Siempre me han gustado los libros de formación y considero que el ser humano que no busca mejorar cada día, es un individuo que bien podría ser un vegetal, porque no está interesado en ser algo más en la vida.
Tuve la suerte de que Armando Baquerizo me informara que había llegado a su librería “Vida Nueva”, el libro “Sobre el cielo y la tierra”, un libro escrito en forma de diálogo entre nuestro actual Papa Francisco, cuando era Cardenal de Buenos Aires y Abraham Skorka, un Rabino judío argentino, de extraordinaria capacidad intelectual también. Me interesó al momento este libro, pues considero que el respeto a las creencias del otro es la base de un diálogo enriquecedor y maravilloso.
Ya en las primeras páginas, me impactó la descripción de lo que es un diálogo, en las palabras de nuestro Papa Francisco. Me voy a permitir poner entre comillas y en negrilla lo que Jorge Mario Bergoglio, Sacerdote Jesuita brillante, pone sobre el diálogo.
Comienza explicando que el frontispicio de la Catedral de Buenos Aires representa el encuentro en Egipto de José con sus hermanos, escena de llantos y abrazos y una pregunta entrañable: “¿Aún vive mi padre?”, y pasa a explicar las dificultades para el diálogo entre los argentinos, que sin ninguna dificultad, podríamos trasladar a Ecuador y al mundo entero.
Al hablar de la dificultad de diálogo entre los argentinos (el mundo entero), insiste: “Varias veces aludí a la «cultura del encuentro», más bien parece que nos seducen la dispersión y los abismos que la historia ha creado. Por momentos, llegamos a identificarnos más con los constructores de murallas que con los de puentes. Faltan el abrazo, el llanto y la pregunta por el padre, por el patrimonio, por las raíces de la Patria. Hay carencia de diálogo.”
Dice Jorge Mario Bergoglio que “sucumbimos víctimas de actitudes que no nos permiten dialogar: la prepotencia, el no saber escuchar, la crispación del lenguaje comunicativo, la descalificación previa y tantas otras.”
Continúa con la mejor definición que he encontrado en mi vida sobre lo que debe ser un diálogo:
“El diálogo nace de una actitud de respeto hacia otra persona, de un convencimiento de que el otro tiene algo bueno que decir; supone hacer lugar en nuestro corazón a su punto de vista, a su opinión y a su propuesta. Dialogar entraña una acogida cordial y no una condena previa. Para dialogar hay que saber bajar las defensas, abrir las puertas de casa y ofrecer calidez humana.”
“Son muchas las barreras que en lo cotidiano impiden el diálogo: la desinformación, el chisme, el prejuicio, la difamación, la calumnia. Todas estas realidades conforman cierto amarillismo cultural que ahoga toda apertura hacia los demás. Y así se traban el diálogo y el encuentro.”
Extraordinaria lección que nos da el líder máximo de nuestra Iglesia.
¡Es hora de cambiar! ¡Todos debemos hacerlo!
Me parece que es muy puntual en sus apreciaciones y por tanto, es recomendanble apreciar la lectura de este editorial y su anexo. Saludos.-
Parece que hemos aprendido malas costumbres y nos olvidamos de dialogar como seres civilizados; ahora existe y domina la confrontación. Es una pena
Te felicito por este articulo y lo que anotas de las ideas de Francisco I de quien tengo mucha esperanza de cambios importantes. Coincido contigo que uno de nuestros grandes defectos es precisamente no saber dialogar.
Aprovecho para felicitarte tambien por la publicacion de los poemas. Soy un fanatico de la poesia y he copiado algunos poemas que has publicado que no tenia en mis colecciones. Como he estado algunos meses fuera por razones de salud de mi esposa no he seguido constantemente el diario asi que no se si has publicado algo de José Santos Chocano, te recomiendo «Nostalgia» y «Los Caballos de los Conquisradores»
La comunicación es lo mas importante en las relaciones humanas, con ella podemos aprender, rectificar, respetar y amar a nuestros semejantes.
Debemos cultivar esta virtud del diálogo sincero y abierto.
Excelente artículo, sobre la cultura del diálogo, que cada vez más de va perdiendo. Tengo la suerte de tener el mencionado libro en mi poder, lo adquirí en Bs. As. hace 2 meses, confieso que aun no lo he leido, pero este fin de semana lo inicio, admiro mucho a Bergoglio, como ser humano y también como hombre de la iglesia. Y también admiro al rabino Skorka, que es un verdadero filósofo argentino representante del Judaismo. Saludos Fernando. Felicitaciones y totalmente de acuerdo con la CULTURA DEL DIÀLOGO.
IVV
Me muero de curiosidaad de saber EL DIALOGO que tuvo RAFAEL CORRE con JORGE MARIO BERGOLI! De seguro el Papa no sabe que Corream, aparte de ser UN GRAN PRESIDENTE sige con las mismas inseguridades y cantaletas de siempre como que si lo unico que le preocupara fuera mantener su credibilidad ensalsandose a si mismo, como si creyese que SU VERDAD ES LA VERDAD y denigrando a sus contrincantes, CUAL SI FUERAN GUSANOS!!! No hay duda, nuestro presidente carece de HUMILDAD! Dios quiera EL SANTO PADRE rece mucho por EL Y POR SU PAIS…que esta en manos de el!