Por el respeto a la mujer y a la ciudad

“Sin embargo las mujeres aún constituyen una minoría como categoría política… La minoría se establece por la subordinación respectiva a la que las someten los grupos que detectan el poder…

Marcela Legarda-Antropóloga Mexicana.

Conocí a la Legarda, en un Simposio en Quito, discutiendo su libro de 385 páginas Los cautiverios de las mujeres…, y entre acuerdos y desacuerdos, concluimos que la condición histórica de la mujer solo dependerá de la fuerza decisoria de la misma mujer, porque el machismo ancestral subyace latente en los varones, especialmente, en los no evolucionados y timoratos, que escondidos en las sombras, en cualquier momento saltan sobre ella y la agreden.

Tal como el Asambleísta Cordero ha hecho con la Ministra de Finanzas, sacando a relucir su machismo, la espetó públicamente amenazándola con un “juicio Político” ¡Qué prepotencia! y miedo de que ella vaya a rectificar sus cálculos, lo que sería justo.

Y entonces, no solo se evidencia su prepotencia sino, lo que menos pensábamos de él, su odio a esta Ciudad y a su Alcalde, al que trata despectivamente. Ya quisiera cualquier político ser un líder como Nebot, a quien respondieron los cientos de miles de gente esgrimiendo la bandera azul y blanco y hasta, “toldos”, el jueves 11 de febrero copando la Av.9 de Octubre, parques y calles adyacentes; con cientos de pancartas contra el Régimen, en señal de protesta y como parte representativa de este Ciudad, cuyos hijos no la dejarán avasallar jamás.

Y entre ellos las mujeres que, en el plano ciudadano, tenemos todo el derecho a protestar como madres, esposas, hijas, hermanas, abuelas o nietas. Gracias también, a las que desde hace algunas décadas como Congresistas del País trabajaron leyes y reformas al Código civil en nuestra defensa, abriéndonos el camino a la vida política, social, económica, cultural y civil, para que como Diputadas, Juezas, Ministras, Concejalas, Consejeras, Asambleístas; candidatas presidenciales, Dirigentes sociales y gremiales, etc., trabajemos para el pueblo que nos elige; sin dejarnos arrebatar la potestad a actuar sin presiones coercitivas, porque antes está nuestra dignidad humana en igualdad de derechos con el varón. Teniendo siempre presente a aquellas obreras heroicas que fueron sacrificadas en el siglo pasado y las que, en foros nacionales e internacionales, seguimos luchando por todas las mujeres del mundo.

En cuanto al Asambleístas Cordero, por el trato irrogado a la Ministra de Finanzas del País y la forma despectiva con que se refiere a nuestro Ayuntamiento.

Nosotras: ¡Mujeres ciudadanas de Guayaquil!

A nombre del derecho al respeto humano y el rechazo a “toda apología del odio nacional, que incite a la discriminación, la hostilidad o la violencia prohibida por la Ley “Art. 20-Pacto Int. D.D, civ. y pol., declarémosle Persona irrespetuosa del género femenino y enemigo de Guayaquil

Alguien me dijo-Pero si eso es ya costumbre de este Gobierno ¿Acaso que “su majestad” no lo hace continuamente?…

A lo que yo respondo-Sin lugar a dudas estamos frente a un fenómeno de debilidad humana ante el poder.

Bien nos valdría a todos, hacer presente el pensamiento de Sacha Gutri:

“Un hombre inteligente se repone pronto de un fracaso.

Un hombre mediocre no se repone jamás de un triunfo”