Autodeterminación de ¿Los pueblos?

Veo con preocupación la forma cómo el mundo actúa. Tenemos el trágico ejemplo de Venezuela y me pongo a pensar en nuestro querido Ecuador, que ha estado al borde (aunque somos tan ciegos que no nos hemos dado cuenta) de llegar al mismo fatal destino.

El primero de abril de este año, el pueblo de Venezuela, sin armas, pero con el coraje movido por la desesperación y el hambre, empezó a protestar en la calle y la respuesta del Gobierno fue gases lacrimógenos, bala, encarcelamientos, golpizas, terminando por decretar una dictadura y llamar a una constituyente, desconociendo al Congreso democráticamente elegido, pese a que el pueblo rechazó con una votación en contra de más del 98% ese llamado.

Las grandes autoridades mundiales (en este caso, ONU, OEA), han rechazado este abuso contra el pueblo, lo mismo que los Gobiernos racionales del mundo. Sin embargo, con el poder de las armas, el Gobierno venezolano continúa con la represión, que ya lleva un centenar y medio de asesinados y miles de heridos y presos.

Las grandes autoridades (ONU, OEA), no actúan como deberían, por la autodeterminación de los pueblos. Sería una obligación para el mundo, defender a este pueblo oprimido, vejado, muerto de hambre y necesidades por la corrupción y el narcotráfico que impera en las élites gobernantes.

Autodeterminación ¿de los pueblos? Suena ridículo oírlo o leerlo, cuando el pueblo es el que se está muriendo de hambre y necesidad. Será la determinación del gobierno, o la autodeterminación del dictador. El pueblo está sojuzgado ¿y el mundo? Bien, ¡gracias! ¿Esta es la forma cómo los países hermanos ayudan a los caídos? Es decir, ¿el abusivo, el prepotente, el que tiene el poder, tiene patente de corso? ¿A esto llamamos democracia? Colombia premia a los guerrilleros de las FARC, En Ecuador estamos intentando terminar un viraje de la tortilla, donde queremos que los ladrones, los corruptos, los abusivos, los con patente de corso, que se han enriquecido vilmente coman m—– (y vayan a la cárcel) y los pobres puedan compartir el pan. ¡Es cierto!, en el período que acabamos de pasar, se dio al pueblo, pero para domesticarlo, se les dio mendrugos, mientras se llevaban en peso el petróleo, las minas y todo lo que podían.

¿Es que acaso no es posible que tengamos gobernantes que piensen en el pueblo? Recibir dinero por conceder obras, o por elevar los precios, ¡es CORRUPCIÓN! Poner a los familiares en puestos gubernamentales, vender los puestos para trabajar en Hospitales, escuelas, o cualquier puesto en el Gobierno, Municipios o cualquier otra entidad, así sea a un centavo, ¡es CORRUPCIÓN! Comprar jueces, o imponer sanciones por poder, ¡es CORRUPCIÓN! Favorecer a un amigo dándole un contrato aunque haya alguien con una mejor oferta, ¡es CORRUPCIÓN! Favorecer a alguien para ayudarlo a lograr algo, por el motivo que sea, ¡es CORRUPCIÓN!

¡Creo que el mundo debe reflexionar! Ya es hora que la gente digna, que aún es mayoría, nos unamos y reclamemos. Es hora de exigir la liberación de Venezuela y que el mundo enderece su rumbo.