1. En un estudio de los datos del programa danés de control de nacimientos, se encontró que el uso de glucocorticoides de inhalación durante el embarazo, ha sido ligado a un aumento de riesgo de desórdenes endocrinos y metabólicos en los productos de esos embarazos.
2. El FDA aprobó el uso del sistema de corazón artificial Berlín en Pediatría mientras se espera un donante. Venía siendo usado sólo por uso compasionado desde el año 2000.
3. Algunos juguetes populares pueden dañar el oído de los niños, debido al alto volumen de ellos (algunos superan los 100 decibeles).
4. El uso de cannabis (marihuana) en niños de alrededor de 12 años, está siendo ligado, de acuerdo a investigaciones el Australia con malformaciones cerebrales, entre ellas un área de lóbulo frontal menor que la normal y anormalidades de la corteza fronto-orbital.
5. El Pediatrics de la AAP reporta un seguimiento de personas que nacieron como prematuros extremos, pesando menos de 600 gramos (1 libra 9 onzas) y que ahora son adultos jóvenes, como el caso de Madeline Mann que nació a las 26 semanas de gestación pesando menos de 300 gramos (9,9 onzas), tiene ahora 22 años y es estudiante de honor en Augustana College. Los estudios concluyen que más que el peso de nacimiento, influye la edad gestacional en la sobrevida y el desarrollo ulterior.
6. El riesgo de asma a los ocho o más años, se reduce en los niños con un índice de masa corporal normal a la edad de 7 años, en relación con los que lo tienen alto.
7. Un estudio publicado en el Pediatrics, encuentra que hay más mortalidad, riesgo moderado a severo de disfunción funcional y de hemorragia ventricular severa, en prematuros extremos varones que en mujeres.
8. Un estudio en Nueva Zelandia concluye que hay un 30% menos de riesgo de cáncer de colon en las personas que consumen leche en la adolescencia que en los que no toman leche.
9. El uso excesivo de ácido fólico durante el embarazo puede aumentar el riesgo de asma y atopias en esos niños.
10. El uso exagerado de antioxidantes y vitaminas puede favorecer el riesgo de cáncer en las personas que los consumen.
Siempre en medicina es importante recordar que toda exageración es mala. No conviene abusar en el exceso ni en la falta. Es importante saber mantener un equilibrio adecuado. Ni mucho, que queme al santo, ni poco que no le alumbre.