El país está a la expectativa de la aprobación del proyecto que busca clavar más impuestos a productos como son las cervezas y licores, bebidas azucaradas, snacks y cigarrillos. El paquetaso contempla también modificaciones a las pensiones jubilares, a las facilidades que tenían los discapacitados, dólares para viajes, dinero electrónico, etc.
El proyecto impulsa el uso del dinero electrónico; sistema poco entendido por los ecuatorianos, que ven en esta forma de pago un método que no les permitiría el palpar el billete en sus bolsillos.
El gobierno busca introducir esta forma virtual de pago desde el 2011, sin éxito. El Banco Central es quien tendría a cargo el manejo, para lo cual se tiene que abrir una cuenta y depositar dólares que respaldarían teóricamente las transacciones o pagos que se efectuarían en tiendas o de los servicios básicos: luz, agua, etc.
La moneda norteamericana sustenta su credibilidad en la solvencia de los Estados Unidos. En el electrónico los dólares depositados en el Banco Central estarán a la libre disposición del gobierno como el de las cuentas de las instituciones públicas.
EL ecuatoriano confía muy poco en la conducción económica del gobierno, más aún temen por la estabilidad de la dolarización, de ahí que el dinero electrónico debería ser administrado en la banca privada lo que daría seguridad ya que tiene como respaldado las cuentas corrientes y de ahorros de las personas.