I PARTE
Siria: La construcción de un Estado
Para analizar objetivamente los sucesos en Siria es necesario, primeramente, sumergirse en la historia moderna de dicha nación, es decir, posterior a la fragmentación colonial de Oriente Medio, luego de la Gran Guerra y consecuente desmembramiento del Imperio Otomano. Los sucesos que se dieron en dicha región desde entonces, hasta la Segunda Guerra Mundial, transformaron no solamente el mapa de la región sino también el destino de estados, crearon nuevas naciones, demarcaron límites nacionales, instauraron gobiernos coloniales europeos y dieron inicio a nuevas dinastías enterrando otras.
Desde 1946, cuando Siria se independizó de Francia, hasta finales de los años 60, esta nación fue un territorio profundamente enfrascado en inestabilidad política generada por las recurrentes turbulencias que marcaron la lucha por el poder. La ingobernabilidad del país se caracterizó por los golpes de estado, la aplicación de una serie de Constituciones y, las abruptas oscilaciones ideológicas de la dirección política. Estos frecuentes acontecimientos internos sumados al hecho de que esta nación se encontraba en una de las áreas del mundo con mayor desequilibrio e inseguridad, determinaron las pocas posibilidades que Siria tendría de conquistar una estabilidad sostenida.