“Ser solícito es recoger la basura de otras personas y ponerla en su lugar. Ser solícito es cubrir a tu amiga con tu abrigo en un día de frío. Cuando tiendes tu cama, cuando guardas tu ropa, cuando ayudas a plantar un árbol nuevo…”
Valores para la vida. Eso es lo nos falta, retomarlos, e incorporarlos a nuestro diario vivir.
Le pedí al señor que hace el mantenimiento de mi jardín que por favor riegue las plantas, que no tengo quien lo haga y ya no llueve. ¿Cómo?dijo él ¿Qué cosa? – Señorita- siguió- yo doy man-te-ni-mien-to del jardín, ¡no riego las plantas!
¿Podría hacerlo esta vez? Insistí. ¿De que le sirve mantener un jardín con las plantas secas? – Bueno ya veré- respondió el hombre.
Y como el caso del señor del mantenimiento del jardín podría contar algunos. Gente con mayor educación pero con la misma cultura. Aquella que nos puede hacer odiosos ante los ojos de los demás, por no poder demostrar un mínimo de solicitud. Dar una mano, ceder un poco, ayudar. En cualquier momento esas mismas personas necesitarán un favor de otros…seguramente lo pedirán y esperarán ser atendidos. Pero para recibir hay que dar.
Ser solícito es escuchar…y en lo posible, hacer lo que te piden, si no es algo incorrecto, por supuesto. Te pueden pedir aquello que no es lo que deseas. Que no te interesa o que no te compete. Pero si con ello haces un bien…entonces ¡Hazlo!
Desde los más altos cargos del gobierno, los más destacados representantes de la iglesia, los del magisterio, los gremios, los estudiantes, los ciudadanos (que somos todos) con un mínimo de solicitud, un por favor, gracias, lo lamento, me encantaría ayudarte (y hacerlo), haríamos un Ecuador mejor, un mundo más amable. La convivencia sería más grata.
Y como decían las abuelas, la educación comienza en casa. Si haces que el personal de servicio haga todo lo que tú puedes hacer y que los demás miembros de la familia puedes hacer también. Si eres un ser cómodo y que solo da órdenes.
Si ni tú ni los niños tienden su cama, si nadie se preocupa de alimentar al perro, si no saben arreglar su propio closet…aunque vayan al mejor colegio, a la universidad del extranjero y tengan tres maestrías, serán gente inútil. Les costará aprender a vivir en situaciones adversas.
Vale más detenernos a pensar un poco, ¿qué puedo hacer yo, aquello que no necesito que otros hagan por mí? La solicitud, un valor para la vida que te llenará de satisfacciones. El primer paso para andar sobre el camino del éxito.
Absolutamente de acuerdo. Lo compartiré.
Gracias.
esa es amiga