En el Enlace Ciudadano del 18 Octubre 2014 el presidente culpó al dólar por el problema económico de nuestro país. Esto no es cierto. El problema es debido a sus decisiones equivocadas durante 8 años de administración y, lamentablemente, continúa en estado de negación. Sin el dólar, nuestra economía estaría peor que la de Venezuela. Ambos gobiernos se basan en el consumo de riquezas naturales y las de Venezuela son mayores que las nuestras.
La inversión es financiada con deuda, contrario a lo que afirma el presidente, que recuerda la inversión de $7.000 millones en 2014 pero olvida el déficit de $11.300 millones. El ingreso al erario nacional es alrededor de $27.000 millones y el presupuesto es $34.300 millones.
Está bien dar becas a estudiantes, pero las 9.700 becas entregadas según el presidente, representan un monto ínfimo en relación a más de $100 mil millones de deuda y $170 mil millones en ingresos por petróleo e impuestos. Incluso la inversión en talento humano de $1.200 millones es enana comparada con la deuda total y los ingresos durante 8 años de este Gobierno.
Dice que debido a la caída del precio del petróleo reducirá la inversión en escuelas, pero debe reducir el gasto en propaganda, que según él es de $12-$14 millones, cuando en realidad ha gastado más de $1.000 millones. Sacrifica la educación y prefiere hacerse propaganda porque promociona proyectos a falta de realidades. Dice que es para informar, pero recordemos la propaganda de la refinería del Pacífico que carece de financiamiento, y la del Yasuní, primero para mantener petróleo bajo tierra y luego para explotarlo.
Repite que la explotación del Yasuní es para el futuro, que ellos tienen los gastos. Pero no menciona las reservas petroleras pre-vendidas o utilizadas como garantía de pago de la deuda a China. Con el déficit a $11.300 millones y creciendo, buscará hipotecar todo lo que esté a su alcance, como lo hizo con la mitad de nuestras reservas de oro.
Confunde a los ciudadanos mezclando gasto con inversión, para hacerles creer que es lo mismo. Pero no lo es. El gasto no produce retorno mientras que la inversión sí. Si alguien consume su sueldo en farras, es gasto. Si se compra un departamento y lo paga mensualmente con su sueldo es inversión. Aunque no es buena inversión comprar un departamento que no puede pagarlo con los ingresos y tiene que recurrir a la tarjeta de crédito o al “chulquero” para pagar. Así están las inversiones del Gobierno, que recurre a préstamos para pagar las deudas (capital e intereses). Y a una tasa de interés elevada, de las más altas en el mundo.
Cree que el crecimiento económico en 2015 será 4%, como indica el FMI, sacado a empujones pero ahora usado, aunque lo haya dicho antes de la caída del precio del petróleo. Pero no cree que la burocracia ecuatoriana es de las más caras e ineficientes de la región, como indica el BID, alegando que se refiere al periodo entre 2004 y 2011, aunque los ministerios y secretarías fueron duplicados en este Gobierno, y el despilfarro se ha disparado. Si con petróleo (WTI) sobre $100 el crecimiento en 2014 es 4%, ¿se va a crecer al mismo ritmo en 2015 con petróleo a $80?
Dijo que la eficiencia se mide con el costo. El costo de las carreteras en Ecuador es 14 veces más que el costo promedio en Latino América, que a su vez es 7 veces más caro que el costo promedio en Europa.
Confunde el sentido de “windfall tax” o impuesto a ganancias extraordinarias o inesperadas y lo aplica a la plusvalía, cuando este impuesto británico fue grabado a compañías, no a personas que luego de vender su casa tienen que comprar otra casa para vivir.
El déficit ($11.300 millones) es 33% del presupuesto 2014 ($34.300 millones) y 12% del producto interno bruto PIB. Deberían aceptar con humildad la falta de previsión y corregir. Ser prepotentes ante la clara y contundente evidencia del fracaso, no es atractivo. Japoneses, cuya cultura es diferente a la nuestra, estarían avergonzados y con llanto estuviesen pidiendo disculpas y perdón a su pueblo. Si tuviésemos una cultura diferente, en la que se siente vergüenza por el fracaso, en lugar de seguir con el engaño, renunciarían.
