“Todo lo que te hace falta para descubrir el ego, es una palabra de adulación o de crítica”. Anthony de Mello
“El amor es feliz cuando puede dar algo. El ego es feliz cuando puede quitar algo”. Osho
“El ego es simplemente una idea de quién eres que llevas contigo”. Wayne Dyer
“El ego es tu imagen, es tu máscara social; es el papel que estas desempeñando. Tu máscara social crece con la aprobación, quiere controlar y se sostiene con el poder porque viene del miedo”. Deepak Chopra
“Quien controla tu ego controla tu vida”. Joseph Garzozi
Es muy complejo resumir y analizar el ego desde los diferentes conceptos y entendimientos; intentaré resumirlo en esta breve reflexión.
Para la psicología, el ego es la instancia psíquica a través de la cual el individuo se conoce como “yo” y es consciente de su propia identidad.
En el lenguaje común se entiende el ego como el exceso de autoestima, de ello deriva el término ególatra para quien practica la egolatría, que es una valoración y amor exagerado de sí mismo.
Tenemos por otra parte al egoísta, palabra adjetivo con el que calificamos a las personas que solo piensan en sí mismas, priorizan sus intereses y les importa nada o muy poco los demás, subestimándolos o mostrando poco interés por los mismos.
El ego es como un orgullo de uno mismo y una forma prepotente de tener siempre la razón, y si no la tiene, busca siempre justificarse.
El ego es el punto de percepción y referencia de los fenómenos físicos, de procesar y mediar entre los ideales de su súper yo y las realidades del mundo exterior, así como de sus instintos.
Por lo expuesto, el ego distorsiona la realidad, las personas viven dominadas por el ego, engañadas, no ven la realidad, se creen superiores y siempre creen tener la razón. Según Freud, él cree que el ego trasciendo el sentido de uno mismo para convertirse en un sistema de procesos psíquicos de funcionamiento de proceso intelectual, síntesis de la información y memoria entre otros.
El ego resume todo lo que eres, crees y escuchas, por ello es que entre los pensamientos que encabezan esta reflexión, expresé que “quien controla tu ego, controla tu vida”, pues manipula tus acciones y decisiones, trabajan en lo que ensalza o halaga tu ego. Controla tu ego para que equilibres y controles tu vida.
Concluiré con una reflexión anónima que viene muy a propósito de cómo se comportan nuestros políticos y sus egos, dice así: “Si valoras y alimentas el ego cuando hay reconocimiento público, asegúrate que sea compatible con los actos, porque si en verdad prevalecen los valores de honestidad, admitir el fraude sería más valeroso y honesto que llevar honores inmerecidos.”