Congruencia

La congruencia es elemental en la vida del hombre decente. Si no hay congruencia entre lo que pregono y lo que hago, no merezco ser considerado un ser humano, puesto que presento dos caras, una para los míos y otra para los de afuera.

Algunas personas han aprovechado este desagradable ejemplo de Pedro Delgado para acusar al Gobierno de actuar en forma incongruente, al haberle dado un puesto sin cumplir los requisitos necesarios para desempeñarlo.

Lo grave del caso es el parentesco con el Presidente y que no es solamente la gravedad de la falsificación de un título, lo agrava la mala actuación en el desempeño irresponsable de sus funciones, al menos, aparentemente, de acuerdo a los comentarios, que a Dios gracias, han sido vertidos por la prensa, ya que, si no hubiera prensa, los comentarios que hubieran serían muchísimo más graves, porque el chisme y las habladurías son peores que la prensa.

Creo que Pedro Delgado no ha llegado a realizar el tremendo daño que le ha hecho al Gobierno. El Gobierno ahora tendrá que actuar con él en la forma más enérgica, traerlo de donde esté, por cualquier medio, y hacerlo pagar en la peor de las formas por el gravísimo hecho de la falsificación de Título y engaño, además de ejercer una autoridad, sin tener los méritos para ello, lo que por sí solo, conlleva una pena que de acuerdo con la noticia, amerita 6 a 9 años de prisión, además, si se llega a probar el dolo, tendrá que pagar lo que el estafador Duzac y otros han robado al Gobierno. Yo estoy seguro de que un Presidente serio y honesto como el que tenemos, no podrá permitir que por el hecho de ser su primo y haber sido una persona de su más selecta confianza, pueda hacerle este daño al país sin pagar hasta el último centavo y hasta el último día de cárcel. No es solamente el daño por el manejo irresponsable, el haber engañado al Gobierno, a su primo y al país, dándose un título que no tiene, lo cual, por sí solo, como ya dije antes, es penado por la ley.

Toda persona que ocupa un cargo en el que la responsabilidad de su función conlleva el nombrar a otras personas para que actúen en diversas funciones públicas, en que deben manejar dineros del país, tiene que buscar colaboradores a toda prueba, gente honesta y seria, respetuosa de la ley y asegurarse de que los títulos que presentan sean refrendados y seguros. A cualquiera le puede pasar que lo engañen, pero si el engañador es mi pariente, no puedo permitir, bajo ninguna circunstancia, que no pague como debe y en las condiciones más estrictas, su pena.