Preocupa la falta de seguridad que existe en el país. Cada vez leemos más noticias de asesinatos, asaltos, violaciones, narcotráfico, sicariato y otros delitos. Creo que la política de tolerancia del Gobierno, de defensa a los revolucionarios, que en realidad no son otra cosa que narcotraficantes y asesinos disfrazados de izquierdistas, ha sido una política equivocada, que ha aumentado la inseguridad en nuestra Patria. Si a eso sumamos la cantidad de cubanos que el Gobierno ha tenido el desatino de importar para cumplir con labores que bien podían ser realizadas por nuestros compatriotas que necesitan de trabajo, aumentando la tasa de desempleo, podemos comprender el porqué del aumento delincuencial en todo el país.
Lo más grave de este asunto, es la cantidad de presos, ladrones, violadores, sicarios y otro tipo de asesinos, que son capturados y puestos bajo la ley, que a los pocos días vuelven a las calles y luego nuevamente delinquen, vuelven a ser capturados, vuelven a la cárcel a recibir instrucciones y salen a delinquir otra vez.
Las autoridades de la justicia no pueden atender todos los casos que se presentan y más del 50% de estos delincuentes son puestos en libertad porque no llegaron a tener un juicio, a más tardar un año luego de su captura.
Se exige que haya una denuncia para poder tener en la cárcel a los delincuentes, así se los haya pescado en delito flagrante. En esta forma, es imposible que se castigue a alguien, ya que los compinches amenazan a los testigos y a los perjudicados y no tienen empacho en matar si llega a ser necesario, para sacar libre al capturado.
En la forma como se quiere lograr la justicia en nuestro país, no vamos a lograr la justicia, sino la impunidad del delincuente. Creo que si se desea en verdad lograr justicia, es necesario que haya cambios drásticos en la forma de administrarla.
En primer lugar, si a alguien se captura in fraganti, no se lo puede dejar libre bajo ninguna circunstancia y es el Estado el que debe seguirle juicio, aunque el perjudicado o su familia permanezcan callados. En segundo lugar, si a alguien se captura como reincidente, ya no puede tener libertad bajo ninguna circunstancia y su condena pasa a ser el doble de lo que le corresponde. Si se lo captura por tercera vez, su condena debe ser el cuádruple y así sucesivamente. Esto sí va a ser un disuasivo para que persista la delincuencia. Así mismo, si una persona es capturada por asesinato o violación, tendrá su pena, la que deberá ser cumplida de acuerdo a las leyes. Con esto ya está advertido. El que reincide, tendrá el doble de su pena y el que es capturado por tercera vez, el cuádruple.
Por la forma como se aplica la justicia en el país, parecería que el Estado lo que no quiere es pagar lo que cuesta tener detenido a un delincuente, tanto en su alimentación como en mantenerlo preso, con las seguridades para que no escape. Si ese es el caso, es preferible que al reincidente en asesinatos, se le aplique la pena de muerte y al reincidente en violaciones, se lo castre. De todos modos ya se le ha advertido al haberlo hecho la primera vez, de modo que guerra avisada, no mata gente.
saludos:
totalmente de acuerdo, con el análisis que da Juan Fernando Gómez, nuestro País lastimosamente es uno de los mas peligrosos a nivel sudamericano, y esto se debe a muchos factores, pobreza, desempleo, yo diria que otro de los factores es (lastimosamente) las fronteras abiertas, este es el fin que persigue no solo america latina sino el mundo entero, pero lastimosamente sudamerica no esta preparada para tener abiertas las fronteras, en especial el nuestro, como bien lo saben, el sicariato en nuestro país avanza de una manera muy rápida, inmersos en estos sicariatos con gente de colombia, perú, y ahora cubanos; estoy de acuerdo en el trato, y respeto universal y la visa universal, pero en un pais subdesarrollado como el nuestro esto es solo un ideal.
Es verdad que en delito flagrante, no se debería tener ningun tipo de acusación, ya que el Estado es el ente protector de los y las ciudadanas, en consecuencia deberían ellos seguir con el proceso, y no dejar en libertad al siguiente día de ser detenidos; verdad es, que tenemos un sistema carcelario deficiente, por decir lo menos, son centros que te ayudan a seguir el mismo camino de delincuente, de rehabuilitación solo se tiene el nombre.
Tres años de malos ejemplos desde la Presidencia, de los alzamanos capitaneados por desvergonzados como Cordero, Panchana, Buenaño y etc., de la falta de respeto a la constitución y las leyes con la toma a la brava del Poder Judicial y la amoral apropiación de la Corte Constitucional han contribuído a crear una ambiente impunidad y bajas pasiones de la que se aprovechan los desadaptados sociales para cometer toda suerte de fechorías, prevalidos de estar protegidos por los defensores de los derechos humanos de los delicuentes, que son los único que importan a los izquierdistas revolucionarios. Cómo no van a asaltar, robar, matar, secuestrar, violar los delincuentes muy bien armados, sabiendo que la ciudadanía y los guardias privados están desarmados? La policía nacional está armada y lista para proteger al presidente y a sus colaboradores (y a las esposas de sus íntimos, recuerden a la Sra. Pesántez)y para dar palo a quienes supuestamente ofenden la majestad presidencial. Pero el ciudadano llano está totalmente desprotegido, mientras campea la corrupción y la impunidad desde las más altas esferas. Esta pandemia que vivimos arranca desde este gobierno y Correa no puede echarle la culpa a la partidocracia o a la prensa corrupta, peor al imperio.