasta causarles molestias, irritacion, mas odio, pero lamentablemente para ellos, es una realidad que no puede ser cambiada, por mas que insulten, desprecien y minimicen a los habitantes de la ciudad, que finalmente, por esfuerzo propio, tiene ahora el mejor indice de vida del Ecuador.
Todo claro, con estadisticas comprobables, sin necesidad de insultar, como debe ser…
Definitivamente este articulo ha generado polemica y comentarios que en cierto sentido nos muestran esos sentimientos encontrados que hay entre dos polos bien definidos: Quito y Guayaquil. Una vez mas estoy convencido de que tuvimos un pesimo colonizaje y una peor independencia. Que diferentes que somos en 540 kilometros. Porque no emulamos por ejemplo a Singapur (ciudad estado) o a otros similares. Esa pequeñez de espiritu es lo que nunca nos hara libres y progresistas. Razón tenia Oscar Arias. Este es el siglo de los Asiaticos. Tuvimos todo en la mano antes que los EEUU pero el «chip» que llevamos inserto no nos deja progresar.
Para el quiteño:
Juan F. Morales
_ El Malecón León Febres Cordero (antes llamado Malecón 2000): Construido con donación voluntaria personal y corporativa del Impuesto a la Renta.
_ El Puente de la Unidad Nacional fue construido con financiamiento propio del Comité de Vialidad, más préstamo internacional y lo único que puso el gobierno fue la garantía de aquel préstamo.
_ El Estadio de Barcelona igual que el estadio del Aucas y Liga de Quito recibieron aportes estatales para su construcción.
_ Regeneración Urbana: financiado por recursos propios del Municipio del Guayaquil y préstamo de la CAF.
Tuneles: Santa Ana y San Eduardo: financiado por recursos propios del Municipio del Guayaquil más préstamo de la CAF y un aporte del gobierno que corresponde a la decima parte del valor total de dichas obras.
Puente Carlos Pérez Perazzo: financiado por recursos propios del Municipio del Guayaquil más préstamo de la CAF y un aporte del gobierno que corresponde a una décima parte del valor total de dicha obras.
Totalmente de acuerdo, somos muy diferentes en todos los sentidos, con diferentes visiones de como se debe generar el desarrollo, lo interesante seria que cada region, por ser tan diferentes entre si, escojan su modelo de desarrollo y que entre ellas se respete el modelo que cada una escoja… lamentablemente no hay predisposicion para un entendimiento y finalmente todo se reduce por un lado a querer imponer y por el otro a rebelarse ante esa imposicion… y de esa manera es dificil progresar…
¿¿QUE NO FUE DENUNCIADO Y DEMANDADO?? ¡¡¡CUANTA IGNORANCIA EN LA GENTE DE GUAYAQUIL!!!
FUE DENUNCIADO, DEMANDADO Y SENTENCIADO EN LA CORTE INTERAMERICANA DE DERECHOS HUMANOS.
YO MISMO LO DENUNCIÉ POR PECULADO EN EL ROBO DEL MALECÓN «SIMÓN BOLÍVAR» Y ESCRIBÍ UN LIBRO CON REGISTRO DE PROPIEDAD INTELECTUAL SOBRE LAS RATERÍAS DE FEBRES Y LOS CRÍMENES CONTRA CIENTOS DE PERSONAS POR PARTE DE LOS SOCIAL CRISTIANOS.
OTRA COSA ES QUE LOS PODERES PÚBLICOS SIEMPRE ENCUBRIERON A SU PATRÓN, ES DECIR, AL PILLO DE FEBRES.
Cobarde el LLORÓN DE TAURA:.. ¿Dónde más tengo que firmar??
Señor Hoyos
Es hora de terminar con los mitos en nuestra historia y que se conozcan los hechos tal y como acontecieron; es ineludible sentir indignación al leer unos cuantos párrafos de la famosa «Acta de la independencia del 10 de agosto de 1809» y recordar la historia que nos enseñaron en la escuela, ya que dicho levantamiento no tiene absolutamente nada que ver con la historia independentista del Ecuador y sí muchísimo que ver con la «guerra de la independencia española» en contra del tristemente célebre «Pepe Botella».
