La crisis luego de la bonanza que se experimento por el precio del petróleo y el feriarse los ahorros, ha llevado al gobierno a que intente paliar la situación con diversas medidas que más parecen palos de ciego.
Pusieron Salvaguardias a las importaciones diciendo que no afectarían a las clases populares que no comen salmón ni consumen productos suntuarios. El resultado es que hay cosas escasean o que se incrementaron de precio bárbaramente.
El Timbre Cambiario promovido como una posible solución, no saben cómo implementarlo, han dudado y crearon desconfianza en los sectores productivos.
Establecieron cupos para importar que ya vencieron y los renovaron sin consultar reduciéndolos y poniendo en dificultades a muchos importadores. Las ventas bajan en un 30%, mientras los precios suben. El desempleo privado aumenta mientras en el público se incrementó y se ha dicho que no lo reducirán
Anuncian una reforma laboral que busca incentivar el empleo; bajar las horas de trabajo; el paro parcial para empresas en crisis, etc. Se flexibiliza, pero se sostiene que no hay tal.
Restaron el 40% de las pensiones jubilares con la Ley de Justicia Laboral, pero se adeuda “técnicamente $ 8000 millones por bonos adquiridos por el Biess, que son de nuestra plata; se pagan 600millones en intereses”. A Municipios y Prefecturas se deben más de $800millones. Muchos empleados aún están sin cobrar sus haberes de diciembre. ¿En qué quedamos?
El riesgo país sube. Se anuncian concesiones que las consideraban vergonzosas. Son pocas las probabilidades de éxito. Se dan palos de ciego, pero no se cambia el modelo.
Buscan romper la piñata dando palos sin acertar. La crisis aumenta en los hogares y la criminalidad sube sin control.