No obstante el coronel de Policía César Carrión, acusado de haber participado en un supuesto intento de magnicidio el 30 de septiembre de 2010, durante los disturbios que se generaron en la revuelta policial, fue sobreseído en todas las instancias judiciales; se pretendió -a través de la acuciosa intervención de la Contraloría- hacerle pagar el valor por los daños ocasionados al Hospital, argumentando que no había asegurado dicha casa de salud policial. El coronel Carrión al momento apenas tenía dos meses de Director y el tema del seguro, en las instituciones como la Policía o FF.AA. se resuelve en instancias superiores; como si esto fuera poco, el Consejo de Generales decidió darle de baja de las filas policiales, “por atentar contra el prestigio y honor de la Policía Nacional”. La decisión del Consejo de Generales, fue calificada como “Crónica de una baja anunciada”.
El país recuerda la intervención furibunda del Presidente Correa en el enlace sabatino, enterado de las declaraciones hechas a la CNN (autorizadas por sus superiores) por el coronel Carrión, Director del Hospital de la Policía, señalando que el presidente Correa no estuvo secuestrado en el hospital policial. “Ni sé el nombre de este tipejo, pero que sepa con quién se está metiendo: soy el Presidente de la República ¡pedazo de majadero!… Tú eres mi subalterno y no puedes estar tratando de hacer quedar como mentiroso a quien es tu jefe”; luego lo acusó de conspirador y ordenó su relevo del hospital e incluso su separación del servicio activo. Se entiende que los policías y militares tienen leyes y reglamentos que rigen su vida institucional; la misma constitución en su Art. 160, dice: “Los miembros de las Fuerzas Armadas y de la Policía Nacional estarán sujetos a las leyes especificas que regulan sus derechos y obligaciones (…)”. “Los miembros de las Fuerzas Armadas sólo podrán ser privados de sus grados, pensiones, condecoraciones y reconocimientos por las causas establecidas en dichas leyes…”. El Abogado del coronel ha manifestado que “Lo único que han hecho los generales es cumplir órdenes. Recordemos que el Presidente manifestó en una sabatina que el coronel debe ser dado de baja. Lo único que han hecho es cumplir”.
Este tipo de decisiones en las instituciones jerarquizadas, produce un terrible daño: los subordinados pierden la fe en los mandos. La lealtad tanto en la Policía como en las FF.AA. es de doble vía, es decir de los subalternos a los superiores, y más aun, de los Jefes a los subordinados; en este caso, vale transcribir un pensamiento de Luís G. Carrillo: “Existen tres cosas que me decepcionan: la hipocresía, porque no nos permite confiar. La injusticia, porque hace a unos más que otros cuando no se han ganado. Y la deslealtad porque deja sin piso parte de nuestros principios”.
En conclusión, la decisión tomada por el Consejo de Generales de la Policía, simplemente es ser obsecuentes con sus propios sicarios.
CALLA TU BOCA….. LOS POLICÍAS SIEMPRE SERÁN POLICÍAS, ESPECIALMENTE EN SUS MENTES…. Y PEOR SI SON SERRANOS.,….
POR ESO… CALLA TU BOCA……
Muy de acuerdo con su comentario, pero lamentablemente hay Mandos que pierden la optica de que se deben a la Institucion y no a un Gobierno que lamentable. Quiero manifestarle que el 2 de diciembre fallecio un heroe nacional, pero lamentablemente no le honraron como debe despedirse a un heroe y ahi que podemos decir?
Un atropello más a los procedimientos, a las leyes, a la moral. Las manos metidas en la justicia salen más que enlodadas.
Sr. Molina
Coincido con vuestra linea de comentario. Para desgracia, nuestro Pais tiene por historia una tendencia a dejarse deslumbrar por estos predestinados embusteros que ofrecen el revanchismo, que mobilizan a la chusma o masa ignorante de nuestras poblaciones y las encantan con tantos ofrecimientos que nunca llegaran.
Ejemplo claro es el que este lector que me antecede, se expresa con lo poco que lleva en su retorica y peor en su laberinto cerebral.
El dia que en nuestro pais logremos poseer una policia profesional, educada, reconocida, digna, ese dia nuestro convivir sera justo y en paz. El respeto que le merecemos a estos servidores publicos, es una parte de este mejoramiento. Todos somos parte integral de este circulo de la seguridad y la justicia.
Para terminar, le aseguro que la justicia llega, asi sea tarde, pero llega. Ya pasaran las nobelerias marxistas, las sabatinas insolentes y todos los que ahora callan, tendran que decirnos por que callaron.