Expresó su admiración por los abanderados y afirmó que son un orgullo para el país. En esto, el presidente es consistente, por lo que lo invito a debatir conmigo, con el abanderado que admira, para esclarecer las dudas de los ciudadanos en temas en los que presentamos grandes diferencias. Dice que hay personas que quieren que el Gobierno se caiga. La mentira cae sola, ante la verdad. En el cuadrilátero político podrá correr, pero no podrá esconderse.
El presidente terminó diciendo que se iba fuera del país a trabajar por la patria y a los que se quedaron les dijo que nos roben todo menos la esperanza. ¡Qué bárbaro! ¡Qué mensaje para sus colaboradores! ¡Que nos roben todo! ¡No señor, que no nos roben nada! ¡Y no nos dejemos robar!
El economista Rafael Correa tiene de economista lo que la Chilindrina tiene de ingeniera en física cuántica. Es un impostor. Todo lo ha conseguido con labia, manipulación y altanería. Su nivel en lenguas extranjeras ya no indica que es un fraude. De paseó por universidades extranjeras -de bajo rango- sin haber aprendido a sumar ni a restar, sino no confundiría gasto con inversión. Para remate es bruto, sino ya habría enderezado el timón.
Ese señor no debatirá jamás con usted. No pierda tiempo pidiéndole que se mida con Ud. Él no lo hará. No lo hará porque le teme. Le debe dar pánico la sola idea de enfrentarlo. Ese señor no tiene su carisma, su honestidad, y en conocimientos no le llega a Ud ni a la canilla. Por favor síganos informando. Todos sus escritos yo los reenvío a cientos de amistades dentro y fuera del país. Siga desnudando a ese reyazuelo de pacotilla. Saludos y muchas gracias Sr. Sagnay de La Bastida.
Muy de acuerdo, es necesario que la ciudadanía escuche, entienda y comprenda la situación y realidad de nuestro país, lamentablemente nuestros políticos deben asegurarse el 60% con las personas más vulnerables, no quiero decir «POBRES», porque Ecuador es potencialmente fructífero, pero éste sector se acostumbró desde Mahuad a estirar la mano para recibir limosnas, nos hizo tal daño este EXPRESID…con los «famosos bonos» que dejó acostumbrados a exigir sin esfuerzo y quienes nos esforzamos por salir adelante hoy por hoy nos aplastan con tanto impuesto. NOS ESTÁN CERCANDO…LIMITANDO…..NUESTRA LIBERTAD Y PROGRESO. Un lider asiático dijo «QUE GLORIOSO ES CREAR RIQUEZA», eso y más hay que emular.
Cuando estaba de candidato a presidente este señor, nos hacia notar que en el país se cobran muchos impuestos y los tramites para cualquier reclamo es muy engorroso, miren ahora este señor se da con la piedra en las muelas, dándonos todos los impuestos por el inventados, como por ejemplo a todos nos cobra o roba lo que es mas pertinente con un subsidio solidario impuesto a cada uno de los que pagamos la energía eléctrica, a mi me roba 5 dólares cada mes, y soy de la tercera edad, como es esto, estudio en el extranjero y pago mensualmente, y por esto tambien se coge un porcentaje por salida de capitales, lo que tambien me indigna es que nos cobren unas multas que yo no se como ni cuando cometí una infracción, y así por el estilo, estamos jodidos, yo, por todos estos latrocinios le odio a muerte, y jamás querré que perennice en el poder con todos los que están cobrando jugosos recursos de los ecuatorianos sin hacer nada.
Muchas gracias por sus amables comentarios. Saludos.
Este Gobierno ha entrado justamente a la etapa en la que los Gobiernos Socialistas de los 60’s llegan cuando se agota el discurso retórico, novelero y filosófico-académico y es la etapa en la cual, luego de 8 años se muestra incapaz de mostrar fuentes de empleo generadas como consecuencia de sus políticas. Más allá del discurso y logros que pudiesen contarse en equidad, eduación, salud, carreteras, soberanía, etc., la economía de un pueblo precisa nuevas plazas de trabajo, la cuales, en un clima de beligerancia, permanente reforma tributaria, ofensa a quienes emprenden e invierten, y la falta de políticas de apoyo práctico, jamás se incrementarán. El pueblo con trabajo resuelve gran parte de sus problemas y sin él se convierte un un lastre del sector que tributa y trabaja.