Continua, el ilustrísimo Arzobispo de Guayaquil, MONSEÑOR LUIS G. CABRERA HERRERA, ilustrando las hojitas dominicales con sus lecturas y conceptos sobre LA AUTORIDAD, entregada a cada uno de los asistentes de la misa. Me refiero a la del domingo 9 de octubre día en el que también, se celebraron los 196 años de independencia de la ciudad de Guayaquil, del dominio español.
Nos habla, en la HOJITA DOMINICAL, concretamente, de la “AUTORIDAD COMO PRIVILEGIO” y nos recuerda que:
» ó á ó, , í . , é ñ”. “ ¿ ó, í ?”. É : “ ; s , é ” . í: “ s é . ó s, , P ó .
ó , : “ ”
El primer párrafo, hace referencia a AQUELLA AUTORIDAD, que investida de poder político, trata y/o obtiene como consecuencia de su actuación, algún PROVECHO O BENEFICIO, que puede ser de contenido económico, o social, o político y en determinadas circunstancia hasta religioso.
Aspectos éstos, que abarcan casi todo el universo en el que se desenvuelve una persona, en el presente caso, quien ejerce AUTORIDAD.
Quien hace tal gestión esto es, con el fin de lograr u obtener un INTERES PERSONAL esta aplicando el principio universal al revés: “El fin SI justifica los medios”.
No importándole si sacrifica conceptos éticos, principios políticos, religiosos, jurídicos o de otra índole; -como aquellos que rigen las relaciones humanas en sociedad-, para lograr un consenso entre los componentes y/o integrantes de la misma.
Vienen como, “anillo al dedo” estas palabras del señor Arzobispo de Guayaquil, a ciertas formas y maneras de actuar en la política nacional, a cualquier nivel (local, provincial, regional o nacional), cuando para lograr lo que se pretende, se miente, se falsean documentos, se argumenta con falacias, se esconden reales causales o impedimentos, o se aceptan con rapidez, las propuestas de un solo lado (en el caso de acuerdos), para lograr su cometido.
No solo estos conceptos se aplican en las acciones políticas o partidistas; son aplicables incluso en la realización de una obra pública, cuya necesidad se sobre dimensional, para lograr su ejecución.
Para ello, es necesario desconocer las motivaciones de otros grupos sociales (técnicos, gremiales, industriales, comerciales, agrícolas, etc), que se obvian por conseguir lo que se pretende.
Yo tengo, EL PODER, LA AUTORIDAD Y LA FUERZA, luego, la/lo hago, “salte quien salte”, perjudique a quien perjudique, aféctele a quien se afecte.
Primero esta la AUTORIDAD, (COMO PRIVILEGIO), sobre todas las cosas, después, EL ESTADO, LA SOCIEDAD, LOS GRUPOS SOCIALES, LOS GREMIOS Y LAS PERSONAS.
Lo hago, lo hice y lo seguiré haciendo “porque a mi me da la regalada gana”. Parecería que este dicho, tiene plena vigencia aún en nuestros días, que pensábamos había caído en el «Baúl de los recuerdos».
“El camino del infierno esta empedrado de buenas intenciones, lo decíamos ayer, en otra carta, hoy, lo repetimos, pero modificado: “EL CAMINO DEL INFIERNO ESTA EMPEDRADO DE MALAS ACCIONES Y EJECUCIONES”.
Sólo EL TIEMPO me dará la razón, parece que éste es la medida de todas las cosas y no el hombre, como lo creían los filósofos de la antigüedad.