¿Se justifican?
Creo que a todos los ecuatorianos nos interesa tener buenas carreteras con varios carriles, bien señalizadas, con espacios para parqueos en caso de paradas “técnicas”, con posibilidades de tener cada cierto número de kilómetros una gasolinera, con restaurantes, servicios higiénicos, etc., etc.
Nos preocupa el costo de construcción o de mantenimiento, de las mismas. Este gobierno que culmina le dio énfasis a las carreteras en el Ecuador, en las tres regiones continentales y en especial al Oriente ecuatoriano, donde se tuvo que construir espectaculares puentes colgantes, ante el difícil acceso de la Región amazónica.
Se tuvo una buena decisión al inicio de este gobierno, como fue enancarse en el Sistema Vial Nacional existente y mejorarlo considerablemente.
Solo queda una deuda pendiente, la carretera Guayaquil – Machala de gran interés para sus pobladores y sectores agrícolas, en especial de los bananeros y los camaroneros, cuya producción y calidad es la mejor de los sectores agrícolas en la costa, en estos dos rubros.
La otra deuda es la extensión vial de la carretera Guayaquil – Santa Elena, incluido su desvío desde Progreso a Playas, que el Presidente Correa, no quiso concesionaria a inicios de su gobierno y la construyó el Ministerio de Obras Públicas, se la denominó “autopista” Guayaquil – Santa Elena, pero es un apelativo exagerado y lamentablemente demoró mucho su construcción y cuando la inauguró –varios años después- resulto insuficiente para el tráfico vial de todo tipo, que por esa vía se transportan hasta la ciudad de Manta y desde ahí hasta Esmeraldas.
El tramo Guayaquil – Santa Elena resulto estrecho pese a contar, con dos carriles de ida y dos de vuelta, con parterre o zonas de –parqueo divisorio. Sobre todo en épocas de feriados, fin de año, Carnaval y Semana Santa, que se da un éxodo de turistas nacionales impresionante hacia estos balnearios de la Costa ecuatoriana.
A través del sistema de Alianzas Público-Privado, el Presidente Correa abordo en una “Sabalina”, el tema de estas carreteras antes referidas –marzo 20/2017 en Santa Elena- e informó que había dictado el Decreto correspondiente el 7 de Febrero del 2017.
Presumimos que el ancho de esta vía, Progreso – Playas, será de 3 a 4 carriles, tanto de ida como de regreso. El costo que ha indicado sería de Doscientos Treinta y Cuatro Millones de Dólares, -propuesto por la empresa que ya ha realizado los estudios técnicos correspondientes.
El Mandatario Correa, indicó que el 20 de Abril, se habrían las ofertas al público para los pagos respectivos a través del sistema digital y se adjudicará la obra a la oferta más conveniente, – explicó.
Ya hay un cronograma indico: El 19 de Mayo, se hará la evaluación de ofertas; la adjudicación se hará el 6 de Junio y el contrato se firmará el 13 de Junio. Esto es, lo firmará el nuevo presidente de los ecuatorianos, ganador en las elecciones presidenciales del 2 de Abril, próximo pasado (2017).
Hay algún descontento de la población y de las Autoridades Seccionales –Cantonales y Provinciales-, sobre el futuro costo del peaje a cobrarse, tanto para ir a Playas, como para viajar a Santa Elena.
La Prefectura de la Provincia de Santa Elena, se ha sentido -relegada en cuanto a la construcción del tramo Progreso-Santa Elena se refiere y se ha quejado de no haber tenido información sobre este proyecto vial, con la suficiente anticipación, para intervenir en el concurso o en la misma realización del proyecto vial, con sus propios fondos y con fondos gubernamentales.
Lo cierto es que el proyecto vial, ¡va porque va! . Y se hará, duélale a quien le duela.
Si hacemos un cálculo aproximado del costo X Km. de estas carreteras, tendríamos lo siguiente: 100 km. Desde Guayaquil a Santa Elena + 25 km. Desde Progreso a Playas, sería en total 125 kms. de carretera, al costo de $ 234 millones, tendríamos un aproximado de $ 1.800.000.00 por km., esto es, casi + de 3 veces el costo de una autopista alemana.
