22 noviembre, 2024

Extranjería y el Caos

Durante el gobierno militar el Embajador José Ayala Lasso, Ministro de Relaciones Exteriores debido a que en la Dirección de Extranjería de la Cancillería se habían falsificado Cedulas de Identidad para entregarlas a los extranjeros dispuso la máxima sanción para los malos funcionarios y solicitó al Consejo Supremo de Gobierno, el traspaso al Ministerio de Gobierno de las funciones que tenía el Ministerio de Relaciones Exteriores.

En consecuencia a partir de ese momento existen en el país dos organismos que conceden visas: El Ministerio de Relaciones Exteriores las visas de no-emigrante, que se conceden a los extranjeros que ingresan al Ecuador sin ánimo de radicarse en el país y el Ministerio de Gobierno, hoy llamado pomposamente Ministerio del Interior que otorga las visas de residentes.

Considero que esta medida fue negativa para la política migratoria del Ecuador ya que el Ministerio de Gobierno a través de la Dirección General de Extranjería no ha tenido ni tiene en la actualidad el personal calificado para conceder visas y en consecuencia esta disposición trajo muchos problemas para los gobiernos posteriores que fueron comentadas por los medios de comunicación.

A esto se suma que en la actualidad la Dirección de Extranjería del Litoral es todo un caos ya que solicita se pida cita por internet para poder iniciar el trámite, lamentable demora varias semanas recibir la contestación de esa entidad, para posteriormente poder recién entregar los documentos de acuerdo con la Ley de Extranjería.

Asimismo, luego de algún tiempo que generalmente son dos o tres meses, la misma oficina de extranjería solicita nuevos requisitos que no se encuentran en la Ley, creando lo que se conoce con el nombre del “itinerario del papel” que solo consigue el aumento de la burocracia y empeorar los servicios.

Además, si se pide una cita con el Director nunca es concedida a pesar de ser un funcionario público y la excusa es que se encuentra en la ciudad de Quito cuando sus funciones son en la ciudad de Guayaquil, lo cual demuestra un gran centralismo. Al mismo tiempo, las personas que dan sus criterios jurídicos son los policías que atienden a los extranjeros ya que los empleados desconocen totalmente de la Ley de Extranjería.

Como fácilmente comprenderán estimados lectores todo extranjero que se interna legal en el Ecuador con el propósito de radicarse y desarrollar actividades como vivir de sus depósitos, invertir su capital en cualquier rama de la industria, agricultura , ganadería o del comercio, asumir indefinidamente funciones administrativas en empresas entre otras tendrán serios problemas, pero paradójicamente los extranjeros que no se rigen a la Ley si pueden ingresar en el Ecuador ya que el gobierno no exige a ningún extranjero visas de turismo. ¿Misterios, simples misterios de la revolución ciudadana?

Por los motivos expuestos, el país necesita de una política migratoria seria y es urgente cambiar esta situación por lo cual propongo que la visas de residentes sean concedidas por el Ministerio de Relaciones Exteriores y se termine con el caos que ocasiona la oficina de Extranjería que pertenece al Ministerio del Interior cuya labor no es dar visas sino seguridad a la población. Ojalá se proceda en ese sentido.

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  1. Plenamente de acuerdo, pero debo informarle al Dr. Estarellas que incluso en Quito es un laberinto la Dirección General de Extranjería. Dan la cita para un mes después luego d ellenar un formulario bastante largo, incluso para un simple traspaso de visa de pasaporte antiguo al nuevo. Extranjería debió haber ingresado los datos d elos extranjeros ya residentes aquí. Concuerdo que Extranjería debe pasar a la Cancillería, pero cuando Relaciones Exteriores sea rescatada de Patiño y sus amigos.

  2. Saludos. Desde que somos República, la labor de los representantes de las RR.EE (salvo muy pocas pero honrosas excepciones) solo han cubierto de verguenza e ignominia a este incipiente pero turbulento y tormentoso Estado denominado Ecuador.
    Todo lo que suceda en su interior, no me llama la atención, ya que lo único que saben es defender con un gran espíritu de cuerpo, sus privilegios, canonjías, y beneficios de una verdadera casta hereditaria de generación en generación, únicos y verdaderos responsables de toda la fragmentación territorial. Sin embargo, pero a todas estas barbaridades, se cubren se tapan, y se convierten una vez más, en las denominadas «momias cocteleras», que es para lo único que sirven.
    Ojalá el Presidente los desaparezca a todos, y llene dichas vacantes con otras gentes que no sean los mismos de siempre. Sin embargo, tengo mis dudas, que el remedio sea peor que la enfermedad.

    Napoleón Sotomayor

  3. Hay que insistir sin desmayo que el gobierno de Correa entienda que no puede seguir jugando con la honra del país y entregar el manejo de RR.EE. a profesionales idóneos y de experiencia. Así mismo, esta cartera debería ser manejada por ecuatorianos de nacimiento (como el caso de la presidencia de la república) y no por naturalización. Esta regla debería aplicarse también al ministerio de defensa

    I. Hurtado

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