Saber sobre qué base construimos nuestra vida, es uno
de los puntos clave del éxito duradero. El esnobismo y la
novelería nos asientan sobre arena, que no garantiza estar
sujetos en épocas de lluvias o fuerte oleaje. Para sentir
que nos asentamos en bases firmes, debemos empezar por
revisar nuestras convicciones, nuestros valores, nuestros
proyectos, nuestros afectos, en fin, nuestra vida.
Pero el mundo nos atrapa en su ilusión constante, y no nos
queda tiempo para aquello. Llegamos a casa exhaustos,
luego de haber trabajado duro, farreado demasiado o tal
vez, luego de haber perdido el tiempo sin misericordia. Y
así se pasan los años, y así, se pasa la vida.
Es importante que hagamos un alto, ahora por ejemplo,
es una buena época. Próximos a terminar un año más,
iniciando el mes de la Navidad, del nacimiento. ¿Ya nos
dejamos embarcar en la nave del consumismo? ¿Tenemos
los regalos listos para todo el mundo? Te has preguntado
acaso, ¿qué sentido tiene?
Ir y venir, compromisos. Ahora aquí, mañana allá. Luego,
el cansancio. ¡Para! No hay nada mejor que el relax
verdadero. Tendemos a olvidar la idea de que la vida pasa.
También nos apropiamos de la creencia de que la vida
pasa, solo para los demás. ¡No es así! La vida pasa para
todos. Por eso hay que aprender a vivirla, sacarle provecho
y disfrutarla de verdad. Envueltos en la nube de la fantasía
solo nos volvemos ciegos. ¡Asiéntate sobre roca! Haz
una lista de lo que es importante para ti. De los deberes
que debes cumplir y de los sueños que anhelas realizar.
Proponte hacerlo todo, despacio, pero sin calma excesiva.
Despacio no es parsimonia.
¡Revive! Hay que nacer de nuevo, para eso es esta época.
Para pensar en que podemos ser nuevos y diferentes; vivir
no es estar muertos. Revisa eso. Si notas que te faltan
sueños, que no hay anhelos en ti, que no vislumbras, al
menos, un atisbo de la luz radiante del sol, aún en los
días oscuros, toma el propósito del cambio. Camina en la
arena, puede resultar grato y saludable. Más al momento
de poner las bases, ¡asiéntate sobre roca!
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