No me referiré al aniversario del 24 de Mayo de 1822, fecha en que nuestro país alcanzó su libertad definitiva de la monarquía Española. Si bien esa libertad conllevó derramamiento de sangre de ecuatorianos y en especial de guayaquileños, la actual lucha por defender la libertad se centra en poder opinar, crear y defender aquello que hemos conseguido con el paso del tiempo, ser independientes, cualidad muy especial de quienes habitamos en Guayaquil.
La defensa de esa ciudad que busca más progreso en libertad, la ha asumido desde hace algunos años el Alcalde Jaime Nebot. Lo importante como él indica no es el pasado sino el futuro, la reinvindicación de la autonomía de la que a gozado por muchos años nuestra ciudad, tanto para decidir como para crear y progresar.
‘Una autonomía que respete al Gobierne Central y que se haga respetar del Gobierno Central. Una autonomía que consolida la indispensable unidad nacional que no es otra cosa que el respeto a las diversidades locales’
Nebot señala, que la misión del Alcalde no es sólo defender e interpretar el pensamiento y sentimiento de su pueblo; debe ser el realizador de sus sueños y el gestor de su libertad, autoestima y orgullo; por eso es necesario retomar la lucha por su defensa, por sus cualidades, una de ellas el voluntariado, ejemplo de ello los Bomberos, la más antigua Institución de Latinoamérica, otra la Junta de Beneficencia con sus múltiples servicios, etc.
Hay que defender a Guayaquil, Ciudad – Puerto. El 85% de las importaciones y exportaciones del pais se realizan por esta ciudad. Nuevas amenazas se están gestando. El afán del Gobierno es trasladar las operaciones portuarias a otro sitio; buscan argumentos para entorpecer el dragado de Los Goles, al igual que se atenta contra la dolarización con el establecimiento de monedas virtuales.
Aquellos que mucho hablan de libertad, si llegan al poder se embriagan de autoridad.
Como ecuatoriano y como quiteño que ama la unidad, mi apoyo y solidaridad con Guayaquil.
La Lucha será ardua, pero no hay desmayar. Los héroes del 24 de Mayo no nos ofrecieron su vida a cambio de nuestra libertad, para que ahora la fuéramos a dilapidar dándole cancha libre a los criminales de AVC, y al oportunista de Rafael Correa para que nos aplasten como ratas. Si hay que levantarse como pueblo, lo haremos. Nebot no debe quedar sólo. ¡Que desgracia haber caído en esclavitud nuevamente!
Refiriendome a esta bella publicacion, para mi, nacido en Guayaquil, es muy DOLOROSO y Aniquilante lo que veo que esta pasando mi Pais con este Pesimo y Prepotente Mandatario, Gracias.