21 noviembre, 2024

Juramento a la Bandera

¡Alumnos de VI Curso lectivo 2009-2010!

Creo firmemente que ningún concepto de patria es tan real, como el que está intrínsico en el amor patrio de los versos de José Joaquín de Olmedo, que cuelgan en un muro del Colegio y que todos ustedes desde niños, entrados aquí, los han leído. Dice así:

“Amor de patria comprende / cuánto el hombre debe amar / su dios, sus leyes, su hogar / y el honor que los defiende”

Y esa patria, como todas las patrias del mundo, con su dios, leyes, hogar y honor, está simbolizada en el escudo, el himno y la bandera.

Hoy el Colegio Steiner rinde honores, luego de su himno y escudo, al tricolor nacional.

Y lo hace por intermedio de los alumnos/as de VI curso, del último año del Bachillerato, en la edad en que termina su adolescencia, para iniciar su accionar ciudadana.

Momento trascendente para jurarle a la patria el amor y respeto y, sobre todo, comprometerse a fortalecerla como el mejor bastión de honor y dignidad.

Pero ¿Cómo se defiende a la Patria? y ¿de qué? Estoy convencida de que lo que hace fuerte e invencible a los pueblos, es primero la libertad y luego la educación.

Hace poco en la Cumbre Iberoamericana de la excelencia educativa, celebrada en Lima, cuando recibí el trofeo a la Excelencia otorgado a nuestro Colegio, ante cientos de educadores de América Latina, España y Portugal, levanté en mi voz las palabras de Bolívar el libertador, al que todos los pueblos de América le venimos rindiendo tributo-no solo ahora,-sino desde que aprendimos a vivir la libertad. Esas palabras dichas en 1824:

“Las naciones marchan hacia el término de su grandeza, con el mismo paso con que camina la educación Ellas vuelan si ésta vuela: retrogradan, si retrograda y se hunde.

Bolívar sabía que -La libertad de América sería imposible si sus pueblos siguen en la ignorancia.

Al pueblo ignorante no le interesa la libertad en su propia dimensión como derecho humano y cae ante cualquier “canto de sirena” que le entonen.

¡Jóvenes del Steiner! Hoy ante nuestra bandera patria, yo os convoco a que, cada uno de ustedes, con el juramento que hicieron se comprometan como ecuatorianos, a defender a nuestra Patria de la ignorancia para que su libertad no sucumba.

¡Respetemos y hagamos respetar el deber y el derecho!

¡Por la Patria ecuatoriana! ¡Marchemos de frente a la esperanza! porque ustedes jóvenes, son los hacedores de su presente y futuro, y es que como dijo Adenauer:

“El destino de un pueblo no es desconsolador, mientras su juventud comprenda lo que es la libertad y lo que significa perderla”

¡Arriba la libertad! ¡Arriba la educación!

¡Arriba el Ecuador!

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