Se me acaba otro año calendario. No se cuantos me quedan pero creo son ya pocos. He acumulado bastantes y con satisfacción lo digo porque puedo contarlo ahora tranquilamente cuando ya la ambición descansa. La ambición desmedida emborracha, enloquece y es por eso que solo los viejos pueden sentirse serenos como para alcanzar la categoría de sabios. Excepción hecha, por supuesto, con Rafael el emperador ecuatoriano que si lo acepto como sabio es porque tiene el poder para mandarme a la cárcel por mi simple desacato.
Prácticamente he terminado de escribir mi auto biografía que me ha tomado dos años. Un repaso lento sobre mis experiencias, escritas con inocencia y crudeza. Con esa inocencia que me caracterizaba cuando era jovencito como la de esos cara de niños que ahora reforman el sistema judicial completo, y con la crudeza que puedo hacerlo ahora cuando todo quedó atrás y la serenidad me lo permite. Mi trabajo literario está prácticamente terminado aunque mi vida no ha finalizado por aquello de que nadie muere la víspera. Solo falta que una joven que admiro por su poder mágico en materias audiovisuales, termine el encargo de diseñar la portada. La carátula realizada con la juventud y frescura de la flor de un árbol de cerezos, y el contenido que va haciendo madurar aquel fruto, hasta que finalmente conforme avanzan las páginas se vuelve negro y picoteado por las aves hasta que finalmente cae al suelo donde se entierra con pocas posibilidades de convertirse en semilla. Todo ese proceso de corrosión inevitable me da la autoridad para escribir estas meditaciones dirigidas a los jóvenes revolucionarios que se creen sabios sin serlo.
Creen saberlo todo y suponen que su cuarto de hora durará mil años. Hablan por TV con soltura y se siente unos René Ramírez, con derecho a planificar hasta cuantos gases puede alguien expulsar luego de comer o no una guatita, porque hasta eso está planificado por el Estado diseñado por ellos. Me refiero en general a estos jueces niños, ministros, funcionarios y tecnócratas de bolsillo que ahora nadan a sus anchas en una laguna calma, una vez que todas las funciones del Estado en verdad dependen del vozarrón sabatino. Se sienten protegidos de los vientos que emanan de ese aliento que se repite de semana en semana, y sus velas se hinchan bajo el impulso de improperios.
Una de las conclusiones que obtengo de mi análisis biográfico, y que puede servir de lectura para esos tiernos cachorros revolucionarios, es que todo se va transformado y que no hay nada que no se corroa tan rápido como el ser humano encurtido o encubierto en poder absoluto. Eso sucede incluso en el nivel interno de cada familia. La gran sorpresa a la hora de hacer el balance de una vida es descubrir como fueron y fuimos cambiando. Los amigos o compañeros de aquellos ideales que nos mantenían unidos, suelen terminar desbandados o en el bando contrario conforme van cayendo unos u otros prisioneros de las debilidades humana. Detrás de la revolución partimos todos unidos hasta que se van interponiendo la consecución de riquezas, poder o beneficios.
Jóvenes amigos, revolucionarios ahora proclamados, miren a su lado y revisen cuantos de los compañeros que conocéis de toda la vida han cambiado de casa, de vehículo y ahora van a Miami a comprar carteras finas para regalar quizás a sus mozas. Hijos estudiando en el extranjero cuando antes tenían las pensiones colegiales atrasadas. Trajes de marca cuando antes eran dados la vuelta por esos sastres de barrio que todavía existen. Conforme revisen de a poco, conforme comprueben cuantos de ellos están emigrando a la vereda de enfrente, a la de los nuevos ricos, significará que la revolución palidece. Solo hay una manera de impedir ese desgaste natural que corroe. Se debe lograr siempre cambios pero dentro de un proceso democrático donde cada cierto período las autoridades sean reemplazadas, y que haya libertad de prensa y de expresión que aplican frenos al desafuero. Duden y cuestionen aquello que ahora les embruja haciéndoles creer que el poder absoluto asegurará los resultados revolucionarios. Duden al menos cuando incluso se quiere impedir que un parlamentario, soez que sea, quede impedido de usar la palabra dentro de la Asamblea. No permitan que los asambleístas guarden silencio y se queden convertidos en corcho, sea taponando lo que convenga mantenerlo taponado, o flotando por su intrascendencia y falta de peso específico como amorfas heces fecales.
Jóvenes revolucionarios; No despreciéis la experiencia del pasado. La humanidad evoluciona en base de acumulación de conocimientos y acontecimientos. Vosotros sois el músculo, el nervio pero el ser humano tiene un cerebro donde se almacenan los resultados de las vivencias. Y este Ecuador y el mundo tienen vivencias y experiencias que intentan ser echadas al tarro de basura. No os dejéis engañar por novelerías institucionalizadas como soluciones mágicas, y echando la culpa al pasado como si hubiesen otras generaciones anteriores que gozaron de ese mismo ideal que ahora os impulsa. Ese afán de cambiarlo todo solamente sirve para acrecentar el poder absoluto y prolongar en el tiempo su uso hegemónico .
Jóvenes revolucionarios; seguid en la aventura de la eterna búsqueda de la sociedad perfecta, pero mirando de reojo cuantos países andan en otras direcciones o bajo otros modelos de las que ahora se intenta imponer bajo una presión publicitaria muy costosa. Miren además, y no de reojo, como cuantos camaradas y amigos de esta aventura ya andan paseando por la vereda de enfrente rodeados de inusuales lujos, y que son realmente los adversarios de esta revolución, que como todas, se auto devora inevitablemente cuando depende de un caudillo y se prolongan indefinidamente. No ataquéis a quienes detractan el proceso, sino a quienes se benefician personalmente de este.
Mi biografía está escrita y casi terminada. La vuestra está en plena construcción. Leed estos consejos de tarde en tarde, que se los dice un viejo que acaba de redactar su propia biografía y ya nada puede ganar, ni perder.
Henry, esa obra tiene que ser best seller, mejor que la de «El Gran Hermano», en impacto directo.. sin medias tintas ni soslayar verdades que a veces son duras de enfrentar. Recuerde que !por sus obras los conocereis!, esperamos no nos defraude. Enhorabuena!
Los que ya peinamos canas lo entendemos perfectamente bien mi estimado amigo. Espero leer pronto su libro y guardarlo como lo hice con Al Desnudo.
Por Guayaquil libre independiente y autónomo
El verdadero sabio comparte su sabiduria como un gran maestro que motiva e inspira… a adquirir conocimientos a través de los estudios y a aprender de las experiencias ajenas, para no caer en los mismos abismos.
Sus palabras estan colmadas de verdadera sabiduria que motivan e inspiran.
me apunto a comporar su BIOGRAFIA! EL 4TO.DE HORA de los AUTOCRATAS Y DICTADORES durara tanto como la ignorancia y el miedo de los pueblos se los permita.DURARA MUCHO en tanto en cuanto una mayoria se sienta comoda y vengada en su revanchismo social\ y en tanto en cuanto los de valores superiores sigan amojonados, amedrentados y acojudados.LA METAMORFOOSIS del poncho al saco y del monudo al pelucon solo sera cuestion de que se obedezca al mandamas!VIVA LA REVOLUCION…!EN QUE LOS DON NADIE DE MONO Y MOCHILA SE CONVERTIRAN Y BEBERAN SOLO EN DON\PERIGNON Y EN BMW SE TRASLADARAN!
Me gustan tus c0omentarios, Te saluda un ex compañero CSG 59