Hablar de Buesa es hablar de amor, es hablar de ensueño, es usar el idioma para expresar lo que se siente. Por eso él nos dice:
Con la simple palabra
José Ángel Buesa
Con la simple palabra de hablar todos los días,
que es tan noble que nunca llagará a ser vulgar,
voy diciendo estas cosas, que casi no son mías,
así como las aguas, casi no son del mar.Con la simple palabra con que se cuenta un cuento,
que es la vejez eterna de la eterna niñez,
la ilusión, como un árbol que se deshoja al viento,
muere con la esperanza de nacer otra vez.Con la simple palabra, te ofrezco lo que ofreces,
amor que apenas llegas, cuando te has ido ya;
quien perfuma una rosa se equivoca dos veces,
pues la rosa se seca y el perfume se va.Con la simple palabra que arde en su propio fuego,
siento que en mí es orgullo, lo que en otro es desdén;
las estrellas no existen en las noches del ciego,
pero aunque él no lo sepa, lo iluminan también.Y así como un arroyo que se convierte en río
y que en cada cascada se purifica más,
voy cantando este canto, tan ajeno y tan mío,
¡Con la simple palabra, que no muere jamás!
Y cuando el amor nos deja solos, se puede expresar el sentimiento, diciendo:
Así verte de lejos
José Ángel Buesa
Así verte de lejos, definitivamente,
tu vas con otro hombre, yo, con otra mujer
y sé que como el agua que brota de una fuente,
aquellos bellos días, ya no pueden volver.Así, verte de lejos y pasar sonriente
como quien ya no siente lo que sentía ayer
y lograr que mi rostro se quede indiferente
y que el gesto de hastío, parezca de placer.Así, verte de lejos y no decirte nada,
ni con una sonrisa, ni con una mirada
y que nunca sospeches cuanto te quiero así,
porque aunque nadie sabe lo que a nadie le digo,
la noche entera es corta para soñar contigo
y todo el día es poco, para pensar en ti.
Preciosos poemas.