La propuesta gubernamental es la absorción de Petroproducción por parte de Petroamazonas, que es una compañía pequeña, con proyección al año 2015 de menos de 50 millones de barriles de petróleo en reservas e inviable en el futuro, con producción y reservas en curva descendente, sin acceso a nuevos bloques ni nacionalmente ni internacionalmente. Esta propuesta desmembraría a Petroecuador, que es una compañía verticalmente integrada, con 3 mil millones de barriles de petróleo en reservas, quitándole su principal razón de existir que es su Gerencia de Exploración y Producción, dejándola prácticamente con los huesos, como son las refinerías obsoletas que existen en el país. Lo racional, lógico, sin costo ya que se utilizarían los recursos existentes en ambas compañías, es la integración de Petroamazonas, con sus métodos que podrían ser adoptados y estandarizados, en Petroecuador.
Denuncias de intereses personales en la toma de decisiones empañan el proceso y deben ser investigados.
