A la Izquierda Democrática, siempre se le ha identificó como un avestruz, metida la cabeza en la tierra, es decir no ve nada de la realidad que le circunda; igual, su “líder histórico”, supuestamente alejado del quehacer político, pero cuando ha convenido se activa -recogida de firmas- durante los 10 años de abuso, prepotencia y corrupción del gobierno de Correa, Rodrigo Borja se ha dedicado a su “obra maestra”, la enciclopedia. Mientras se derrumba el país, el expresidente ni se inmuta, a lo mucho hace presencia escribiendo los domingos una columna en el diario El Comercio, abordando temas intrascendentes; una especie de Nerón, tocando la lira y abajo, Roma incendiándose.
Cuánto pesa, ese silencio cómplice por la presencia de sus parientes en el Gobierno de Correa, su hermano embajador en Chile y ahora en Estados Unidos; su primo, reciclado en varios ministerios, ahora funge de Ministro de Agricultura.
Debemos recordar que la Izquierda Democrática en la campaña presidencial de 1995, dividió el electorado de la Sierra, Rodrigo Paz tenía buenas opciones hasta que la ID candidatizó al inefable Freddy Elhers, total, los votos no fueron, ni para el uno, ni para el otro.
Ahora, la Izquierda Democrática, tras “largas deliberaciones”, según el artículo de 4 pelagatos de José Hernandez, La Izquierda Democrática se suicida en directo, señala: “…tras diez años de correísmo, anuncia que “El país se enfrenta a dos modelos sobre los que debe decidir en la segunda vuelta electoral”.
“En la resolución del Consejo Ejecutivo Nacional la Izquierda Democrática describe los dos modelos. Este es el que representa Lenín Moreno: “Por un lado un candidato que representa a un gobierno que ha concentrado el poder y ha irrespetado a todos y a todo, que desconoce la valía de las organizaciones sociales y de la libertad de expresión y que ante las evidencias de corrupción generalizada no ha movido un dedo por esclarecerlas y sancionar a los responsables”.
“Este es el modelo que, a sus ojos, representa Guillermo Lasso: “Por el otro, un modelo conservador a ultranza, que ignora la solidaridad como consustancial con la justicia y la lucha contra la inequidad. No es viable un enfoque que concede al mercado la supremacía, cuyas distorsiones afectan a los más pobres y necesitados y que pueden provocar estallidos sociales de imprevisibles consecuencias”.
Increíble decisión de un partido, que dice ser de izquierda y democrático y que sus dirigentes, saben y conocen muy bien que son 10 años de descalabro irresponsable y que las purulencias de la corrupción aparecen por los cuatro costados y que el espejo en el que nos debemos ver es esa tragedia que se llama Venezuela.
Debieron seguir el ejemplo de ese lúcido y batallador dirigente indígena, presidente de la Ecuarunari, Carlos Pérez Guartambel, que declaró que “Es preferible un banquero que una dictadura que nos ha despojado de nuestros territorios, que nos ha declarado el estado de excepción, que nos ha encerrado en la cárcel”.
Por último, concluyo retomando el artículo de 4 pelagatos, que dice: “Pero, por ahora, el mal absoluto no es Lasso; es el correísmo y la década perdida para la democracia ecuatoriana. Es ante ese reto que Izquierda Democrática da la espalda al país”.
Sr. ALberto Molina:
Definitivamente, ustedes (todos quienes emiten artículos en este block), tienen la tarea de entronar al banquero, hombre de confianza del tristemente célebre Jamil Mahuad en la la jornada de 1999 que despojó a los pobres del Ecuador de sus pequeños ahorros y se comieron 7.000 millones de dólares.
Para ustedes el señor Lasso es ejemplo de honradez, de banquero lúcido y de buen olfato para acumular una gran fortuna. Pero les cuento, quienes perdimos nuestros ahorros con la pulverización del sucre y no olvidamos la historia de la dolarización, no envidiamos la fortuna del banquero y el uso que lo está dando, Lo que si nos preocupa es que los pobres del Ecuador, engañados por las ofertas mentirosas del banquero, sean quienes con su voto entronen al banquero a Carondelet, lo cual sería una infamia: Un banquero que gane las elecciones en un país de pobres y votado por los pobres !!!
Qué milagros hace la propaganda mentirosa. El Ecuador caminaría de retro como el cangrejo, igual que lo están haciendo la Argentina y Brasil.
Son 10 años pérdidos y, no más de la misma receta, eso es de necios o, vividores que tienen intereses con este régimen.
Veámos que pasa con Lasso, aunque le será díficil poner orden, pero pienso que no es imposible.
RODRIGO RAMOS….ERES OTRO PENDEJO CON LA MISMA CANTALETA DEL BANQUERO Y DE LA DERECHA Y LA IZQUIERDA….SO GHUEVÓN PIENZA EN EL ECUADOR Y SI ERES UN POQUITO CONCIENTE Y PENSANTE Y EDUCADO E INSTRUIDO…. ANALIZA TODOS LAS CORRUPCIONES
DENUNCIADAS DE PRESENTE YDE ANTES DESDE EL COMIENZO DE ESTA DÉCADA…. TU NO TIENES DERECHOS….TODOS TE LOS HAN CONCULCADO…. PERO CALRO…DEBES SER OTRO DE LOS TROLES PAGADOS PARA HABLAR PENDEJADAS….»BÓRRATE» TU MISMO….HUEVÓN…. LA PATRIA ES LO QUE EN ESTOS MIOMENTOS NO LLAMA A DEFENDERLA…. O QUIERESD HACER COLAS PARA PODER COMPRAR ALIMENTOS Y MEDICINAS…. NO LEES EN EL DIARIO DE HOY QUE AL MISMÍSIMO SÁTRAPA DE CARONDELET EN LOS RIOS LE PIFIWERON Y LO LLAMARON MENTIROSO PORQUE VISITÓ HOSPITALES Y DIJO QUE TODO ESTABA BIEN….Y LE CONTESTARON QUE NO HABÍA MEDICINAS NI MÉDICOS PARA QUE LOS ATIENDA….?????….
LEE INGNORANTE ANTES DE HABLAR….BOBO…..
Fernando Castro:
Quién es ignorante?: yo que pasé por la escuela o tu que en 50 palabras tienes 3 faltas ortográficas:
Ghuevón se escribe Huevón
Pienza: se escribe Piensa
Conciente se escribe consciente.
Para que referirme a tu pésima redacción, a los signos de puntuación mal utilizados, a los vocablos vulgares usados, sería como meter mis manos en una cloaca.
Por lo demás, me dan vómito tus expresiones, propias de un verdadero ignorante, incapaz de ir a un diccionario por respeto a quienes leen y quieren informarse. El opinar diferente no debe ser motivo para el insulto barato y vulgar en un país de una sola bandera. Por tus taras, tu no serás capaz de responder con ideas en un plano civilizado, tu solo eres un cobarde para ofender aprovechando el anonimato.