No es de la incumbencia de nosotros los guayaquileños si en Quito quieren festejar a lo grande un alzamiento de nobles y ricos criollos a favor de S.M. Dn. Fernando VII (dicho sea de paso, le cuidan sus tierras y le invitan que venga a imperar en América), pero considero necesario que dicha acta sea revisada y debatida en foros académicos previamente publicitados y donde se permita la libre asistencia, para al fin terminar con ese ridículo mito de que los alzados el 10 de agosto fueron «patriotas», ni siquiera hablan de repúblico estos «independentistas» a pesar que en España ya se hablaba de una república monarquica (de alli nacieron las famosas Cortes de Cádiz que luego fueron eliminadas por S.M.Dn. Fernando VII a quien defendían los señores del 10 de agosto).
Es una lástima si el pueblo quiteño se ofende por decirles la verdad frente a una mentira que han mantenido muchos de sus sus historiadores por 200 años, pero los hechos son irrefutables, simplemente busquen en los archivos históricos una copia o transcripción del Acta del 10 de Agosto de 1809 y pregúntense entonces donde se habla de Patria, donde se menciona la independencia de España, donde se habla de los derechos de los indios (hoy con jocosidad escuché a un historiador quiteño decir eso), ahí no se menciona siquiera la conformación de una República.
Aún no he tenido la oportunidad de leer lis libros que Usted hace referencia pero intentaré adquirirlos o simplemente leerlos en la biblioteca municipal, la historia de Guayaquil está llena de hombre valientes, independientes (estos de verdad), progresistas, rebeldes, emprendedores y solidarios, es por ello que nos quieren acabar pues saben que nuestra «Acta de la Independencia» y el hecho que la República de Guayaquil haya existido por 20 meses (antes que Bolívar nos anexara a su Gran Colombia con su ejército) nos dan todo el derecho de pedir ante la ONU ser reconocidos como un estado independiente; Bolívar estaba cierto, un rio y una ciudad no hacen un país, pero su visión fue miope porque esta ciudad con su río hicieron al Ecuador… Por Guayaquil Independiente¡¡
La ignorancia es atrevida. Y mucho más si se la mezcla con la arrogancia y la mala formación académica.
Yo soy guayaquileño, ¡a mucha honra! Pero, gracias a Dios y al esfuerzo de mis padres, recibí mi formación personal (la académica y la integral: valores) en otros lares de mente más abierta y de horizontes más amplios (intelectuales, no sólo marítimos). Sí, mi presentación y mi intervención pueden sonar petulantes, pero es necesario ver si es que se logra comprender por qué uno puede ver las cosas de manera más integral.
He visto muchas participaciones en torno a este tema. Las más apasionadas (tanto las de los señores Hoyos y Avilés como la del historiador Manuel de Guzmán Polanco) son más personalistas y poco objetivas. Mientras que las de los historiadores Calderón Chico o Paz y Miño son llenas de consideraciones que los otros señores olvidan. Es decir, hay costeños y serranos que exageran, pero también los hay ponderados.
Bien decía algún comentario por ahí (la que me hizo recurrir a varios documentos hispanoamericanos… aunque sen virtuales) que la «declaración fidelista» del 10 de Agosto de 1809 fue una estrategia política, lo mismo que el grito inicial de la independencia mexicana, el famoso Grito de Dolores, que prácticamente es copia del Acta del 10 de Agosto.
Los hechos no deben tomarse aislados, sino que hay que ponerlos en su contexto, cosa que los «opinólogos» no suelen darse el trabajo. Bien pudo darse el 9 de Octubre sin el 10 de Agosto, pero era imposible que se dé el 24 de Mayo sin el 10 de Agosto. ¿Por qué?, porque mis antepasados porteños bregaban por SU independencias, no por la de la Presidencia toda… no les importaban los de lo alto.
