La desesperación por la situación económica que se palpa en el país parece que se le va de las manos al gobierno, llevándolo a exacerbar el ánimo en el ámbito político-militar.
No se atina con medidas que puedan mejorar el panorama económico. El proyecto de Ley de Optimización Laboral y Seguro de Desempleo, es un nuevo mamotreto similar al de las Alianzas Público Privadas que no contribuyen ni aportan nada. Ya se está pensando en retirarlo por “alboroto”, incluso discusiones entre los Asambleístas verdes Flex. Le han cambiado el nombre a antojo de cada asambleísta de País e introducido mayores disposiciones imposibles de implementar, todas con carácter de inconstitucional.
Las diferencias entre el Ejecutivo y las Fuerzas Armadas tuvieron un nuevo capítulo con la renuncia del Ministro de Defensa, Fernando Cordero. Había que bajar la tensión y lo mejor para ello era sacar el corcho para que baje la presión. Antes de salir firmo 2 Acuerdos que han creado nuevos malestares. Un pisa y corre en el argot beisbolero. Se nombra a Ricardo Patiño, personaje que ha ocupado varias carteras de Estado y que como comodín se lo mueve en el tablero de acuerdo a las necesidades. Más leña al fuego.
La situación fiscal se empeora y las deudas del gobierno sigue subiendo, un ejemplo de ello es Solca, ni que decir de Municipios, contratistas, etc. El turismo fuente de ingreso importante se afectará con el caso de turistas asesinadas en Montañita. La imagen internacional del país se resquebraja una vez más.
Se necesita que se infunda confianza y más que nada transparencia, caso contrario el futuro no es muy prometedor.