Libertad de Pensamiento

El Ecuador se encuentra sumido en una ola de violencia y corrupción nunca antes vista… Prácticamente todos los días los medios escritos y hablados pese a las restricciones que se imponen en la ley mordaza, nos narran en forma exhaustiva los hechos de sangre, de sicariato, tráfico de drogas, que se suscitan en el país.

De otra parte, la libertad de expresión está cada vez más restringida y en riesgo, por la concentración que se tiene sobre los medios en nuestro país.

En la última asamblea de la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), se dio un consenso general en el sentido de que como nunca antes existe un efecto negativo sobre la libertad de expresión y la democracia. En Ecuador, hay una profundización en el camino del autoritarismo y en Venezuela el hostigamiento permanente a los pocos medios que aun quedan es permanente.

Parecería que las palabras de José Joaquín de Olmedo, precursor y gestor de la independencia de Guayaquil, toman vigencia y permanencia luego de 195 años de la verdadera revolución que se dio el 9 de octubre de 1820:

“Por falta o imperfección de los cuerpos representativos, ¡cuantas naciones poderosas nos presenta la historia, agitada, vacilante e impelidas sucesivamente de la monarquía a la tiranía, de la tiranía a la democracia y de la democracia a la anarquía!”

“La opinión debe ser libre, y todo ciudadano tiene facultad de pronunciar la suya con franqueza y dignidad”.

“Los hombres hábiles ambicionan convencer; los hombres mediocres o sin talento no aspiran sino a mandar. Estos llaman sin previsión la fuerza en su socorro junto a los argumentos de la razón”.

“El gobierno representativo es la voluntad presunta manifestada por los órganos selectos y escogidos por los mismos pueblos, que proponiendo siempre en las asambleas lo que parece mejor, rara vez se deja de hacer lo bueno”.

Retornando a lo resuelto por la SIP en su ultima Asamblea General realizada en Charleston, EE.UU., se invito al Presidente Rafael Correa, a que solicite una opinión consultiva sobre la legitimidad y compatibilidad de la ley de Comunicación vigente en Ecuador, para ver si esta cumple con los estándares internacionales en materia de derechos humanos, ya que se considera que restringe la libertad de expresión y propicia la autocensura.

Con seguridad la petición de la SIP, dará cabida para que la respuesta del mandatario sea una vez mas desconociendo al organismo y tratando a la prensa de corrupta, al margen de proclamar la soberanía del país ante las peticiones de un grupo de periodiqueros que no representan nada, ni a nadie.

La conmemoración de la gesta libertaria de Octubre de 1820, debe ser para que los guayaquileños recordemos una vez mas que Guayaquil será siempre libre en su pensamiento y en su accionar, y que estará atenta a que esa libertad jamás sea conculcada por personas o gobierno alguno.