En estos días, los diarios nos han traído las noticias de dos congresos de historia en uno que se han celebrado en Quito en torno al Bicenteneario de LAS independencias. Es que no es que la independencia se dió el 10 de Agosto, NO… Pensarlo o creer que otros lo aseguran es ABSURDO.
En los que coinciden los historiadores DEL MUNDO reunidos en Quito (Haití, EE.UU., España, Argentina, México, Brasil, Bélgica, Alemania, etc.) es que el Acta FIDELISTA del 10 de Agosto de 1809 fue EL INICIO, LA LLAMA que encendió el incendio de la indenpendencia en América Latina. NO FUE LA PRIMERA, pero fue la más importante.
Todos saben que primero estuvieron La Paz y Chuquisaca, pero éstas no tuvieron la trascendencia del 10 de Agosto. Así de sencillo.
¿Declararon la fidelidad al Rey? Pues sí, la declararon. Pero un amigo me explicaba que Canadá todavía mantiene su fidelidad a la Reina de Inglaterra, pero igual es una de las democracias liberales más independendientes.
Este tipo de asuntos no entienden aquellas escuálidas mentes que compiten por pendejadas, en lugar de unirse a los proyectos nacionales.
Sr.Lcdo. Hoyos:
Guayaquil es grande de por si, es altiva es Independiente es libèrrima, es generosa. Tiene una singular historia de luchas constantes por forjar la libertad y radiarla a todo el territorio de la antigua audiencia de Quito. Saliò en defensa del progreso y en contra del atraso , la esclavitud de la religiòn ,de la falacia y la traiciòn, el 6 de Marzo, el 5 de Junio y el 28 de Mayo; sus hijos trabajadores fueron masacrados por las «manos blancas» de la plutocracia aquel 15 de noviembre del 22…Usted Sr. Hoyos y el Lcdo. Avilès Pino, que en paz descanse, con toda la sinceridad del caso, no han descubierto el AGUA TIBIA.Hubo ya historiadores -desde Chàvez Franco,pasando por los Drs.Pèrez, (Concha y Pimentel)Julio Estrada y otros grandes-que dejaron sentado en sus crònicas la grandeza de mi ciudad.Yo sè que el 10 de agosto fuè sòlo un intento ambiguo de autonomìa y que el 9 de Octubre se forja de verdad, el primer proyecto de nacionalidad, pero no vengan con esas reconstrucciones forzadas de la historia, colocando al alcalde Nebot y su administracíòn, como el CULMEN de la historia Guayaquileña y de su escencia existencial. NO SEÑOR!al Cèsar lo que es del Cèsar, ahora se tilda de ENEMIGO DE GUAYAQUIL a quienes desaprobamos la administraciòn Nebot.La historia de nuestra ciudad es riquìsima, los hechos lo demuestran y si, Paz y Miño tiene sus consideraciones ,las hace desde su perspectiva quitocèntrica de la historia, Usted, como un Virgilio moderno tambièn elabora una Eneida moderna que usa la gloria de Guayaquil para reforzar un modelo polìtico de gestiòn cuestionable.
Apreciado licenciado, parece que usted ha leído a medias a Pérez Pimentel…, y si conversara con él, se daría cuenta de que es mucho más crítico con la historia guayaquileña que el mismo Paz y Miño, que no tiene visión «quitocéntrica», sino ecuatoriana…… mala palabra para gente como Hoyos, resentidos históricos.
