Esta palabrita preocupa. Ya ha traído algunas muertes, destruye al ser humano y lo convierte en motivo de burla de los demás. En los colegios es común, sobre todo con los abusivos, denigrar al compañero poniéndole motes, o fastidiándolos de alguna forma, o con bromas pesadas o, lo que es más grave, cuando el abusador no es un compañero, sino un profesor.
Es normal que cuando una persona comete un error, se abuse de ella con bullying ya sea copiando el error que cometió o ridiculizando su actuación, para burlarse de ella. Otras veces el bullying se produce por abuso, imponiendo la fuerza y quitando algo al abusado, ya sea su lunch o lo que sea que tenga. En este caso, más que bullying, pasa a ser robo.
Me llamó la atención hace unos días, el bullying que se le hizo a una ex-jueza, la cual, por haber perdido la compostura y la decencia, por culpa del alcohol, se negó a pagar una cuenta y luego, en forma airada atacó a la policía que fue llamada a defender el local, para poder cobrar la cuenta.
El alcohol es un mal consejero e hizo que ella insulte, amenace y quede en ridículo delante de esas personas, y lo más grave, es que alguien, no necesariamente con mala intención, grabó ese episodio bochornoso, que se convirtió en viral por las redes. El asunto no acabó allí, pues ella, continuó luego en la estación de policía y luego se añadieron otras conversaciones que no se sabe si fueron hechas en el mismo momento o en otro.
Desgraciadamente, cuando uno ocupa un puesto público, está expuesto a ser criticado por su actuación. Estoy seguro que la ex-jueza debe estar profundamente arrepentida de su actuación y creo que se cuidará de ahora en adelante en evitar el exceso de alcohol en su vida.
No creo que se pueda juzgar a alguien por haber filmado, con buena o mala intención estos vídeos, pero sí creo que no se puede abusar de ese bullying. Lo hecho, hecho está, pero eso no debe acabar con la vida de esa persona. Continuar con escarnio destruyendo a la persona, no conduce a nada bueno. Ese episodio ya pasó. Esa persona deberá reflexionar y decidir si cambia o no su actuación, o su afición por el alcohol, pero esto es particular de ella. Fue un acto deplorable, pero ya pasó.
Continuar atacando sin sentido a una persona por algo que hizo, sólo saca lo malo del interior de ser humano y destruye, tanto a la otra persona, como al que lo practica.