Universidades politizadas, desempleo asfixiante, muertos, heridos, cientos de secuestrados. El costo de la vida muy duro, la justicia es oscilante y perversa; y, como si fuera poco, la pus y la mayor corrupción que se haya visto es lo que campea.
En “Los derechos del hombre y la paz” (Bobbio, 1994) la paz se construye garantizando los derechos humanos, la opresión es la negación de todo derecho.
Para Bobbio el único avance democrático real en el siglo XX fue el reconocimiento de la Declaración Universal de los Derechos Humanos en 1948.
En sus esencias y con su contenido, la democracia representativa combina muy bien la soberanía que descansa en el pueblo y el Estado de Derecho. Elementos que son los pilares fundamentales para el desarrollo y el progreso social de los pueblos.
Los gobiernos, históricamente han sido indiferentes al problema por ser estos los mayores empleadores y los peores pagadores de trabajadores, por lo tanto no le interesa el problema son ellos los mayores explotadores, el trabajador vive con total inseguridad jurídica de su cargo.
Un día cualquiera muere sin protección, al igual que otros jubilados que pagaron sus correspondientes haberes, consecuentemente sus familiares, esposa e hijos, quedan en desamparo.
El desgraciado “patrón” cree que con una votación que consiguió con engaños y jamás llegó a ser superior a la mitad de ciudadanos habilitados, puede tener a sus esclavos y borregos aterrorizados.
Ya le sacó el jugo al pobre ecuatoriano y regresa a su casa convertido en bagazo, llevándose su dolor echándole la culpa a quien irresponsablemente le fue endosada por la incapacidad del gobernante.
La soberanía de la nación reside en el pueblo.
El pueblo delega de buena fe, no les da “Patente de Corsario”, a quienes supuestamente elige de modo directo: en libre, secreto y legítimo Sufragio Universal.
A grandes males, grandes remedios.
Las condiciones para una elección voluntaria y libre actualmente no existen. El mandamás tiene TODOS los recursos a su disposición. Y no le importa si alguien obtiene más votos, responsabilizará a los corrupto “medios de información” que ellos tienen monopolizados y subvencionados y dirá que los demás estuvieron “en franco contubernio con los banqueros” y los Norteamericanos; que en realidad no lo determinan.
La única salida para el pueblo es la renuncia inmediata de quienes conforman el Ejecutivo y Legislativo y nombrar un Presidente interino: Un hombre con la verticalidad moral e integridad de caballero como lo fue don Clemente Yerovi Indaburu. Quien fue Presidente Interino desde el 30 de marzo al 16 de noviembre de 1966.
Este presidente provisional, don Clemente Yerovi Indaburu, apolítico; por acuerdo de los ciudadanos fue designado.
Yerovi se propuso tres metas: convocar a elecciones para que una Asamblea designe a su sucesor; reflotar la economía nacional; e irse del poder lo más pronto posible. Cumplió su propósito al pie de la letra.
Aplicó medidas de choque por el peligroso desequilibrio fiscal; reajustó el presupuesto del Estado y adoptó medidas correctivas; con éstas, Clemente Yerovi logró recuperar la economía y afirmar la estabilidad monetaria.
El pueblo tomó con madurez la amarga medicina, porque la imagen del presidente daba confianza y eran más benignas de las del Emperador.
Una vez culminado su proceso, Clemente Yerovi envió su renuncia irrevocable y después de menos de 8 meses de ejercer la Presidencia de la República, manejando su automóvil particular, regresó ese mismo día al Guayaquil de sus amores. “Goberné con las maletas hechas” y no tomarle cariño al Poder confesó, estos favores me fueron otorgados”.
Yerovi no pronunciaba fogosos discursos, “Eso se lo dejo para Velasco Ibarra y Arroyo del Río”, decía.
Él no mostró preferencias por partido o político alguno; si éstos querían dinero para alguna obra, él recalcaba que estaba para cuidar el erario nacional y que no ofrecía lo que no podía cumplir.
Yerovi nunca respondió a los ataques (que si se dieron) y jamás insultó. Él tenía que trabajar y así lo hacía.
Cuando los políticos y buena parte del Ecuador le pidieron que prosiga en su gestión, respondió: “Mi palabra está por sobre todo; a mí me ofrecieron estar por meses y hay que dar ejemplo al país; hay que enseñarle a los políticos que se debe cumplir con la palabra”.
El Mundo entero parece estar al borde del caos mas tengo confianza en que las futuras generaciones van a encontrar soluciones mucho menos politicas y mucho mas humanistas. Recuerde que Los seres humanos y todas las demas especies somos producto del caos de la creacion. No hay que temer al cambio. En el futuro todos estos politicos que se llenaron de promesas y slogans publicitarios quedaran embodegados con el polvo del pasado. Las estructuras politicas y economicas seran globales ,sera el gobierno corporativo el que regule los modelos y las soluciones.
Sr.
Lo que ud, comenta, no creo que se vuelva a dar en estos dias, hay demasiada ambicion de poder y dinero, las revoluciones solo han servido para llenar los bolsillos, a pretexto de derecha e izquierda, bailan con el mismo diablo, solo extirpando a ese cornudo, a bala y sangre, y a estos monarcas, q todo lo saben, TODOLOGOS, que se los ajusticie, como la ley manda, y q la venda de la justicia no se resbale de un lado, hay q ajustarla con un torniquete si es preciso