Al que quiera conocer la historia desde documentos verdaderos, les obsequio, pues quizá no tengan recursos para comprar un libro, un ejemplar de: «Las Guerras Libertarias de Quito». Envíen su dirección a jfgms03@hotmail.com. Ese libro es el primero de una serie en la que se devela la verdad, es decir, la posición realista y antilibertaria de Guayaquil, que se adhirió a la independencia cuando sus élites se percataron de que casi toda América era ya libre, se había bloqueado a los puertos realistas de Guayaquil y el Callao, y era por ende, absurdo seguir siendo sumisos a la corona. Nunca ha existido nada parecido a individuos ni grupos sociales libérrimos, defensores del progreso, en contra de la esclavitud de la religión, de la falacia y de la traición. Al contrario, la posición al menos de las élites de Guayaquil es ambigua, ambivalente, cobarde, ubicua y oportunista, a través de toda la historia. Los pronunciamientos políticos de 1845, 1895 y 1944, fueron por beneficiarse económicamente de gobiernos que en efecto, se forjaron para satisfacer a los grupos de poder de Guayaquil. 1944, fue un prionunciamiento armado del Jefe militar de Guayaquil, el Crnel. Sergio Enrique Jirón Narváez, oriundo de San Gabriel,provincia del Carchi. Sin sus soldados, La Gloriosa no se efectuaba.
Sr. alfonso y :Pero el resentido no soy yo. Sino los que sabemos, ademàs sòlo hago referencias superficiales al citar a ciertos historiadores como cronistas de la ciudad, no en la visiòn ni la posiciòn que tienen ante los hechos històricos.. Respire profundo y lea bien lo que escribo… El fin del comentario realizado por mi, es polìtico claramente, porque no quiero profundizar en los hechos de la independencia ecuatoriana, mi motivo es poner en claro que la administraciòn socialcristiana y de los empresaurios de derecha que tienen secuestrada a mi ciudad, no representan el fìn dialèctico de la historia guayaquileña, una historia que increìblemente està unida a la de Quito ,desde que Almagro fundò Santiago allà el los parajes de Colta en 1534, y que auxiliò a Guayaquil, cuando el ataque de los holandeses de 1624 y , si no se ayudaron mutuamente en 1810 y 1820, fuè porque los poderes oligàrquicos de uno u otro momento no lo permitieron.
Entonces es eso lo que querìa decir. Muy agradecido
Sr. Morales: ÈLITES OPORTUNISTAS Y COBARDES, usted lo expone de forma elocuente y cristalina, no el pueblo llano, quien por desconocimiento de la realidad social seguìan la corriente. Los movimientos de 1810,1812 y 1820, en el fondo sòlo son cambios de dueño, hablando de las èlites, por supuesto y usted, debe saber los motivos dialècticos que originaron dichos movimientos: El estrangulamiento de la economìa de los terratenientes de la sierra norte, que hubieren promulgado una legislaciòn proteccionista que era inconveniente para los exportadores de la costa, se explica asì la negativa de Guayaquil a participar en el movimiento nobiliario de 1810- aclaro el 10 de agosto de 1809, SI FUÈ UN MOVIMIENTO INDEPENDENTISTA- aunque de rasgos señoriales, despuès con intenciones repùblicanas con las cuales se darìa a la noble tarea de fomentar la independencia al mando de Montùfar y Calderòn… Pero si se lo ve desde la òptica del materialismo històrico- no soy creyente-