Entendemos que abría que ampliar muchos tramos y puentes de esta vía, y fortalecer otros, con este “Niño” atrasado, que está causando estragos en las vías de la costa ecuatoriana principalmente. Si nos parece que aún así, resultan altos los costos de reconstrucción vial que se harán, por cuanto las dos carreteras existen y en buenas condiciones.
Solo queda esperar, si acaso, hay ofertas que logran bajar los precios por kilómetro de esta obra, en esta crisis. Siendo necesaria su ampliación, las mismas brindarán a los turistas nacionales y extranjeros, la comodidad y la seguridad vial que requiere el turismo, para mejorar el ingreso percápita de los ecuatorianos, de los constructores, de los empleadores y del Gobierno Nacional.
Queda por resolver el costo del peaje, y el destino de estos valores al mejor postor.
Por su parte la Prefectura del Guayas, aspira recuperar $25 millones, que invirtió en esa “Autopista Progreso-Playas”, en dos años, por parte del Gobierno Nacional, mediante la firma de un Convenio con el MOP y devolver la respectiva Competencia….
¿Seguirá la danza de los millones? Yo creo que sí.
Me parece haber leído en la prensa local, hace unos dos o tres meses, que el Gobierno ecuatoriano había suscrito un contrato de concesión de la vía Guayaquil-Salinas, por cinco años, con la compañía constructora Verdú, la cual se encargaría del mantenimiento permanente de la vía y cobraría el peaje respectivo. Con el peaje, Verdú se resarciaría del costo de mantenimiento. Sería bueno confirmar esto, ya que lo que Sucre dice no coincide con la versión de prensa que leí.
La delicadeza y corrección con que trata el caso , Marías hace pensar en un caballero, así lo tratare. ETimado Sr. Calderón , me parece que seguir construyendo carreteras es una cosa por demás innesesaria, lo que el país necesita es un moderno sistema ferroviario y que no lo tiene que construir necesariamente la dictadura, sino la industria privada nacional e internacional. En términos absolutos y largo plazo, menos vidas perdidas en accidentes, menos contaminación de todo tipo, menos corrección, menos tiempo en transportar personas y mercancía y un larguísimo ETC. tenga Ud. Un magnífico día.
Se nota un comentario y hasta análisis diría, más sosegado y respetuoso, menos sesgado y prepotente golpista, será porque van asimilando de a poco la pérdida. En fin, lo importante es que no manipulemos en favor de intereses creados la opinión y los medios de información, azuzando y exacerbando a la gente para tenerla como carne de cañón.
Uds, tienen (antes la pluma) ahora el teclado para ilustrar al pueblo en los ámbitos políticos, económicos, empresariales, laborales, de inversión, para enseñar y exigir obras y servicios de calidad, mas carreteras, ferroviarios, puentes, todo lo que se necesite y se pueda construir, que bueno, apoyemos, pero desde la racionalidad, no sabotear todo desde el golpismo y sedición, en esto último Correa fue blando y permitió la malcriadez y agitación de seudos editorialistas y periodistas y medios de comunicación, ojalá Lenin no se deje manipular y ponga mano dura con tanto odiador y golpistas que salen en todos los medios todos los días a criticar todo lo que se haga, nosotros trabajamos con los ecuatorianos para los ecuatorianos en el Ecuador, no tenemos empresas off shore, dineros afuera del país, empresas en otros países, inversiones en paraísos fiscales, solo tenemos a Ecuador y a los ecuatorianos, y también defenderemos esta posición de trabajo y paz en las calles, esta vez la gente fue prudente y no salió pero no siempre será así, y quienes mantenemos esta onda deberíamos identificar y enfrentar a quienes quieren el caos político y del País.
Gracias Armando B., te he contestado por mi mail. Gracias por leerme.Gracias Carlos F. Estoy de acuerdo con su criterio, le he respondido por mi e-mail. Gracias por leerme. Señor Quintana No ha entendido mi artículo Ud. es un fanático.Por favor no me lea. Gracias a todos mis lectores.