No me referiré a la precipitada escapatoria que tuvo que efectuar el Presidente Correa de la zona de Quimsacocha donde fue para verificar el malestar de los pobladores por la concesión minera entregada a una transnacional y que contaminara grandes fuentes hídricas que perjudicaran al campesinado; lo haré sobre la aprobada Ley de Control de Poder de Mercado o Antimonopolio y al proyecto de Reforma Tributaria que se tramita en la Asamblea, nuevos golpes a distintos sectores de nuestra población.
La vigencia de la Ley Antimonopolio aprobada en septiembre pasado, desmotivará el ingreso de nuevos capitales una vez que en su texto aborda normas para el comportamiento y desarrollo de instituciones financieras y de otros operadores del mercado, además de abarcar aspectos tan diversos que la convierten en inconstitucional.