veràs que nunca iban a lograr la adhesiòn de las èlites de Guayaquil, por los motivos econòmicos antes expuestos. No quiero ahondar en eso de la fidelidad a la corona, porque si lees màs detenidamente, los màs realistas fueron los habitantes de la regiòn del Corregimiento de Guaranda quienes , en plena guerra magna, avituallaron de manera fanática a los realistas- acuèrdese de Tanizagua , el cura Benavides y otros- Y desde esa misma perspectiva històrica, debe estudiarse la historia ecuatoriana, por lo tanto las fechas expuestas de 1845,1895 y 1944 son verdaderos saltos cualitativos de nuestra historia, claro que las èlites se beneficiaron de esos cambios, pero en el inventario total, dichos cambios afianzaron los derechos colectivos LEA LAS CONSTITUCIONES DE 1906 Y 1945 – los negros en 1845, los indìgenas luego de 1895 (RECUERDAS SI PARTICIPARON O NO EN LOS MOVIMIENTOS NOBILIARIOS DE 1810-12, SIENDO ELLOS LOS MaS DINÀMICOS ACTORES DE LAS SUBLEVACIONES COLONIALES?…) què paso? habrìa que preguntarles a ellos (INDIOS- CHAGRAS ,ETC..) como se les solìa llamar en la capital despectivamente, porquè no sintieron como suyos los ideales de los hombres de 1810?.. Su problema debe ser que lo mira todo desde su òptica regional. En 1944 LA COSA FUÈ DIFERENTE, USTED COMO quiteño, no saber lo que era Guayaquil en las vìsperas del 28 de mayo, una policìa abusiva un hervidero de gentes de izquierda que propugnaban un lavado històrico a la afrenta de 1941-2, el temor colectivo que tuvimos de ser invadidos por el perù. Observa bièn quienes iniciaron y promovieron lo de 1944, tanto esfuerzo para que un oportunista sin ideologìa como velasco ibarra, se entregara a la oligarquìa e instaurara un nuevo estado policiàco para que cometiera crìmenes , como los del 3 de junio de 1959 -cortesìa del socialcristiano ponce enrìquez, nieto de otro fanàtico conservador que se opuso mediante guerrillas al Gral. Alfaro- que regaron de sangre a mi ciudad(buena y sonora fuè la rechifla que recibiò de 60.000 personas en la inauguraciòn del estadio modelo).
Respire profundo y lea bien lo que escribo… El fin del comentario realizado por mi, es polìtico claramente, porque no quiero profundizar en los hechos de la independencia y la historia ecuatoriana, mi motivo es poner en claro que la administraciòn socialcristiana y de los empresaurios de derecha que tienen secuestrada a mi ciudad, no representan el fìn dialèctico de la historia guayaquileña, una historia que increìblemente està unida a la de Quito ,desde que Almagro fundò Santiago allà el los parajes de Colta en 1534, y que auxiliò a Guayaquil, cuando el ataque de los holandeses de 1624 y , si no se ayudaron mutuamente en 1810 y 1820, fuè porque los poderes oligàrquicos de uno u otro momento no lo permitieron.No lo fuè el pueblo, humilde generoso y sencillo que al final,puso sus recursos y sus vidas para lograr la independencia.
Mucha plata has de tener que regalas libros.
Viva el Ecuador¡
Pensador Christian Ávalos Mendoza:
Tu último correo que no se ha publicado todavía, es bastante claro, realista y racional. Sin embargo no coincido en algunas cosas con su contenido, pero son pocas en realidad. Voy a pegar el que envié ayer a J.J. Illingworth a efectos de que te decidas a pedir los libros que en efecto, te los envío con gusto. No es que tenga mucha plata pero tengo gracias a Dios, buenos ingresos.
Comillas: «Te has perdido por tu adoración a la mediocridad la colección de libros (más de 100 de autores extranjeros y nacionales, incluso uno de un cuencano estupendo, intitulado: «Cuenca y el 10 de Agosto», de Juan Cordero Iñiguez ?en el que demuestra la posición antilibertaria de Guayaquil y Cuenca), que se editaron el año pasado, en los que se presenta de cuerpo entero el fenómeno de la INDEPENDENCIA LATINOAMERICANA O mejor dicho, HISPANOAMERICANA, que, SIN EL 10 DE AGOSTO, HASTA EL DÍA DE HOY no existiría.
EL 10 DE AGOSTO, no es el ?ACTA?, ES EL INCIO DE LA LIBERACIÓN CONTINENTAL. Vinieron autores africanos AL CONGRESO MUNDIAL DE HISTORIA del 2009 Y RECONOCIERON QUE EL PROCESO DE INDEPENDENCIA MUNDIAL, INCLUIDO EL DEL ÁFRICA, SE INICIA CON EL 10 DE AGOSTO.»
