Las disposiciones de los mandantes han sido desde el primer día mal utilizadas.
En el famoso cuento del llamado a una Asamblea Constituyente, el pueblo votó a favor de que se instale una que presente una PROPUESTA y, de ser aceptada, aplicaría.
Más demoraron en llegar al dispendioso local en el cual se reunirían, que a base de cuentos comenzaron los pájaros de mal agüero a disparar contra las escopeta.
La historia es harto conocida. Presentaron una obra teatral burda para “democráticamente” tomarse el poder.
Y, ni eso les bastó, entre gallos y medianoche los borregos y corderos cambiaron lo que quisieron. Como toda cosa hecha al apuro, con malas intenciones, tenía que tener fallas y ahora vemos que la principal es que con ella se puede hacer lo que dé la gana.
Está en proceso el llamado a una “Consulta Popular”, para que el Pueblo “Soberano” se pronuncie.
¿Sobre qué nos vamos a pronunciar? ¿Sobre el lobo disfrazado de oveja?
Preguntas hábilmente mal formuladas, para conducir al engaño. Tantas personas de valiosa opinión (algunas hasta ayer “ñaños del alma” del Presidente), las consideran de espíritu dañino.
Deben leer, tienen que leer, el brillante y juicioso artículo del doctor Nicolás Parducci Sciacaluga, del miércoles 16 de febrero del 2011, Diario El Universo, ¿Prolijidad normativa? II. Jurista, que lo menos que se puede destacar de él, es que fue un excelente, insobornable y altamente responsable Procurador General de la Nación y ¡maestro de maestros!
Desde antes de que se cambien de nombre, creemos que existen demasiados estamentos con funciones rivales.
Existe la Corte Suprema de Justicia. Suprema o supremo quiere decir: Sumo, altísimo; y en su segunda acepción, 2. adj. Que no tiene superior en su línea.
Sin embargo, para tener un as bajo la manga, nace ahora la “Corte Constitucional”, con capacidad de juzgar lo juzgado por la más alta Corte.
La polémica ha marcado la crónica de la actualmente llamada Corte Constitucional.
La reinante Corte Constitucional, que cortesanamente acaba de darle vía libre a la Consulta Popular del Ejecutivo, tuvo un parto polémico en mayo del 2007. Cuando todavía se denominaba Tribunal Constitucional (TC ¿Telecentro, por ser un gran show?).
Haciendo una sui generis interpretación de la Constitución de 1998 que estaba vigente, el denominado “Congreso de los Manteles”, integrado por los legisladores alternos que se apoderaron de los cargos de los destituidos por legalmente oponerse a la consulta popular para instalar una Asamblea Constituyente planteada por el régimen, por el bien lubricado Tribunal Supremo Electoral (TSE).
Como fastidiaban, resolvieron también destituir a los vocales del TC que habían entrado en funciones en febrero del 2006.
Estos a su vez eran los reemplazos de los que renunciaron en abril del 2005, luego del golpe en contra del ex mandatario Lucio Gutiérrez. Siendo estos, asimismo, sustitutos de los del TC designado, en el 2004, tras la destitución del que se nombró en el 2003.
Claramente vemos que siempre han sido comodines.
Enrique Tamariz, miembro del TC del 2006, sostiene: “En realidad nos destituyeron porque estábamos opuestos a la forma inconstitucional en que se depuso a los 57 diputados y luego se designó a los de “los manteles”. Nosotros no íbamos a responder a sus intereses políticos”, expresa.
“El Tribunal Constitucional se metamorfoseó en la Corte Constitucional y los vocales de ese Tribunal se metamorfosearon en magistrados… Esa fue la primera violación de la Constitución que cometieron”.
En octubre del 2008, al día siguiente de que la Constitución de Montecristi entrara en vigor, el TC emitió un fallo por el que se autoproclamó Corte Constitucional, ente creado por la Constituyente como órgano máximo de control constitucional y protección de derechos.
La argucia se sustentó en que el Régimen de Transición tenía un vacío respecto a qué entidad debía asumir las funciones de la C. C. definitiva hasta que esta fuera seleccionada a través del mecanismo establecido en la nueva Constitución.
Uno de los principales críticos de ese fallo fue, el ex presidente de la Constituyente, Alberto Acosta.
En agosto del 2009 se presentó en la Fiscalía una demanda penal contra los “magistrados” de la C. C. por el supuesto delito de usurpación de funciones. Pero, como es usual, se archivó en diciembre pasado.
Por Ley, habiéndose la “Corte Constitucional” auto ungido inicuamente, dicha corte no existe legalmente; y, por lo tanto, todo lo actuado desde su auto proclamación es nulo.
La Corte Suprema como ente judicial calificado para velar por la Ley y la Justicia: “Que no tiene superior en su línea” debe ser el organismo que dirima.
“Hoy nos podrán gritar a la cara que somos un obstáculo para el desarrollo, pero mañana tendremos un lugar en la memoria de un país que se desarrollará por aquellos que nunca callamos” (anónimo).
Y si nuevas cadenas prepara
la injusticia de bárbara suerte,
gran Pichincha! prevén tú la muerte
de la patria y sus hijos al fin;
hunde al punto en tus hondas extrañas
cuando existe en tu tierra: el tirano
huelle sólo cenizas y en vano
busque rastro de ser junto a ti.
Salve Oh Patria.
LOS AMIGUITOS ARABES DE CORREA ESTAN CAYENDO…OJALA QUE EL DE AQUI SIGA EL MISMO CAMINO….TODOS A VOTAR NOOOOOOOOOOO
GRACIAS POR SU VALIOSO ARTICULO.
¿ CUAL ES EL COMUN DENOMINADOR DEL EVO, ORTEGA, EL ORANGUTAN,EL MAMON AHMADINEYAD, EL «GARRAFI» Y LA «RISITAS»??????
Comparto su opinión en cuanto a la corte constitucional de que lo actuado por este ente es nulo de nulidad absoluta, y no solo ellos (cc) sino, todo lo actuado por el famoso congresillo que se autoprorrogó en funciones violando la constitución los primeros,y violentando el estado de derecho los segundos.