Carta a Dios

Te escribo esta carta en un momento de reflexión y tristeza. Veo la realidad y me doy cuenta que el país está peor. Miro a los que tienen el poder y asquea la prepotencia con que pretenden someternos a los demás. Parecería que todos somos brutos y solo ellos son los que saben lo que nos conviene. Pretenden callar el don más preciado que nos diste: nuestra libertad. Es que por estar ensimismados en su vanidad, pretenden decirnos que debemos pensar, que debemos expresar, como actuar y qué hacer.

Son tan egocéntricos que nos tratan de quitar nuestra libertad religiosa, cuando la relación entre el hombre y tú, solo depende de su conciencia.

Con esta gente belicosa en el poder, todos nuestros hermanos se empeñan en destruirse cada día. Pareciera que todos los esfuerzos de los ecuatorianos se encaminan al odio y la destrucción.

No comprendo todavía cómo te botaron de la constitución. No entiendo cómo en nombre de la patria te sacaron de la carta magna y dejaste de proteger oficialmente a nuestro país. Una horda de blasfemos te sacaron de ella para quedar bien con su jefe y se olvidaron que tú eres su jefe y el jefe de su jefe.

Estos anticristos te odian. No aceptan que en su país revolucionario conste tu nombre oficialmente como representante del país.

Tú eres el Dios de todos… Eres uno solo. No puede haber dos iguales o diferentes. Si fueran iguales serían uno solo y si son diferentes se destruirían…

Es imposible no encontrar tu presencia en lo que nos rodea. Hasta un ciego tiene los sentidos para percibirte en cada cosa que existe. Nuestro mismo cuerpo es presencia tangible de tu vivencia. La coordinación maravillosa de sus funciones, lo complejo de las mismas y su perfecto orden, son pruebas de tu existencia.

No entiendo cómo tus seguidores pretenden encerrarte entre el cemento, si tú estás en todo lo creado. No alcanzo a comprender porque te construyen templos, si tus templos son todas las cosas que existen.

No sé cómo te quieren aprisionar en religiones inventadas por el hombre. Eres Dios y el Dios de todos; las doctrinas son humanas.

No puedes ser judío, chino o de la india. No puedes ser hombre, ya que segregarías a la mujer. No puedes ser blanco y barbado, si hay indios lampiños, negros con pelo casquillo, cholos cabello con púas y amarillos sin pelos en la cara.

El hecho de que haya personas que hablen a tu nombre, son mentiras de la condición del hombre, que buscan en esto una forma para vivir bien.

No sé cómo hacen imágenes tuyas, si nadie te ha visto ni se ha registrado tu rostro en ningún documento previo.

Sé que para ti no existen escalafones ni distinciones entre los tuyos.

Es absurdo ver un pedazo de barro moldeado por el hombre, bendecido por el hombre, pasar a ser divino en tu nombre. No puedo entender cómo me hicieron crecer creyendo en el purgatorio. Recuerdo que en misa nos hacían rezar por las almas del purgatorio y sin embargo hace poco tiempo se abolió el purgatorio por decisión de los hombres de la iglesia. me pregunto: ¿donde quedaron todas las almas del purgatorio?…estoy seguro que jamás tu dividiste al universo en cielo, infierno y purgatorio.

Nos han llenado de mitos y fetiches que no habían cuando tú comensaste a ordenar a tus seguidores.

Con qué desfachatez se pide dinero por ti, para mantener organizaciones llenas de suntuosidad, pompa y estéril protocolo.

En el comienzo, tus representantes vestían harapos y a duras penas calzaban un par de sandalias. Ahora tu organización tiene bancos, empresas y carros lujosos. No entiendo por qué han cambiado tanto de tu humildad inicial a la opulencia actual.

Me da risa cuando oigo que existen leyes internacionales, nacionales, civiles y penales, si la suprema ley tuya es la simplicidad total.

Las leyes naturales son las que resultan de la misma naturaleza del hombre, aunque no hayan sido escritas en las leyes del hombre.

Es jocoso ver a representantes tuyos que dicen tener mandamientos tuyos y en verdad son cuentos suyos por su necesidad de controlarlo todo. Tú pusiste dentro de nosotros los principios universales con tus normas. La conservación de la vida, la perpetuación de la especie y el no hacer a otros lo que no nos gusta que nos hagan a nosotros, son leyes que no necesitan escribirse para que sean universales.

No me explico cómo tus hijos pelean por tener el poder y hasta se matan por él.

El Ecuador es tan pequeño y todos vivimos aquí…

Si hubieras querido que existan las diferencias de clases, hubieras demarcado estas diferencias. Los problemas del autoritarismo son otra invención de los acomplejados del gobierno.

La ley animal es sabia. Nacer, crecer, perpetuar la especie y morir. Quizás ahí esta la felicidad total. El hombre daña con el complejo de controlarlo todo. En el fondo solo cambió la sencillez por la ambición… y el ambicioso sólo se necesita a sí mismo.

Debemos comenzar nuevamente. Tenemos que hacer un Ecuador diferente. Volvamos al principio pero con la experiencia adquirida. Nunca es tarde para reconsiderar.

Esta locura que nos gobierna, gracias a dios cae en mi pensamiento que dice: Para que todo siga igual, es imprescindible que algo cambie…este cambio deslocado, solo nos llevará a recuperar la paz y el respeto al hombre que teníamos,

El buen juicio es el resultado de la experiencia y la experiencia es el resultado de los malos juicios.

Tú también nos diste la capacidad de asimilar las malas decisiones; aunque parezca que todavía no lo entendemos cada vez que votamos en una elección.

El que quiere el fin, quiere los medios…el que quiere la paz, en la paz tiene los medios.

Dale sosiego a quién quiere el caos, unidad al que divide, tolerancia al iracundo, humildad al prepotente, respeto al irreverente, prudencia al hablador, realización al acomplejado, cordura al demente, tranquilidad al resentido, nobleza al envidioso, amor al odiador, modestia al vanidoso, perdón al rencoroso.

No dejes sobre todo, que un demente aniquile a nuestra gente.

Perdónalo por negarte y utilizarte para llegar a donde ha llegado para satisfacer su propia ambición.

No dejes que la patria sea manejada por un ambicioso cuya ambición no tiene límites…

Atentamente,

Tu hijo.