«Mira, para que tu cerebro no se desgañite, deberías leer tan sólo el número 39 de la Revista: «Novedades Jurídicas», de la corporación Ediciones Legales, la más difundida publicación en el Ecuador de materias jurídicas. En su Consejo Editorial, figura Jorge Zavala Egas, es decir un guayaquileño que terminó reculando a favor de la oligarquía. Es una revista Neoliberal como a ti te cuadra, puro socialcristiano y gamonal escribe en ella».
«Ese número, de septiembre del año pasado, incluye entre sus páginas 54 a 70, un análisis jurídico -NO HISTÓRICO- ni sociológico, del DICTAMEN PENAL DEL FISCAL TOMÁS DE ARÉCHAGA, que ha permanecido inédito y que jamás había sido sujeto a un examen de esa naturaleza. Pues en dicha pieza jurídica del mes de abril de 1810, verdadero tesoro, se obtiene de modo directo la VISIÓN DE LOS ESPAÑOLES CON RESPECTO AL 10 DE AGOSTO, y ésta demuestra con miles de documentos que reposan muchos en la Biblioteca del Congreso en Washington y que el Arq. MELVIN HOYOS ha visto en varios centenares, pues los fotocopió Zevallos (nieto del historiador), así como yo que poseo en filminas siquiera mil, cómo, digo, esa visión DETERMINA PALADINAMENTE, que el ÍNCLITO 10 DE AGOSTO es un movimiento INDEPENDENTISTA 100%, es decir, para la HUMANIDAD, no para la visión de los pelucones llenos de complejos de inferioridad de los siglos XX y XXI, el 10 de AGOSTO es una REVOLUCIÓN TOTAL, EN CONTRA DEL PODER Y EL REY ESPAÑOL. Las rebeliones contra el rey tenían como consecuencia jurídica LA PENA DE MUERTE.»
«Así consta en las LEYES DE LA PARTIDA (Las 7 partidas del Alfonso el Sabio), con respecto a los delitos públicos, QUE FUE APLICADA POR ARÉCHAGA:
«LA AUTORIDAD REAL EN TODO CUANTO ORDENE PARA LA PAZ, TRANQUILIDAD, DEFENSA Y BIEN DE SUS PUEBLOS, NO PUEDE SER POR NADIE TURBADA, SIN QUE EL TURBADOR, SEA QUIEN FUERE, COMETA EL PRIMERO Y MÁS ATROZ CRIMEN DE LOS QUE EN LA LISTA DE LOS DELITOS PÚBLICOS SE ENUMERAN»
Copio textualmente lo que consta en el artículo:
«El delito de traición al rey que fue acusado por Aréchaga, se halla tipificado en la Séptima de las Leyes de la Partida. Se trata del delito llamado «yerro» de traición, que está descrita en varias formas. Las «cometidas» por los Próceres, son las constantes en las formas segunda, tercera y séptima, tipificada en la Ley número 1, y su castigo, está en la Ley No. 2, como PENA DE MUERTE o últimos suplicio como lo exige Aréchaga….»
«…Ley 1: «Laese maiestatis crimen, en latín tanto quiere decir en romance como yerro de traición que hace hombre contra la persona del rey. Y traición es la más vil cosa y la peor que puede caer en corazón del hombre, y nacen de ella tres cosas que son contrarias a la lealtad, y son éstas: injusticia, mentira y vileza…..»
(Se describen múltiples formas de efectuar la traición al rey). Entre ellas, deponer a sus magistrados legítimos por él nombrados o instaurar diferentes formas de gobierno.
«…Cualquier hombre que hiciese alguna de las maneras de traición que dijimos o diere ayuda o consejo que la hagan, debe morir por ello, y todos sus bienes deben ser para la cámara del rey….»
