Se viene el cambio

Frase muy atractiva, frase que creo todos aguardamos con esperanza y santa paciencia, porque en sus simples cuatro palabras, nos llevan a proyectar un mejor futuro, nos ilusiona con una mejora y nos mantiene atentos con el desarrollo, o al menos a una mejora de situación o calidad de vida.

Decirlo es muy sencillo, ponerlo en ejecución muy complicado, sin embargo este gobierno se llena la boca con estas palabras, pero en su real ejecutoria siguen actuando igual o peor de lo que dicen son las viejas malas práctica de la partidocracia corrupta y de la larga noche neoliberal.

Se viene el cambio debe ser un lema que se deba cumplir, debemos exigir cambiar para bien, cambiar para progresar, el cambio no debe ser la frasecita trillada que se convierte en cliché, sólo para lograr respaldo o un voto en una elección, se debe convertir en un estilo de vida, se debe convertir en el Hakuna Matata de Pumba y Timón del Rey León de Walt Disney.

El cambio es bueno, es saludable y es necesario, las estructuras administrativas anquilosadas que mantenemos ya no dan para más, seguimos con lo mismo de siempre pero con diferente nombre, siendo lo peor de todo y en realidad lo más preocupante, que ahora todo el poder se dirige a ser asumido por uno sólo, cual pulpo de ocho tentáculos pero una cabeza que los gobierna, o nos gobierna.

El cambio se viene, pero se debe iniciar en nuestros corazones, se debe iniciar con un mea culpa, en el cual debemos asumir nuestra responsabilidad de lo que está sucediendo por la inacción o quemeimportismo que muchos han preferido, pero con la firme convicción de que nunca será tarde para dar el primer paso, pero con la certeza también, que mientras más demoramos en reaccionar, más complicado se hará el camino a recorrer.

Hemos iniciado un año electoral muy particular, debemos estar conscientes que juntos, propios y extraños, podremos vencer cualquier obstáculo, no debemos caer en la provocación ni en la negatividad, la campaña que emprendamos siempre deberá ser positiva, propositiva y más que todo de UNIDAD, eso es lo que nos podrá garantizar una victoria para todos.

El candidato Único de Oposición y consenso es a donde debemos apuntar, es un objetivo bastante complicado de lograr pero es nuestra salida más clara, los gobiernistas lo saben, y ya movilizan sus maquinarias para boicotear dicho trabajo y que esa meta no se llegue a cristalizar.

Debemos ser prudentes y constantes es ese logro, debemos exigir a los candidatos que depongan sus posturas personalistas demostrando patriotismo y solidaridad para que entre las mejores figuras y opciones, salga nuestro único representante, y así mismo, nosotros comprometernos que aunque este sea rojo, azul, amarillo, costeño, serrano u oriental, trabajaremos juntos y unidos como una sola fuerza, con el único objetivo de llevar a nuestro querido Ecuador a desterrar sus dictaduras fantasmales y que esté listo porque SE VIENE EL CAMBIO positivo.