Para mí, lo maravilloso de la poesía romántica, está en el expresar la ternura de una situación, o de un amor que une a dos personas.
Uno de los poetas que destaca, sobre todo por su forma de hacer comparaciones con las situaciones comunes de la vida es José Ángel Buesa, poeta del cual he hablado ya mucho y he publicado varias de sus más hermosas poesías.
Tiene una sutileza para expresar, una sencillez de lenguaje que admira y una forma de llegar al fondo del alma, que aún en sus poesías de tono erótico, o al referirse a situaciones de reclamo o de reproche, es tan dulce como lo vemos en esta poesía, “La puerta”, que presento a continuación:
LA PUERTA
José Ángel BuesaI
Recuerdo bien que te cerré la puerta,
sé que llamaste, y sé que no te abrí,
y ahora miro la puerta y está abierta
y te siento, de pronto, junto a mí.Entraste y no sé como todavía,
pero sé que este amor tiene que ser
como la claridad del medio día
en la penumbra del anochecer.Y es tan inesperado este cariño
que lo rechazo y lo retengo al par,
como una madre que reprende a un niño,
pero que llora viéndolo llorar.II
Has entrado en mi amor tan silenciosa,
Que no sentí ni el roce de tu pie;
y eres… como el milagro de la rosa
que se hace rosa, sin saber por qué.Y me penetra tu emoción sencilla
más allá de mi bien y de mi mal,
como la gota de agua por la arcilla,
como la luz de sol por un cristal.Y cada vez más hondo en lo más puro,
tu amor se hace el camino hacia mi amor,
como la hiedra que se ciñe al muro,
pero que lo reviste de verdor.III
Yo te cerré la puerta, y tú la abriste
y te acercaste a mí, con timidez,
con tu sonrisa de muchacha triste
que va a una fiesta por primera vez.Y ahora sé que el amor entró contigo,
mujer que, hecha de amor y para amar,
tienes la doble cualidad del trigo,
pan en la mesa y carne en el altar.Y ahora me da temor la puerta abierta
aunque por ella, entró el amanecer.
… Pero esta vez, voy a cerrar la puerta,
¡para que no te puedas ir, mujer!