Lo que yo recordaba al escuchar la palabra Isis, eran las historias sobre la diosa hija del Sol, hermana y esposa de Osiris quien reinaba pacíficamente el antiguo Egipto y que fuera madre de Horus, a quien se lo consideraba como el iniciador de la civilización egipcia.
Hoy ese recuerdo lamentablemente ha pasado a vincular a Isis, ya no con “La gran señora” o “La diosa madre”, sino con un grupo de islámicos yihadistas que buscan la conversión de los infieles sembrando terror, realizando actividades de lo más inhumanas y en extremo brutales.
Lo sucedido actualmente en París no tiene nombre, como tampoco lo tuvo lo que aconteció en las instalaciones de Charlie Hebdo tiempo atrás, quizás no sea yo quien deba juzgar, simplemente como ciudadano, como parte de un conglomerado mundial, no puedo quedarme callado ante tanta atrocidad y derramamiento de sangre inocente en un duelo de poderes, que para muchos de nosotros no tiene sentido, y aún en el supuesto que lo tuviera, no hay ningún derecho supremo o terrenal para actuar de la manera con la que se está desenvolviendo esta supuesta lucha.
Si seguimos así a donde vamos a parar, cada vez veo más cerca una descomposición social a niveles alarmantes, gente sin ley, niños robando y matando a quien puedan, gobiernos destruyendo a sus propios ciudadanos, políticos engañando y vendiendo ideas mesiánicas a sus electores, que podemos esperar de esto mis estimados lectores, quizás lo que cada vez con más frecuencia estamos viendo, más Isis, más Charlies Hebdo, más Columbines, más zánganos en el poder de territorios que lo único que pueden brindar a sus protegidos es poder para ellos solos, a través de la miseria, pobreza y violencia.
El tiempo se nos acaba, si no rompemos las estructuras enraizadas que invaden algunas ideas que nos imponen, nuestro presente se pondrá cada vez peor, tomemos la decisión de decir basta, no creo que nadie que tenga un poco de cordura pueda pensar que el futuro que tenemos a la vuelta de la esquina pinta para mejor, enarbolemos de una vez por todas la bandera de la libertad y el progreso y desterremos físicamente y de nuestras mentes a esos propagadores de odio que lo único que buscan es beneficio propio y de su séquito de coideraios.
Dios nos salve de los yihadistas de Isis y que la ira de Ia reina Isis, los apiade ante su dios.
Comentario bien traído y oportuno por el Columnista Aycart, en momentos de angustia y desasosiego que sufre el pueblo Francés por la barbarie de asesinar sin miramientos a cuantos ciudadanos se les cruzaba en la aciaga noche del día Viernes 13 Nov/2015.
Mientras el mundo abre sus fronteras, en el Medio Oriente sigue las guerras santas, las mismas que no tiene visos de solución, esperamos que los lideres mundiales reaccionen y pongan un alto a estos hechos que la comunidad mundial los rechaza y deplora la perdida de vidas inocentes.
En la Edad Antigua: La esclavitud del hombre por el hombre fue una realidad.Dicho en otras palabras: El pez grande se come al pequeño, toda la vida el depredador del hombre es el hombre mismo. Construcción de las Pirámides de Egipto cuantos murieron y vivieron en la más extrema pobreza, sin poder protestar por el poder aplastante.
En la Edad Media: Se valieron de Dios para manejar la voluntad del hombre.(dogma) pretexto para las matanzas.
La Edad Moderna Y la Contemporánea: Proyección de la Edad Moderna, riquezas a nivel mundial,aparecen las grandes potencias y el hombre se convierte en el lobo del hombre, y por este afán tenemos las dos guerras mundiales con armas letales, símbolos del terror y del miedo.
En conclusión lo de París es una recopilación del hombre versus hombre. Toda esta situación se da debido a la falta de amor al prójimo, ciertamente que es devastador ver tanta miseria de alma y tan poco escrúpulos para halar el gatillo y matar a la creación de Dios.
Pretexto y más pretexto para llegar a la horrible mortandad. Definitivamente así digan lo contrario y usen el nombre de «un dios» NO HAY TEMOR DE DIOS POR NINGÚN LADO».