24 noviembre, 2024

Ahora es el Yasuní

Que importaría realmente si dejáramos o no de lado las intenciones de explotar, parte o la totalidad, del Yasuní..?

Cada sector inmerso en la polémica se atribuye, para sí, la razón inquebrantable de querer lo mejor para el país. Se discute técnicamente de las ventajas y las desventajas de extracción petrolífera de dicho vasto sector amazónico, considerado mundialmente como un verdadero santuario, en el cual se desarrollan culturas ancestrales, denominadas ahora: “Pueblos No contactados”.

En 1989 el Parque Nacional Yasuní entra a formar parte de la Reserva Mundial de Biosfera, dentro del programa del Hombre y de la Biosfera de la UNESCO. En marzo de 1995 se acordó que en toda reserva de la Biosfera las únicas actividades que se pueden desarrollar, para garantizar el equilibrio y la no contaminación, son: “actividades cooperativas compatibles con prácticas ecológicas racionales, como la educación relativa al medio ambiente, la recreación, el turismo ecológico y la investigación aplicada básica”.

Se considera que nuestra cuenca amazónica está conformada por alrededor de 7 millones de kilómetros cuadrados, siendo pues particularmente que el Yasuní, es una extensión aproximada de cerca de 10.000 kilómetros cuadrados es uno de los lugares más diversos de aves en el mundo, en el cual se ha llegado a registrar 567 especies. Por tanto, esta área sirve de protección para cerca del 42% de mamíferos de la zona.

El principal objetivo de determinarlo como Parque Nacional fue simplemente por preservar especies animales y vegetales en extinción. De lo cual obviamente se desprende que cualesquier alteración o diminución que sufra esta importantísima cadena evolutiva, conducirá definitivamente a la temida extinción y menoscabo de la diversidad genética y con ello la degradación de la biodiversidad.

El problema se agudiza notablemente cuando agregamos a tan hermosa geografía la existencia de 3 ejes centrales llamados ITT, que son 3 campos petroleros denominados Ishipingo-Tambococha y Tiputini.

Hasta aquí, y con este breve resumen, espero dejar claramente mi enorme preocupación por cuanto llegue a suceder, ecológicamente hablando, si se desgarran irresponsablemente de las entrañas del Yasuní los recursos que el gobierno dice necesitar para el desarrollo socio económico de nuestra patria. Cuyos representantes, con el presidente a la cabeza, están explicando al país la relación porcentual mínima de explotación petrolera, versus la obtención de recursos para un mejor desarrollo nacional, con una afectación mínima, considerada en apenas en 1%.

Por otra parte, se dice que al explotar dichas áreas, se estaría vulnerando los derechos de seres humanos (Pueblos no contactados), y que ellos tienen todo el derecho de vivir en paz y que no se interrumpa un modo de vida ancestral que por derecho les corresponde, etc. De lo cual yo también estoy de acuerdo en una parte de este concepto.

Por otra parte; y es aquí donde aún no me cabe en mi memoria tal hecho, se viene desarrollando una serie de controversias y actos en los cuales se habla de DERECHOS Y DE JUSTICIA. Y lo más extraño de todo esto es que dichos argumentos son esgrimidos por personas que, entre otros, hace muy poco protagonizaron la tramposa redacción de la constitución de Montecristi, abortista por esencia.

Entonces yo pregunto: Esa justicia y esos derechos que invocan estas personas, so pretexto de utilizar el Yasuni como bandera de lucha, no son de misma equivalencia de aquellos derechos que le asisten a nuestros niños por nacer..? O como anteriormente lo he dicho: No serán tal vez de igual equivalencia de los derechos de los escualos en nuestros océanos..?

Que está pasando entonces…? O es que se están utilizando argumentos de oposición por el simple hecho de oponerse y/o mantener vigencia política. No importa el costo.

La vida de un niño en el vientre pasajero de la madre se constituye, desde su concepción, en el más grande y hermoso evento de vida, nada comparable por cierto con especies de plantas y/o mamíferos de nuestra bella amazonia, por más importante que también estos lo sean. Esta vida humana, es solo comparable con la vida de nuestros hermanos ancestrales, también seres humanos, tal cual el caso que nos ocupa. Entonces, porque la selectividad de estas personas en invocar estos derechos acorde sus propios intereses. En verdad quisiera que estas, y otras preguntas, me las pueda responder Dña. María Paula Romo, por ejemplo.

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  1. CON TODO RESPETO, CREO QUE LOS POLITICOS Y LOS AMBIENTALISTAS HAN CREADO UNA CONFUSION EN CUANTO CUALES SON LAS ACTIVIDADES CON MENOR IMPACTO ECOLOGICO. MI CONCLUSION Y RESPETANDO LA DE LAS OTRAS PERSONAS. ES DE QUE TODAS TRAEN IMPACTOS DIFICIL DE PREDECIR. LA REALIDAD ES UNA SOLA, ESTE GOBIERNO ESTATIZADOR NECESITA DEL DINERO QUE OBTENDRIA DE ESTOS RECURSOS NATURALES PARA PODER SEGUIR VIVIENDO COMO RICOS EN UN PAIS DE POBRES. EL PROBLEMA ES LA VISION DE DESARROLLO QUE TIENEN ESTOS REVOLUCIONARIOS DONDE EXCLUSIVAMENTE EL ESTADO SE CONVIERTE EN GENERADOR ECONOMICO ANULANDO O RELEGANDO AL SECTOR PRIVADO A UN SEGUNDO LUGAR, CUANDO TENDRIA QUE SER AL INVERSO.

  2. «PODER SEGUIR VIVIENDO COMO RICOS EN UN PAIS DE POBRES» Sr. giovanni? o será que los ricos quieren seguir viviendo ricos a costa de los pobres y que no quieren que el pais salga de tremenda falta de recursos econónicos para que éstas personas «pobres» puedan tener escuelas para que estudien y tengan conocimientos para que tengan su propio criterio y tomen desiciones responsables sin tener que hacer caso a quienes los lideran y que les llenan el cerebro de un montón de barbaridades… que ironia, sentirnos pobres en un pais inmensamente rico en «yacimientos de petróleo y que la economía petrolera es el pilar sobre el que se sostiene la economía del Estado ecuatoriano desde la década de 1970»

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