El saquear, también llamado pillaje, corrupción, peculado… Es la toma o el apoderamiento ilegítimo e indiscriminado de bienes ajenos por la fuerza, como parte de una victoria política o militar.
La palabra designaba originalmente al asalto de villas, pueblos y ciudades, en situación de conflicto. Hoy también por parte de los mismos miembros de la comunidad.
La primera parte del desvalijamiento económico e intelectual fue desarmar al pueblo y pasar leyes que fomentan la delincuencia y la inmoralidad. La parte más trascendental fue sembrar el terror: Claros abusos de los Derechos Humanos ¡Preso, preso, pre… Cobardes solos y valerosos en manada de cientos de guardaespaldas!
Envalentonados por el acceso libre a las arcas de los dineros del pueblo pasaron al punto más sensible: Acabar con los medios de comunicación. El ataque contra el diario El Universo, claramente expuesto en un libro académico del jurista, caballero, doctor Emilio Romero P., en el cuál demostraba que las “los artículos de las leyes invocadas habían dejado de existir con la nueva “Constitución” (que luego se usó como papel higiénico) y el total y absurda falta de escrúpulos al debido proceso. Persecución a todo comentarista que se arriesgaba a dar su criterio diferente al del mayordomo: Emilio Palacios; escritores que sustentaban hechos cuestionables Pablo Guerrero; los mismos designados miembros de investigar casos y que mencionaban circunstancias indeseables para usía: Pancho Huerta Montalvo.
Incluir a los otros medios: El Comercio, La Hora, El Mercurio, Janeth Hinostroza, Bonil, Diego Oquendo, la gordita horrorosa, hasta el que hizo un gesto, juzgado obsceno, de levantar su mano para arreglarse los lentes o rascarse la nariz.
Intervención de líneas telefónicas, censurar redes sociales, crear “troles”, cortar programas para pasar propaganda mentirosa con la justificación de: “Comunicados Oficiales” … Todos sabemos la monstruosidad.
Hoy, que saquearon la lotería que se ganó el pueblo, ecuatoriano y fue malgastada en obras de elefantes blancos o perros muertos. Piden a grito auxilio a quienes insultaron y le exprimen el ama al ciudadano más necesitado.
Botan a Oderbretch denominándola con términos censurables y luego se bañan del lodo y regresan triunfantes. Disfrazan préstamos leoninos, cuando eran realmente ventas contra entrega futura. Se apropiaron de todos los fondos privados y seccionales, obras y promesas que cuestan montos gigantescos y nunca siguen adelante en el trabajo, pero los “funcionarios” se mantienen (Refinería del Pacífico, Gas del Golfo). Han logrado hacer palidecer y quedar como el robo de un chupete el llamado proceso la “Venta de la Bandera”, dirigido contra una de las personalidades más notables del Ecuador: El Presidente de la República Dr. Luis Cordero Crespo.
Hoy si usted desea viajar debe pagar un impuesto sobre el dinero ahorrado que ya ha pagado mil y un tributos, se aumenta el costo del boleto de aviación con nuevos impuestos adicionales que obligan a cobrar y disfrazar a las aerolíneas para tener más dinero que dilapidar.
Claro que tienen a las ‘Gabys’ y las ‘pobres Pames’ con Patente de Corso, Ministros de Educación que sirven de adoctrinadores y carecen de neuronas. La juventud ya ni puede estudiar en la Universidad y ni siquiera pueden acceder a Colegios Técnicos.
El que, si aprovecho su educación, conoce que en la macroeconomía el efecto es cómo el Tsunami, comienza súbditamente pero el destrozo tarda en llegar y arrasar. ¿Se debe esperar que más ruina asole al país o actuar ya?
Esperar que las ratas cumplan su ciclo de vida y se vayan: ¡Se tiene que ser iluso! ¡Estos roedores hacen trampa y aprenden nuevas mañas!
¡Pedir Cumplan con la Ley ¿Cuál la de Maduro?! Permitir hagamos: ‘Tregua’ ¿Durante un saqueo?
Luego de Dios, Ecuador y el Honor.