Siempre hay algún miembro de Alianza País que es más papista que el Papa. Digo que es miebra de esa organización política que gobierna al país, por cuanto aparte de ellos nadie es capaz de lograr movilizar a un destacamento de 70 policías, para violar la ley y cometer un atropello. Y digo que es más papista que el papa, porque parecería, que el atropello cometido es una realización contra mi nieta la Asambleísta Ab. María Cristina Kronfle Gómez, cumplida en contra de su padre.
El propietario de una finca en la Prov. De Santa Elena, en el sector de la presa del Azúcar, o es miembro de AP o allegado a uno de ellos, pues desde esa posición ha podido convertir un territorio de frontera, es decir donde no hay «Dios ni ley», al llevar un fuerte destacamento policial para bloquear una vía que viene por muchos años siendo usada como servidumbre de paso (protegida por la ley) a varios propietarios para sacar la producción de sus tierras, entre estos el padre de la Ab. Kronfle.
Quien, por este motivo, no puede acceder libremente a sus recursos para sus intereses, mantener y progresar su propiedad, impidiéndole atender a su familia y cumplir con sus obligaciones crediticias otorgadas por el Estado. De esa forma se verá obligado a vender al violador de la ley a precio de huevos (quien ya lo presionó judicialmente, sin éxito, con el intento de despojarlo de su propiedad).
¿Dónde estamos? ¿En qué país vivimos? ¿Dónde vamos? Si ya no hay garantías en la ciudad ni en los predios del campo ¿Cómo lograron movilizar tan numeroso destacamento policial a vista y paciencia del mando de la Institución? ¿A quién puede recurrir quien no concuerda con las políticas oficiales? ¡Pues al civismo, a la resistencia y a la opinión pública mayoritaria!