Luego el artículo ingresa directamente al dictamen Fiscal acusatorio, elevado al presidente de la Reaul Audiencia, CONDE RUIZ DE CASTILLA:
«Excelentísimo Señor:
El Abogado Fiscal, en vista de los autos seguidos a pedimento suyo, sobre la averiguación y descubrimiento de los principales autores de la escandalosa revolución del diez de agosto último, Dice: que la circunstancia de haberse puesto en obra este inaudito, y criminal atentado por los mismos sujetos, que anteriormente se hallabna procesados como autores de un nuevo plan de gobierno, les ha ministrado a los ignorantes y mal intencionados un espacioso motivo de creer, que el Ministerio Fiscal no los trató a aquellos como a reos de alta traición….» (las notas de pie de página incluyen una explicación lúcida sobre cómo Morales, Montúfar, Riofrío y los demás habían intentado otra golpe revolucionario anteriormente y fueron procesados, pero no acusados, pues se sustrajeron los expedientes). Lo dice con claridad: ?Tercera: el haber dejado caer Don Pedro Pérez Muñoz, que hacía de Secretario de la causa? (los expedientes de la declaración del Crnel. Juan Salinas)… «ocasionando con este descuido el que sus compañeros se hubiesen enterado de lo que contenía el proceso y del medio de defensa que habían de tomar para ir conformes….»
Te comento que este Pedro Pérez Muñoz, era un realista a ultranza, pues era español, se casó con una de las Calisto, enemigos de la revolución y dejó descendencia que tuvo que emigrar a Guayaquil, pues en Quito fueron vistos como traidores por mucho tiempo. A tal punto que muchas familias guayaquileñas descienden de él, como los Gómez, pregúntale a José Gómez Rosales.
Consecuentemente, la participación de toda la autoridad realista, entre ellas la de Guayaquil, constituye un acto de traición a la Independencia y a la Libertad. NO HAY DUDA.
El dictamen de Aréchaga, continúa en partes valiosísimas: «… Siendo esto así ¿con qué facultad, ni que motivo procedió la ciudad de Quito a la verificación de un hecho tan diametralmente opuesto, a lo que poco antes había practicado?…» (es decir, la firma de la supuesta lealtad al rey en el Acta) «NO HUBO OTRA FACULTAD, NI MOTIVO, PARA SEMEJANTE PROCEDIMIENTO, QUE LA CORROMPIDA INTENCIÓN DE ALGUNOS INDIVIDUOS QUE QUISIERON HACER INDEPENDIENTE ESTA PROVINCIA A VUELTAS DE LAS CRÍTICAS CIRCUNSTANCIAS EN QUE NOS HALLÁBAMOS !!!!
(Mayúsculas, azules, negrillas y signos de admiración son míos).
CONTINÚA AÚN EN FORMA CONTUNDENTE EL FISCAL ESPAÑOL:
«ESTE ES EL CRIMINAL FIN A QUE ASPIRARON ESTOS INSURGENTES SOBORNANDO LA VIL TROPA DEL CUARTEL, Y ENGAÑANDO A LOS DEMÁS CON LAS MÁS SEDUCTIVAS ESPECIES BAJO DE LOS SAGRADOS NOMBRES DE RELIGIÓN, REY Y PATRIA…»
«?.A pesar de que el interior del hombre es impenetrable, y que por consiguiente no es fácil distinguir sus intenciones, sin embargo pueden ser tales, y tan claras sus operaciones, que manifiesten sin equívoco alguno y sin el más leve recelo de engañarse el espíritu que las haya animado. Así sucede puntualmente en la presente causa; pues todos los procedimientos de la Junta revolucionaria no han respirado sino LIBERTAD, INDEPENDENCIA Y SUSTRACCIÓN DE LA DOMINACIÓN ESPAÑOLA?.? !!!!
