Se nota claramente, por lo que es motivo de preocupación y crítica, que las preguntas direccionan al votante a pronunciarse como el presidente quiere ya que indica: “Con la finalidad de mejorar la seguridad ciudadana…”, “Con la finalidad de evitar la impunidad y garantizar la comparecencia a los juicios penales de las personas procesadas…”, “Con la finalidad de evitar conflicto de intereses…”, “Con la finalidad de superar la crisis de la Función Judicial…”, “Con la finalidad de tener una más eficiente administración del sistema de justicia…”
¿Quién no desea conseguir esos objetivos? Eso no es preguntar, eso es inducir.
Por otro lado, en las preguntas se mencionan anexos que estoy seguro la gran mayoría de los ciudadanos no conocen. ¿Debemos esperar del gran conglomerado ciudadano que investigue para contestar a las preguntas? ¿O las preguntas deben estar claramente estipuladas en el papel? ¿Cuántos en el país pueden hacer ese trabajo de investigación? Así, se habla del anexo 1, 2, 3, 4, 5, de enmiendas en la Constitución.
La misma inducción a votar como el presidente quiere, continúa cuando se indica: “Con la finalidad de combatir la corrupción…”, “Con la finalidad de evitar que los juegos de azar con fines de lucro se conviertan en un problema social…”, “Con la finalidad de evitar la muerte de un animal por simple diversión…”, “Con la finalidad de evitar los excesos en los medios de comunicación…”, “Con la finalidad de evitar la explotación laboral…”
Yo pienso, y muchos ciudadanos piensan, que este proceso tiene la finalidad del presidente de acaparar todos los poderes y silenciar a la prensa y a sus opositores. Pero no está escrito “Con la finalidad de acaparar todos los poderes…” en las preguntas. Entonces, ¿podemos aceptar que las preguntas son imparciales como corresponde?
Lo más preocupante es que la Constitución de Montecristi fue la política central del presidente actual, algo por lo que gastó cientos de millones de dólares y mantuvo al país paralizado los dos primeros años. Ahora, quiere cambiarla a su manera porque se ha peleado con sus antiguos aliados de izquierda, porque los traicionó, porque lo restringe, porque no quiere Consejo de Participación Ciudadana, porque no puede tener dos amos a la vez y quiere todos los poderes para gobernar desechando a quienes lo ayudaron a llegar al poder y a quienes se oponen a él y gobernar con los sumisos, los esbirros, los que callan, los que se “portan bien” y hacen lo que él ordena.
Las enmiendas deben ser hechas de acuerdo a la Constitución de Montecristi. Tenemos que cambiar el sistema de justicia independientemente, sin quebrantar la Constitución, manteniendo la independencia de poderes, sin manipulación ni intervención del que sin empacho dice que quiere meter las manos en las Cortes. Los dictadores meten mano en la justicia, no los presidentes. Debemos poner presión a la Corte Constitucional para que se pronuncie sin ambigüedades en el tiempo asignado y que no intenten lavarse las manos dejando pasar el plazo sin manifestarse acerca de la Consulta Popular y Referéndum y dejar pasar esta insconstitucionalidad porque quebrantar la Constitución es inconstitucional y sin independencia de poderes Ecuador dejaría de ser una república democrátrica.