Los abusadores

Los hay de muchos tipos y de varias edades, desde los compañeros de Colegio (aún en los de kínder ocurre) que hacen bullying a los más débiles o tímidos, pasando por los narcotraficantes que por lograr ganancias con su ilícito negocio, inducen a otros al consumo y a la denigración, hasta los terroristas que no tienen reparos ni por su propia vida, con tal de romper el orden establecido.

Los motivos también son múltiples. Van desde el aburrimiento, por no tener otra cosa que hacer, pasando por la envidia o el complejo de inferioridad, de creerse superior a los demás, o por dárselas de “machito” para ocultar su verdadera cobardía, hasta los que quieren aprovecharse de los demás, los que quieren robar, o los que no quieren dejar de robar, los que lo hacen por venganza o por querer demostrar su poder. También es usado por los que quieren aferrarse a su puesto y seguir ejerciendo el cargo que ocupa.

Estas personas, por lo general, tienen complejos, y su escudo es justamente el abuso. En esa forma, sobre todo, si tienen la autoridad, pueden ejercer su abuso sin que su contrincante pueda defenderse, porque ellos tienen el poder de su lado. Por lo general son cobardes, pueden ser fuertes físicamente, pero en su interior son acomplejados, porque tienen el conocimiento propio de su poca valía. Estos individuos, muchas veces buscan unirse en grupo, para poder ejercer el terror y su prepotencia, amparados por sus similares. Buscan alcanzar el poder para lograr continuar abusando de los demás. Incluso, si tienen capacidades verbales, labia fácil y dotes de artista para manipular las masas, pueden llegar a convencer a los más débiles y a los más ingenuos, si es necesario mintiendo a diestra y siniestra, prometiendo hasta lo imposible para poder conseguir sus fines.

Estos seres, desgraciadamente existen, y tenemos ejemplos claros de su proceder en varios personajes de la historia. Calígula, Hitler, Lenín, Stalin, Castro, Chávez, Pinochet, Maduro, etc. Hay una gran similitud en su forma de proceder: Todos ellos han impuesto, en base al terror su estilo de Gobierno, actuando cruelmente contra los que consideran sus enemigos. Analicemos, como ejemplo, por ser el más actual, al personaje que de acuerdo con los comentarios, pensaba venir a Ecuador, para el cambio de mando, al que el Municipio del Cabildo Metropolitano de Quito, quiso declararlo huésped no grato de la Ciudad, y el Municipio de Guayaquil ha manifestado públicamente también su repudio (al fin, con buen criterio, para preservar su vida, decidió no venir).

¿Por qué motivo se expresa el repudio a su presencia en nuestro país? Luego del período asqueroso del Chavismo en Venezuela, y luego de la muerte de Chávez, asumió el poder y lo que ya se había iniciado, en los períodos de Chávez, pese al auge económico del petróleo, comenzó a sentirse en las necesidades del pueblo en Venezuela. La escasez de alimentos se fue haciendo más y más crítica, Empezaron a faltar los medicamentos básicos, las estadísticas de salud se volvieron caóticas, el pueblo llegó al límite máximo de tolerancia posible, y al fin, arriesgando todo, salió a las calles en protesta cívica y pacífica, que al comienzo el Gobierno las reprimió en forma normal, pero ante la presencia de millones de venezolanos protestando, siempre en forma pacífica, fueron intensificando la represión, primero con bombas lacrimógenas, luego con balas de goma, perdigones y por último, con balas, matando a varios de los que protestaban. El pueblo entonces, se inventó las bombas popotov para detener las tanquetas, los grupos civiles armados y al ejército, que continuaron matando a los venezolanos que protestaban. Un enfrentamiento de pueblo contra pueblo, por defender un Gobierno que ya hace mucho dejó de ser democrático y se convirtió en una dictadura fatal.

El mundo mira impávido la desgracia de nuestros compatriotas venezolanos, y nadie se arriesga a echar la primera piedra. Creo que es hora de acabar con estas dictaduras criminales. La prepotencia de algunos gobernantes y el afán desmedido de poder, llevan a ello. Las organizaciones como la ONU, la OEA y demás deberían tener la obligación de detener estos atropellos y estas dictaduras. Los pueblos deben ser libres de decidir su futuro.

Un problema que me preocupa, es lo que llamamos mayoría. Cuando se siembra el odio entre hermanos y se divide al pueblo en dos grupos, el mandatario no es el líder de un grupo, es el Presidente de todos los habitantes, coidearios o no, y debe tener la delicadeza de manejarse con respeto y buscar ser el Presidente de todos. Aplaudo la sensatez de nuestro Presidente Moreno, que pese a todas las directas e indirectas del mandatario anterior, está manejando el país con sensatez, prudencia y buen criterio. Ojalá siga demostrando un cambio en el sistema de Gobierno y en la forma de proceder. Que se acaben los insultos, que termine la corrupción, la prepotencia y el abuso, y el país vuelva al cauce de la democracia.