También el Fiscal se refiere al juramento recibido en la Catedral:
??quebrantando el juramento de obediencia y vasallaje prestado a nuestro amado Soberano el señor Don Fernando 7º. y su dinastía y sustituyéndolo por otro sacrílego que se recibió en la Catedral a favor de de la Junta revolucionaria de esta ciudad y de la Constitución, que no era otra cosa que la indicada INDEPENDENCIA Y SUSTRACCIÓN DEL SUAVE YUGO DE LA DOMINACIÓN ESPAÑOLA?? ¡!!!!
El dictamen concluye exigiendo la pena de muerte para 46 de los complotados, extendiéndose luego a más de 80.
Prueba Palmaria incontrastable. Esa es la visión que tuvo -no Quito- sino España y la Humanidad sobre el 10 de Agosto, que no termina pues, como Uds. hipócritamente quieren hacer ver con EL ACTA, NO!!!! continúa hasta el 1 de diciembre de 1812, con la guerras de Quito verificadas, realizadas, provocadas y materializadas contra España y desatando concientemente en las demás posesiones españolas al grito de REBELIÓN, la Libertad americana y como te explico hoy dicen los historiadores africanos, MUNDIAL.
Las tropas de Guayaquil y Lima, exigieron se ejecute la pena inmediatamente. Ruiz de Castilla elevó los autos al Virrey de Santa fé. Antes de que se pronuncie, los próceres colombianos, realizaron su 20 DE JULIO, quemaron varias partes del expediente de más de 10 mil páginas y se unieron al GRITO LIBERTARIO DE QUITO, JUNTO A LAS DEMÁS CIUDADES QUE FUERON EL ECO DE LA PRIMIGENIA VOZ LIBERTARIA DEL MUNDO. Al verse en disyuntiva, los comandantes de Lima, Guayaquil, Pasto, Bogotá, Cuenca, asesinaron a los ILUMINADOS EN SUS MAZMORRAS Y AL PUEBLO DE QUITO EN LAS CALLES.
Bueno ya te habrás cansado de ilustrar, reflexiona, deja la mediocridad es positivo para el espíritu, lee algo más que a los autores de un grupo económico que solo perpetúa las diferencias con los propios habitantes de Guayaquil que no viven en su élite. Millones de suburbanos han vivido (sobrevivido) 15 generaciones en la esclavitud intelectual, moral y cultural, pues PARA ELLOS LA LIBERTAD NUNCA HA EXISTIDO, en especial desde el 9 de octubre en que los grupos de hecho de tu ciudad se alinearon oportunistamente a la INDEPENDENCIA CONTINENTAL INICIADA EN QUITO y sin una gota de sangre oligárquica derramada, se apoderaron para saquearlo, del PODER DEL ESTADO LLAMADO ECUADOR, HASTA EL DÍA DE HOY, pues los quiteños, todos murieron en las mazmorras o en la Guerra que continuó hasta 1816 EL PRIMER LIBERTADOR DE AMÉRICA, GENERAL CARLOS MONTÚFAR Y LARREA .
Saludos.
(Si no tienes dinero para comprar la revista, te le envío gratuitamente, incluido el flete). Dame una dirección y en serio, el martes te la enviaré pues debo adquirirla en la editorial.»
Cierro comillas.
Estimados CABALLEROS
Sr. Melvin
He leido con que gusto y pasión esta respuesta pertinente.
Soy guayaquileño, nací, crecí, vivo, trabajo y moriré en mi Guayaquil de siempre: alegre, apasionada, generosa, solidaria, frontal… siempre joven.
Ayúdennos difundiendo más esta identidad libérrima, autónoma e independiente.
La recomendaré -con su permiso- a mis estudiantes.
Orgulloso de Usted.
Roberto
muy interesante su contenido, con razon aqui en mi peru, tengo un familiar amante de la filosofoa y atwo tambien, a ver si el str. jua paz y miño se contacta a mi correo.
Para el Sr. que critica al Dr. Paz y Miño, adolece de racismo cultural o mejor dicho regionalismo, el discurso en sonsonete ironico no cosntruye , destruye y evidentemente esa es la velada intención