Es muy buena la preocupación por la salud y la educación. Es más, es un imperativo mejorar la atención de la salud y la calidad de la enseñanza. Además, el acceso libre a la educación y la atención médica gratuita son y deben ser, una obligación del Estado.
El uso de este derecho por parte de todos los ciudadanos de un país, es un anhelo que debe ser convertido en realidad. Lo malo, es la utopía de pretender hacerlo sin contar con la infraestructura necesaria para lograrlo. Otro punto en contra, es el no definir las reglas con las que se hará realidad ese avance a una sociedad mejor, más equitativa y solidaria.
Es absurdo, por ejemplo, pretender que el Estado de becas a gente vaga, que no se preocupa por aprender y que pretende que se lo pase de año, o continuar indefinidamente en la Universidad para cumplir consignas políticas o peor, delincuenciales. La escuela y el colegio deben ser obligatorios, la Universidad debe tener la obligatoriedad de estudiar. El estudiante que no pasa de año, debe pagarse sus estudios, pues si no hace el esfuerzo por aprender, será un mal profesional y hará daño en vez de bien, a la sociedad.
En cuanto a salud, es imposible exigir gratuidad si no se cuenta con infraestructura adecuada y suficiente. Además, hay que contar con personal capacitado y responsable, que aparte de tener conocimientos sea humano y cortés, con afán de servicio, no de lucro. Eso no se logra importando Médicos mediocres sino capacitando a los nuestros.
La delincuencia se escapa de las manos por la apertura irracional de fronteras, que permitió la entrada al país de personas cuya experticia es la delincuencia, el narcotráfico y todo lo relacionado con ello. Creo que el Gobierno debe haberse dado cuenta ya del error que cometió. Desgraciadamente, el daño ya está hecho.
También es malo fomentar la ociosidad y la viveza criolla. Creo que todos conocemos a varias personas que cobran bonos y no deberían hacerlo, porque el marido es afiliado y tiene un sueldo regular, porque ellos trabajan, pero no se afilian para poder cobrar el bono, etc. Y varios de ellos usan el bono para satisfacer sus vicios y no contribuyen, trabajando, con la sociedad.
Por otro lado, es una pena que se pierda la oportunidad con un Gobierno consciente de las necesidades del pueblo, de hacer los cambios que se requieren para sacar al país adelante. La gran diferencia entre el socialismo y la Iglesia está en la prioridad. Para el socialismo es la sociedad, y está por encima de todo. Para la Doctrina Social de la Iglesia es el hombre, el que es digno porque es hijo de Dios y no hay diferencias entre uno y otro. León XIII en la Rerum Novarum (1891), ya advierte que estas políticas que empezaron a germinar en esa época, eran el camino errado.
El respeto al ser humano y el trabajo, son las bases para una sociedad que crece y se desarrolla con hermandad, solidaridad y amor. Sembrar odio entre hermanos es destruir al ser humano y al mundo en que vivimos.
Nadie comienza diciendo que las sociedades son distintas.EL SOCIALISMO ES INAPLICABLEen una sociedad sub desarrollada, donde prima la viveza criolla desde los niveles màs altos. La sapada, la envidia, el politiqueo etc.
Fracasò en otra clase de sociedades, con otra cultura y disciplina. Aquì es una farza, y el poder lo sabe, pero la delicia del mismo es invencible
Cuando ud. dice «gratuidad»,me parece que el enfoque esta fuera de lugar. Lo digo por que seguir repitiendo la mentira socialista de la supuesta gratuidad de ciertos servicios (mal o bien no importa, para el caso)que el estado presta,es equivocado. La realidad es que no existe cosas gratuitas ,sobre todo cuando es el estado quien las reparte o las facilita. Tengo acaso que explicar que los gastos del estado los pagamos quienes pagamos impuestos.