Me llegó una propuesta de un querido amigo por Facebook, en la cual ponía a nuestra consideración recuperar una “tradición salesiana”, que consistía en escribir una carta cariñosa y con nuestras necesidades a la Virgen, y posteriormente “quemarla” el 31 de mayo.
Me pareció muy válida y justa la recuperación de esta tradición, porque personalmente tengo mucho que contarle y más que todo agradecerle a la creadora de nuestro creador y a través de esta pequeña entrega, trataré de resumir todas las bendiciones y más que todo, las peticiones que debo hacerle y de seguro, como siempre lo ha hecho, interceder por este humilde pecador, ante Dios nuestro Señor.
Quiero agradecerle por la familia que me ha dado, por mis padres que siempre se esforzaron y dieron más de lo normal por darnos una vida sin lujos, pero muy rica en valores y enseñanzas que me han permitido ser una persona libre y de buenas costumbres, por mis hermanos, quienes siguen siendo mis modelos a seguir y también, por qué no, modelos a superar en ciertos aspectos de bien colectivo, a mi esposa por su santa paciencia y abnegado trabajo, para que nuestros hijos se mantengan por el buen camino y practiquen lo que un buen cristiano debe al menos cumplir.
Quiero agradecerle también por mis dos hijos, la menor de ellos, quien acaba, con la bendición de Dios, salir sin ningún problema de una operación de emergencia que se le tuvo que realizar, y por mi hijo mayor, que cuando se publique esta carta, posiblemente ya cuente con la edad necesaria para que en este país, pueda ejercer su derecho al sufragio y del cual estoy totalmente convencido que lo haría con la mayor responsabilidad del caso, no por eso quiero decir que esté a favor de esa medida, ya que siempre la consideré demagógica, innecesaria y hasta cierto punto peligrosa, porque a esa edad la juventud actual, aunque se viva en un entorno muy dado a la política como es el nuestro, lo que menos les interesa, es definitivamente eso.
Quiero pedirle a la Virgen, que nos siga bendiciendo y protegiendo como país y más que todo que ilumine a nuestros gobernantes, así mismo que este nuevo período que acaba de iniciar, de un giro en torno al progreso y que todo el poder acumulado sea siempre en favor de los más necesitados.
Que como ciudad nos siga permitiendo seguir adelante, que continuemos manteniéndonos con representantes cuyo objetivo principal son el progreso y el mejoramiento de la calidad de vida de sus conciudadanos, que nos siga dando fortaleza para soportar los injustos embates de los envidiosos de siempre, y que con su manto de bondad, nos siga cubriendo de todas las protervas intenciones de convertir a Guayaquil en el muladar que fuera en administraciones anteriores al año 92 del siglo pasado.
Es una carta de agradecimiento, así como de aspiraciones, me disculpo por hacerla con un fuerte componente político, pero debo decirlo, ha sido mi entorno, por ya más de dos décadas y aunque no lo quiera, siempre ese léxico estará en mis palabras y acciones, pero más allá de eso, creo que son justas aspiraciones, que de cierto modo muchísimos compartimos, es por esto, que las plasmo es este escrito que será inmolado este 31 de mayo, como un inicio de recuperación de la tradición de “MI CARTA A LA VIRGEN MARÍA”.
Tu articulo es lindisimo, que Jesus y
la Virgencita te bendigan!!
Dime que eres para Victor?
Yo vivo en Miami, saludalo!!
No sabia que existía esa tradición, me ha parecido muy buena idea, estaré haciendo lo mismo antes de terminar el día.
Saludos
A mas de instruirme en esta «tradicion salesiana» Muchas Gracias por recuperarla y ojalá sea un recordatorio para que todos los salesianos la apliquen y en general todos los ecuatorianos. Bajo el amparo de la Virgen María, al final de cuentas tendríamos otro Ecuador.
Aunque con 24 horas de atrazo he leido
esta tradicion salesiana que desconocia
apesar de ser Ex-Alumna Salesiana del
Colegio Maria Auxiliadora de Guayaquil.
Los Salesianos somos Salesianos de por
vida, y aunque hace 60 anos que vivo en
Miami ni corazon late aceleradament por
Maria Auxiliadora y San Juan Bosco, y por donde he ido siempre he buscado una
Iglesia donde esten expuesto.
Hace unos 8 anos tuve la dicha de visitar Turin, fui a la casa donde
vivio San Juan Bosco y Mama Margarita,
y asisti a Misa en la Basilica de Maria
Auxiliadora, desde que comence kindergarten en el Colegio Maria Axuliadora siempre desie conocer Turin y
gracias a Dios lo logre.
Y recuerdo la oracion a Maria Auxiliadora «Madre mia de mi vida auxilio de los cristianos amparadme y
llevarme a la Patria Celestial»
Creo que quedamos pocas ex-alumnas de mi epoca, ya tengo 85 anos, recuerdeme
en sus oraciones.
Con un abrazo Salesiano me despido hoy
Nelly
.
G
Francisco: muy bonita la carta a la Vírgen María, en concreto y en muy palabras: Salesianos por siempre, por siempre salesianos.