21 noviembre, 2024

Fernando Pessoa

A petición de un lector, traigo a colación un poeta portugués de inicios del siglo XX, Fernando Pessoa.

Fernando nació en Lisboa en 1888. Es la figura más representativa de la poesía portuguesa del siglo XX. Sus primeros años transcurrieron en Ciudad del Cabo, donde su padrastro estaba en el Consulado de Portugal en Sudáfrica. A los 17 años, viajó a Lisboa, donde, abandonó los estudios de letras y luego alternó el trabajo de oficinista con su interés por la actividad literaria.

Tradujo a autores como Nietzche, Milton y Shakespeare, quienes influyeron en su producción. Sus primeros poemas fueron escritos en inglés. Mucho de su producción literaria está firmada por varios heterónimos creados durante su vida , siendo los más importantes Álvaro de Campos, Ricardo Reis y Alberto Caeiro. Falleció en Lisboa en 1935

Veamos algunos de sus poemas:

Si, después que yo muera, se quisiera escribir mi biografía…
Fernando Pessoa

Si, después que yo muera, se quisiera escribir mi biografía,
Nada sería más simple.
Exactamente poseo dos fechas -la de mi nacimiento y la de muerte.
Entre una y otra todos los días me pertenecen.
Soy fácil de describir.
He vivido como un loco.
He amado las cosas sin ningún sentimentalismo.
Nunca tuve un deseo que no pudiera colmar, pues nunca anduve ciego.
Incluso escuchar para mí fue nada más que un complemento del ver.
Comprendí que las cosas son reales y totalmente diferentes una de otra:
Lo comprendí con los ojos, jamás con el pensamiento.
Comprenderlo con el pensamiento hubiera sido encontrarlas todas iguales.

Un día me sentí dormido como un niño.
Cerré los ojos y dormí.
Y, a propósito, yo era el único poeta de la Naturaleza.

(Versión de Rafael Díaz Borbón)

Si alguien toca un día a tu puerta…
Fernando Pessoa

Si alguien toca un día a tu puerta,
Diciendo que es un emisario mío
No creas, ni aunque sea yo;
Que mi vanidoso orgullo no intentaría
Tocar siquiera la puerta irreal del cielo.

Pero si, naturalmente, y sin oír
A alguien tocar, la puerta fueras a abrir
Y encontraras alguien como a la espera
De tocar, medita un poco.
Ese era mi emisario, y yo, y lo que intenta
Mi orgullo que desespera.
¡Abre a quién no llama a tu puerta!

(Versión de Rafael Díaz Borbón)

Autopsicografía
Fernando Pessoa

El poeta es un fingidor.
Finge tan completamente
Que hasta finge que es dolor
El dolor que de veras siente.

Y quienes leen lo que escribe,
Sienten, en el dolor leído,
No los dos que el poeta vive
Sino aquél que no han tenido.

Y así va por su camino,
Distrayendo a la razón,
Ese tren sin real destino
Que se llama corazón.
(Versión de Santiago Kovadloff)

Todas las cartas de amor son ridículas…*
Fernando Pessoa

Todas las cartas de amor son ridículas.
No serían cartas de amor si no fuesen ridículas.

También escribí en mi tiempo cartas de amor,
como las demás, ridículas.

Las cartas de amor, si hay amor,
tienen que ser ridículas.

Pero, al fin y al cabo,
sólo las criaturas que nunca escribieron cartas de amor
sí que son ridículas.

Quién me diera el tiempo en que escribía
sin darme cuenta
cartas de amor ridículas.

La verdad es que hoy mis recuerdos
de esas cartas de amor
sí que son ridículos.

(Todas las palabras esdrújulas,
como los sentimientos esdrújulos,
son naturalmente ridículas).
**Heterónimo A. Campos
(Versión de Miguel Ángel Flores)

Amor es lo esencial…
Fernando Pessoa

Amor es lo esencial.
Sexo, mero accidente.
Puede ser igual
O diferente.
El hombre no es un animal:
Es carne inteligente,
Aunque algunas veces enferma.
(5.4.35)

(Versión de Rafael Díaz Borbón)

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El poema de la despedida, de José Ángel Buesa, fue convertido en pasillo y ha sido cantado por varios de nuestros artistas. Vale la pena recordarlo:

POEMA DE LA DESPEDIDA

José Ángel Buesa

¡Te digo adiós! y acaso te quiero todavía,
quizás no he de olvidarte, pero te digo adiós.
No se si me quisiste, no se si te quería,
o talvez nos quisimos demasiado los dos.

Los motivos del Lobo

Félix Rubén García Sarmiento nació en 1867 en Metapa, hoy Darío en honor a él, Metagalpa, Nicaragua. Es el principal representante del modernismo literario español. Conocido como el Príncipe de las letras castellanas.

Aunque su padre era de apellido García, su familia paterna era conocida por generaciones como de apellido Darío. Vivió su primera infancia en León con sus tíos abuelos materos de apellido Sarmiento a quienes consideró sus verdaderos padres, tanto que en la Escuela se llegó a firmar como Félix Rubén Sarmiento. Fue alumno de los Jesuitas. Tuvo muy poco contacto con su padre, a quien llamaba Tío Manuel y con su madre, quien después de su separación definitiva con su padre se fue a vivir con su nueva pareja en Honduras.

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  1. Gracias. Hay un poema que no encuentro, hace referencia a una gaviota, desgraciadamente no se el nombre del poema y no se en cual de sus heterónimos
    fue publicado. De todas maneras GRACIAS.

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